CAP. 9 - Tu Lienzo

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Adam con su mano izquierda completamente bañada de pintura azul comenzó a acercarse a mi. Deslizando sus dedos sobre mi pecho. Como pincel sobre tela pintaba. Hacia diferentes movimientos con su mano, marcandome muchos garabatos sobre mi pecho y hombros. Yo me dejaba pintar, el era quien tocaría mi cuerpo, yo podría ser su lienzo si el lo quisiese.

Me miraba mientras este seguía con su arte. Buscaba diferentes potes de pintura y los ponía a mi alrededor, y volvía a sumergir sus manos en ellos, pintura de diferentes colores, creando un contraste primeramente sobre mi pecho. Luego en mis brazos.

Se notaba la calma y la suavidad de sus manos al acariciar mi piel, lo hacia con total delicadeza. La pintura se sentía fría pero en sus manos encontraba el calor. Sus movimientos, su delicadeza, sus expresiones al tocar mi cuerpo, me fascinaba.

Cada vez que terminaba de garabatear con un color, tomaba otro. Fue a mi espalda, pintando con ambas manos un color distinto en cada una. Sus manos fueron descendiendo hasta mis glúteos. Los apretó travieso. Reí.

Pintó de colores diferentes mi cuello, y fue subiendo a mi barbilla, a mis mejillas, luego a mi boca. Sus dedos pasaron tocando mis labios y me miraba. Me acerque para besarlo. El puso su mano en mi rostro y me empuñó de regreso.

-Te dije que fueras paciente. Quedate quieto- Sabia que yo no podía estar tan tranquilo por mucho tiempo, y le daba gracia. El solo reía mientras seguía terminando de pintar mi rostro. Sin adentrar pintura ni en mi boca ni en mis ojos.

Fue a mi cabello, dejándolo de muchos colores de muchas tonalidades. Yo no podía verme. Solo me imaginaba lleno de pintura y sin ninguna forma.

Termino con mi parte superior, fue hacia la inferior. Mientras pintaba mis piernas me sonrojaba. Sus manos eran suaves, no sentía vergüenza, pero si sentía algo... No sabría como expresarlo, simplemente me encantaba.

Termino de pintar hasta la punta de mis pies, de diferentes colores y con contrastes diferentes. En eso se fue a mis caderas. Me sonroje mas. Mientras llenaba sus manos de pintura, yo intentaba forzar mi cuerpo a que no reaccionara ante estas sensaciones.

Adam con su mano llena de pintura toma mi pene y comienza a masajearlo fuertemente para pintarlo completo. No pode aguantar mas, estaba erecto, justo frente a Adam. Comencé a reír algo avergonzado de mi actitud, parecía un puberto.

El me miro y comenzó a reírse, sabia que era débil ante el, su mirada, apenas el sentirlo era mi afrodisiaco.

-Eres malo-. No podía ocultar la sonrisa en el rostro, pero no conectaba miradas con el.

-Eres un desvergonzado-. Con dos diferentes pinturas mas término de pintar mi pene y testículos. Solo le tomo una hora pintarme entero de diferentes colores. Comenzó a chispiar pintura con sus manos por todo mi cuerpo.

-Solo falta una cosa-. Saco del bolsillo de su delantal una pequeña bolsa de escarcha y bañando su dedo comenzó a trazar bajo mis ojos, mis cachetes y mi barbilla.

-Termine...una de mis mejores obras-. Dijo mientras pasa su mano por su frente, llenadola de pintura. Prosiguió a secarse las manos con un trapo y tomar la cámara. -Posa para mi bebe-. De su cámara comenzaron a salir varios flash, tomando fotos consecutivamente. Yo no era modelo y mucho menos sabia que hacer, solo intentaba ser natural. Sonreía. Aveces serio, o hacia algunos a estupidez que se me pasará por la cabeza.

En uno de esos momentos Adam se pudo acercar lo suficiente a mi, como para yo poder tomarlo del brazo y halarlo. Lo abrace. Llene de pintura su ropa. Lo estrujee fuerte sobre mi pecho. El intento separarse.

-Espera...-. Se separo de mi y dejo su cámara en la mesa, apuntandonos, la programó para que tomase fotos ella misma después de un tiempo transcurrido. Volvió a acercarse a mi.
le quite su mantel, tome los bordes inferiores de su camisa la desprendí de el, dejando su pecho desnudo. Me agache a tomar uno de los potes de pintura y yo al igual que el sumergir mi mano. La cámara comenzó a tomar foto tras foto mientras yo pintaba su pecho con dos de mis dedo. Subieron a sus mejillas. Tome su mentón y pegue mis labios a los suyos.

La cámara seguía lanzando flash mientras nosotros profundizabamos el beso. Sus labios se sentían demasiado bien aunque los mios estén llenos de pintura. En eso se me ocurrió una maldad. Eleve el pote de pintura sobre nuestras cabeza y derrame todo el liquido sobre nosotros. Adam se separo del beso de la impresión. Se quito la pintura de los ojos y cerca de la boca y me sonrió. La cámara seguía tomando fotos de nuestro encuentro. Llenos de pintura. El besandome a mi. Yo acariciando su espalda regando mas la pintura.

...

Entramos al baño, juntos. Abrimos la llave de la regadera. Cerramos la puerta con seguro. El sonreía, yo sonreía. Ambos completamente desnudos en el baño, cubiertos de pintura. Entré a la ducha con el. El agua que caía comenzaba a quitar la pintura de mi rostro y cabello.

El se pego a mi. Me besó. El agua nos mojaba a ambos. Recorría nuestros cuerpos, nuestros penes erectos. Yo frotaba su pecho con un jabón, mientras el solo acariciaba mi espalda. La pintura comenzó a caerse en gran parte de nosotros. El tomó el jabón de mis manos y comenzó a frotar mi abdomen. Mordisqueaba su labio inferior. Bajó su mano hasta alcanzar mi pene. Lo cubrió completamente de jabón.

Cerré la llave. Lo mire a los ojos. Deslizaba mis dedos desde sus labios hasta su pecho. Hice voltear su cuerpo y arrebate el jabón de sus manos. El se inclino, sintiendo mi pene erecto y cubierto de jabón entre sus glúteos.
Pasaba el jabón por su espalda. Movía todo mi cuerpo para que mi pene sintiera sus glúteos. El chico acelero su respiración, termine de enjabonar toda su espalda. Volví a abrir la llave dejando caer el agua para que el jabón cayera. El liquido enjabonado descendía hasta llegar a sus glúteos y de igual manera lavar mi pene.

El volvió a voltearse y bajo a mis caderas. Tomo mi pene entre su mano y comenzó a frotarlo. Mi cuerpo se calentó completamente. El chico comenzó a hacerme el oral mientras el agua caía sobre mi pecho y se deslizaba hasta mi genital.

Frote el jabón en mi pecho, mientras de mi boca salían jadeos. El moreno siguió haciendo el oral, que calentaba aun mas mi cuerpo, calor que ni el agua apagaba o saciaba. Se separo de mi pene y beso de manera ascendente mi cuerpo. Volvio a llegar a mis labios.

...

El me pasó la toalla. Ya estábamos en su cuarto después de hacer todo tipo de locuras en el baño. Empezamos a vestirnos nuevamente, esa fue una de mis mejores duchas, no dejaba de verlo mientras se subía la ropa interior. Su cuerpo marcado por el ejercicio. Era tan sexy.

-¿Que piensas hacer con las fotos?- Le pregunte.

-Es una sorpresa...- Reía. Tenia algo planeado entre manos. Me acerque a el. Pegue su frente a la mía y tome su mano.

-Puedo ser tu lienzo cada vez que me lo pidas...- Le dije con todo corazón, podía sentir mi respiración pausada. Cerramos los ojos.

-Eres una de mis mejores obras- Puso su mano en mi mejilla. Me beso tiernamente.

-Te amo...- Llevaba un tiempo sin decírselo, hacia falta.

-Yo te amo mas- apretó mi mano con seguridad. Luego se separo de mi. -Vistete, vamos a comer afuera juntos- Aclaro mientras buscaba su pantalón y se lo ponía.

-Y, ¿Que haremos con el desastre de abajo?- Mencioné.

-Después nos encargamos de eso, pero ahora, salimos-

Lo mire a los ojos y acente con la cabeza. -Esta bien-

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