La Musica Que Guarda Mi Corazón

12. Sentimientos

<<Ryan>>

La práctica de hoy, había sido una completa locura, tuve dos amonestaciones por falta; algo que era raro porque nunca las tenía, o bueno nunca dos en un mismo juego, por lo que tuve que enfrentarme a una estúpida charla con el entrenador sobre los errores, amonestaciones y bla, bla, bla deje de prestarle atención, por lo que ahora me dirigía a las duchas a quitarme este asqueroso olor de mono sudado.

Saque mi toalla y me metí en una de las duchas que encontré desocupada; abrí la llave y el agua empezó a correr sobre mi cuerpo, me gustaban estos momentos porque podía pensar sin problema, los chicos podrían estar con sus payasadas del otro lado, pero el agua cubría todos los sonidos, me estregue cabello, y sonreí al notar que ya estaba algo largo, me tocaba un corte pronto.

Empecé a pensar y lo primero que llego a mi mente fueron esos ojos marrones, como se sentiría el sábado ¿sola tal vez? Hoy no la había visto por el colegio era increíble el efecto que esa chica causaba en Mí, siempre que escuchaba música me daban ganas de destruir cosas; sin embargo el sábado al llegar a mi casa me sentí tranquilo.

Una media sonrisa cubrió mi rostro al acordarme de ella, será ella la luz que necesito para soportar mis sombras, si tan solo alguien creyera en mí ¿podría ser capaz de recuperar quien alguna vez fui o verdaderamente ya mi corazón había dejado de latir?.

Cerré la llave, y me dirigí afuera con los chicos; acercándome a mi casillero me puse mi bóxer. Spike y Sean se me acercaron y empezaron a preguntarme sobre lo que dijo el entrenador, los mire preparándome para responderle cuando la puerta del baño se abrió mostrando a la chica que había ocupado sus pensamientos todo el fin de semana, acompañada con su amiga, venían todas desordenadas como si hubieran estado corriendo y por lo visto no se habían dado cuenta de donde estaban, ellas reían y hablaban calladamente por lo que no pude escuchar mucho de lo que estaban diciendo.

Sin embargo los chicos del grupo miraban con diversión la escena por lo que también lo hice, mientras no se voltearan todo estaría bien, estuvimos un rato escuchando, hasta que Bratt las llamo... Bratt es el chico loco del grupo, un presumido y egocéntrico rubio, pero en fin no es importante; cuando ellas notaron que estábamos allí; sus rostros se tornaron rojo, no pude evitar la media sonrisa que se curvo en mi rostro al ver la escena, vi como ella se cubrió la cabeza con su capucha mientras Sofí no dejaba de vernos, ella levanto su mirada observando hasta que se encontró con la mía.

En ese momento fue como si el tiempo se hubiera detenido la gravedad, el aire, los sueños que perdí, fueron recuperados en aquel momento, mis padres, Lara, la Música, quería golpear algo y no quería que ella viera mi reacción por Dios porque me interesaba la estúpida chica, termine de vestirme lo más rápido posible y salí de ahí a toda velocidad, ni siquiera la mire aunque podía sentir sus ojos pegados a mi todo el tiempo, sentí a Spike llamarme pero lo ignore completamente ¿porque está pasando esto? ¿Porque ella despierta en mi todos esos recuerdos?

La lluvia estaba cayendo, por lo que grandes gotas cubrían mi cuerpo mientras corría por el gimnasio. Me senté detrás del árbol que estaba detrás de la cancha de futbol, mientras lagrimas corrían por mi rostro... joder odiaba llorar hace dos años no sentía esto ¿qué me está pasando?

Respire profundo intentando calmar el dolor y me alegre de que estuviera lloviendo... estúpidos recuerdos esto había dejado de pasarme ¿porque está pasando otra vez?
No quiero tener corazón... detesto llorar, odio sufrir... no quiero ser débil joder es tan difícil entender eso... clave mis manos en la arena y sentí como alguien colocaba sus manos sobre mí levante la mirada y me encontré con los ojos de Spike... él estaba igual de mojado que yo (Y no por salir de la ducha exactamente) me miro pacientemente y se sentó junto a mí... No hablo solo espero hasta que me calmara por lo que me fui relajando Spike era mi apoyo... siempre lo ha sido y no sé qué sería de mi sin él.