I M P E R I O |Draco Malfoy |Tom Riddle| (Editando) (Book 1)

Lazos de sangre.

—Os estaba esperando.

Las luces se encendieron y Malfoy asustado alzó su varita a puntando aquella señora. La señora se sentó en la única butaca que había, sin mirarlos. Una vez sentada se dirigió hacia Malfoy;

—No voy hacer nada, como ya he dicho os estaba esperando —dijo la señora tranquila, ahora dirigía la mirada a los dos. 

Hope le dio un codazo como señal de que bajara la varita y dudosamente lo hizo. Pero lo que la castaña no dejaba de pensar era por qué aquella señora, le era tan familiar.

—Vamos chicos sentaos, debéis de estar cansados —les dijo señalando con la mano el sofá que daba el frente donde se sentaba.

Ambos se miraron por unos segundos hasta que Hope decidió sentarse por su propia cuenta. Se sentó mientas que Malfoy solo se quedaba de pie, mirándola a que dijera algo. Era una situación incómoda pero por fin la bruja cayó en la cuenta que la señora a la que tenía delante era Bathilda Bagshot. Recordó que en esta época todavía vivía en el valle de Godric. Ahora todo tenia sentido para ella, por eso tenia el cuadro colgado de Grindelwald y Dumbledore.

—¿Usted es...? —le preguntó Hope.

—Soy tu tía bisabuela —contestó sonriendo, siguió mirándola y prosiguió—. Pero no es lo que importa ahora. Dumbledore me advirtió hace mucho tiempo que ibas a venir y me dijo que te ayudará a entrar en Hogwarts.

Hope asintió con la cabeza. Malfoy resopló, se sentó sin dejar de mirar a la castaña y cruzó sus brazos llamándole la atención. Ella sabía lo que  él quería, respuestas. Él no entendía lo que estaba sucediendo. Desvió otra vez su mirada hacia Bathilda;

—¿Pero cómo iba a saber usted que íbamos a parar a esta casa? Dumbledore no me dijo nada sobre ti... —le preguntó frunciendo el ceño.

—No lo sabía. Solo era intuición, aunque sí que sabía que vendrías a este pueblo y por eso hechicé esta casa para que por fuera se pareciera abandonada... La verdad es que a sido suerte, sino hubiera tenido que ir a buscarte —explicó.

—Dumbledore no me dijo nada de esto... —le dijo negando con la cabeza. La carta que le había dado Dumbledore no decía nada de aquello...

—A mí tampoco que ibas a venir acompañada. Bueno... ¿Tenéis hambre? —preguntó Bathilda cambiando de tema y ahora sonriéndole a los dos.

Ambos asintieron al mismo tiempo. Bathilda se levantó y desapareció por el pasillo que había debajo de las escaleras. Hope miró a Malfoy, le debía una buena explicación y procedió hablar:

—Creo que te debo muchas preguntas... —prosiguió—. Ya sabes que estamos en otro año, exactamente qué en el 1942.

—¿Y...? —Malfoy le preguntó alzando una ceja.

—Dumbledore antes de morir me escribió una carta. Decía que debía utilizar el giratiempo para poder detener a tiempo a Voldemort —dijo articulando bien mis propias palabras.

—¿Por qué me llevaste contigo? —preguntó sin dejar de mirarla.

Algo por dentro de Hope se revolvió y apartó su mirada. No tenía explicación para ello, exactamente no sabía el porqué lo llevó con ella.

—Eso dudo que importe —le contestó sería. 

Malfoy frunció el ceño ya que se dio cuenta del cambio de humor de Hope por su pregunta. No había parado de darle vueltas, ¿por qué ella le había llevado al pasado? ¿Para que? Se preguntaba el mago.

—¿A sí que estamos en el año del mini-Voldemort? —preguntó cambiando de conversación mientras se levantaba hacía el reloj que había colgado. 

—Si.

Bathilda entró interrumpiendo. Les dijo amablemente que entrarán a la cocina y comieran un poco lo que había preparado, mientras que ella se iba adormir:

«Lo siento mucho chicos pero mis artritis van acabar conmigo si no me voy a dormir ya. Mañana hablamos todo lo que tengamos que hablar. Ah y se me olvidaba, la habitación de los invitados está arriba, es la única puerta que ahí, buenas noches.»

Dicho aquello acabaron de cenar y sin decir ninguna palabra se dirigieron a la segunda planta de la casa. Una vez subida entraron en la única habitación que había, cuando entraron, Hope observó todo, la habitación era grande, había un baño, espaciosa y con solo una cama.

Perfecto pensó con ironía la bruja.

A Hope no le había agradado aquella idea de dormir junto a Malfoy, pero por otro lado, era lo único que había, además estaba muy cansada como para preocuparse por aquella tontería. No iba a ocurrir nada.

Malfoy vio la cara de disgusto de Hope y habló;

—No importa, dormiré en el sofá —murmuró Malfoy saliendo de la habitación.

—No te comportes como un crío Malfoy, tienes veinte años y ya eres bastante grandecito como para saber que la cama es grande y cabemos los dos —dijo, rodando los ojos y restándole importancia.

Malfoy asintió levemente, quitándose la camiseta y los pantalones. Se tumbó en la cama y se metió dentro, cuando acabó miró a Hope mientras que daba unos golpecitos con la palma de su mano al sitio que estaba libre. La castaña sonrío negando con la cabeza, a veces le sorprendía lo idiota que podía llegar a ser Malfoy.

Hope desabrochó el botón de su pantalón dejando así su grande camiseta de color gris, que me cubría más de la cuenta. Se acostó en la cama, le dirigió una mirada a su nuevo compañero, Malfoy apagó la luz, cerró los ojos y dejó que Morfeo le llevara hacia la oscuridad. 

Si...Lo sé, estos capítulos no son geniales que digamos para quienes no les gusta Draco Malfoy, pero tranquilos que ya mismo estará Tom Riddle. Lo bueno se hace esperar ¿No?