La Musica Que Guarda Mi Corazón

9. Segura y Bam-Bar 2

<<Antonella>>

Cuando llegue a Bam bar jamás imagine que vería a Ryan aquí. Por lo que he escuchado él no es de los que salen, pero si eso fue una sorpresa todo cambio cuando lo vi parado frente a mi mesa estaba con dos de sus amigos Spike el cual era rubio y tenía los ojos verdes y Sean que era moreno ojos marrones.

En el momento que se sentó junto a mí no pude evitar observarlo su cabello desaliñado y sus rostro fruncido dándole un toque de chico brabucón. No podía evitar pensar que pasaba por su cabeza cuando mire mi mesa ya Sofí y Kayla estaban entretenidas hablando con Spike y Sean y los únicos en silencio éramos Ryan y yo, comencé a jugar con mi brazalete pensando si es bueno que diga algo o no, ¿pedirle disculpas por lo que paso? Tal vez sería una opción... sin embargo no pude terminar de decidir ya que su voz atravesó los rubros de mis pensamientos.

─Así, que tu nombre es... Antonela. Levante la mirada para encontrarme con profundos ojos azules mirándome.

─Si esa soy yo, aunque prefiero que me digan Anto y ¿tú eres Ryan?. Dios porque dije eso y ¿porque estaba nerviosa? esta sensación es horrible y la pregunta millonaria es porque me puede preocupar lo que este chico piense de mi... No es como si fuera importante ¡Cierto!.

Bueno con mi nerviosismo y contando el hecho que tenía tiempo sin hablar con un chico. Oh bueno (exceptuando los que e insultado)... pero eso es otra cosa solo an sido como siete u ocho, eso no es nada.

Por eso me gusta ocultarme... no me gusta hablar con personas ya que siempre quieren saber de mí, y eso es un límite inquebrantable, sin embargo Ryan tenía algo que me hacía sentir cómoda lo que me daba más miedo aun. Él me sonrió. Dios hasta sonriendo era lindo... me concentre en los hoyuelos que se formaban en sus mejillas, los cuales nunca había notado...

─ Sip. Eso parece..!. Dijo Ryan sacándome de mis pensamientos, Tomo un trago de su cerveza y continúo. ─ Y ¿vienes seguido por aquí?

─No, normalmente no vengo a estos sitios, a menos que sea obligada! Dije señalando a mis amigas quienes pusieron cara de angelitos y me guiñaron un ojo con una media sonrisa. Ryan me miraba como si estuviera analizando cada uno de mis movimientos y eso provocaba que mi cuerpo tuviera espasmos de nerviosismo cada momento...

─Te entiendo, yo tampoco estoy familiarizado con Este tipo de sitios.

Si existiera el chico perfecto para mí... seria este pero... yo no podía enamorarme no debía creer en el amor, Ryan era sincero aunque sentía que había muchas partes de él que mantenía ocultas en las sombras de sus ojos, los cuales reflejaban tristeza y me dieron ganas de saber todo de él. Pero era algo que no quise preguntar pues quizás sus sombras son tan profundas como las mías y ninguno de los dos estamos preparados para liberarlas... las sombras son partes de nosotros de las que estoy segura que ninguno de los dos querrá compartir.

─ Y que año estudias?

─ Mm, último año.

─ Sip, yo también.

─ Lo sé; estamos juntos en cinco materias.

El casi se ahogó con la cerveza y sacudió la cabeza.

─ En serio! Solo te había notado en una.

─ No importa normalmente nadie me nota.

En eso la música del karaoke comenzó a sonar, llevaba rato un poco abrumada por la música pero estaba aguantando bien, y cuando hable con Ryan casi lo olvido pero cuando el karaoke cambio con una canción del grupo Sox music. Que se titulaba “You and My forever”. empecé a hiperventilar los recuerdos de mi mamá cantándome, mi papa y Andrew componiendo, mama cocinando y yo cantando, lagrimas empezaron a recorrer mi rostro me levante y corrí sin mirar atrás, corrí hasta que sentí la adrenalina drenar mi cuerpo lloraba sin cesar, corrí hasta una cuadra más arriba del Bar necesitaba estar sola, caí sobre mis rodillas y llore, dos veces en un día me había sentido débil ya no sabía cómo mantener mis fantasmas ocultos los cuales me atormentaban cada instante con salir.

Fue en eso cuando sentí unos brazos que me rodearon, sentí miedo y me limpie los ojos para ver quien me tenía y me encontré con unos ojos azules mirándome, no aguante más y me recosté en su cuerpo llorando, no sabíalo que hacía pero cuando mire sus ojos lo supe con este chico me sentía “Segura”