Lo suplicarán.

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—Que haces... —le dijo Hope, girándose y quedándose enfrente a él.

Draco le costó hablar, se aclaró la voz y dejó de agarrarla.

—Tengo que hablar contigo.

La castaña le miró seriamente ya que sabía perfectamente a lo que se refería.

—Tenemos que hablar —dijo Draco levantándose.

—Yo te lo dije, Draco —suspiró la joven—. Yo no tengo nada de que hablar contigo.

—Pero yo si.

Hope dejó de mirar a Draco y miró algunos alumnos que se sentaban tranquilamente a desayunar. Por una parte no quería hablar con él, no porque no quisiera, sino por si surgía de nuevo la conversación de porque ella le había besado aquella noche.

Y esta vez no tenía excusa... Era hora de poner las cartas sobre la mesa.

Ambos se dirigieron sin decir ninguna palabra hacía al lago, silencio que Hope agradeció bastante.

Cuando llegaron se sentaron enfrente del lago todavía sin dirigirse ninguna palabra.

—¿Todavía sigues teniendo pesadillas? —le preguntó Draco a la misma vez que se tumbaba en el césped.

—Siempre las tengo —le contestó frunciendo el ceño, acordándose y sumándole importancia hace noches atrás cuando había descansado tranquilamente sin ninguna de sus pesadillas atormentándola.

—¿Probaste en utilizar alguna poción? —le preguntó de nuevo el mago.

—Al principio funcionaban...—comenzó a decir—. Pero cuanto más pasaba el tiempo dejaron de hacerme efecto.

Finalmente Draco no contestó, solamente empezó a mirarla, empezó a mirarla como nunca lo había hecho antes. Sinceramente nunca se había replanteado la posibilidad de que existieran sentimientos hacia la bruja, pero sin embargo los había y dudaba abrir su corazón y confesárselo. 

—Hope, yo... —empezó a decir Draco.

—Draco —interrumpió Hope al fin mirándolo—. Se que es muy arriesgado y peligroso pero se nos acaba el tiempo.... Si no hacemos algo, Riddle volverá a soltar el basilisco y esta vez hará daño a alguien. 

—No bajaremos a la cámara de los secretos si eso es lo que quieres decirme —le dijo secamente dejándola de mirar—. No ahora que le obedece... Y déjame decirte que si por alguna casualidad Riddle nos descubriera no dudaría en matar a un Gryffindor y a una "Sangre sucia" —le aclaró dirigiéndose a ellos mismos.

—Pero si intento que me obedezca, a lo mejor...

—Sabes hablar parsel, si... Pero es imposible que puedas entenderla —dijo perdiendo la paciencia.

Hope suspiró, era imposible convencerlo...

—Está bien —dijo levantándose—. Lo haré yo sola.

Draco no dijo nada y suspiró, observó como se marchaba a la misma vez que pensaba que Hope era tan terca como su hermana y se golpeo mentalmente por no decirle lo que sentía.

La semana pasó volando, Hope estaba nerviosa ya que faltaba poco para el 31 de octubre que sería la cena de Halloween que se celebraba gracias a Slughorn.

Hope desayunaba tranquilamente junto a Alphard y Cygnus mientras hablaban del partido de quidditch que se avecinaba esta misma mañana, para la sorpresa de ella era que Theodore Nott no podía competir todavía y el equipo no tenía buscador. Estaba claro que ella quería ser buscadora y estaba dispuesta a ofrecerse jugar, pero solamente una vez.

Cuando acabó el desayunado ambos se colocaron el uniforme de quidditch y se dirigieron al campo de quidditch. Cuando llegaron Abraxas discutió con Alphard ya que estaba dispuesto en no dejarla jugar, pero como no tenían a nadie, al fin al cabo de tantos insultos hacia Hope la dejaron participar, pero lo que no sabían es que Hope juro vengarse. Juro vengarse de una manera diferente, no iba utilizar la magia en este caso, si no que cuando la vieran atrapar la Snitch con su propia mano, y gracias a ella ganar, estaba dispuesta a no participar nunca más, aunque podía hacer una excepción si se lo suplicaran.

Cuando Hope pasó con orgullo frente a todos los integrantes del grupo, Abraxas interrumpió sus pasos.

—Malfoy déjala en paz —le dijo Cygnus.

—Como perdamos por tu culpa, quien lo pagará serán tus amigos —dijo Abraxas dirigiéndose a Cygnus y Alphard.

Hope suspiró, estaba cansada de tantas amenazas.

—Es lógico, ya que ellos son mis amigos, pero déjame decir una cosa —dejó de mirar a Abraxas y empezó a mirar a todos los integrantes—. Espero que Nott no sea bastante torpe para la próxima vez, porque os aseguro que yo no estaré dispuesta cada vez que vuestro compañero le motive caerse de la escoba. 

Dicho eso Hope no dijo nada más, dejó que las serpientes la humillaran de nuevo, como si no fuera posible que una mujer jugará al quidditch.

Tom que había escuchado todo callado, no dijo nada, solamente la observó con desagrado, ya era costumbre, y más si perdían por su culpa, como dijo Abraxas, aunque sería él mismo quien se iba a encargar de que ella también sufriera. Como le gustaría.

Las gradas estaban repletas de alumnos que gritaban a todo pulmón, a Hope le desconcentraba el ruido, sin más demora se colocó sus diminutos tapones y dejó de escuchar.

El partido empezó cuando el arbitro Graves se colocó el silbato en la boca. Hope se alzó y voló hasta que su vista del campo fuera concreta así pudiendo saber dónde estaba la Snitch.

El partido avanzó, Ravenclaw estaba ganando por 20 puntos, hasta que Hope notó como su escoba tambaleó por el viento ya que el buscador del equipo contrario había pasado rápidamente persiguiendo la Snitch.

Hope sonrío y rápidamente su escoba voló hacia la otra dirección por donde iba el otro buscador, la bruja estaba dispuesta a encarase con el buscador, cuando sus escobas estuvieron a punto de chocarse , observó como la Snitch se deslizó para arriba como lo suponía, Hope se deslizó también evitándose así chocar con el otro buscador, teniendo así la Snitch al punto de mira.

Le costó pero lo consiguió, Hope había conseguido la Snitch dorada. Gracias a ella Slytherin había ganado.

I M P E R I O |Draco Malfoy |Tom Riddle| (Editando) (Book 1) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora