I M P E R I O |Draco Malfoy |Tom Riddle| (Editando) (Book 1)

Relaciones muy peligrosas.

Las serpientes se levantaron y empezaron a aplaudir eufóricos. Mientras que algunos alumnos de otras casas maldecían.

Se dirigió hacia Orion y Alphard que estaban haciendo señas para que se sentara con ellos. Se sentó en medio entre ellos dos.

Armando Dippet que era el actual director les dio una gran charla de que el bosque estaba prohibido para los de primer año y por último les daba la bienvenida a Hope y a Draco. Todas las miradas de los Slytherins se dirigieron hacia ella hasta que el director acabó su charla y aparecieron por arte de magia platos llenos de comida.

—¡Por fin! —Dijo Aphard a su lado poniéndose comida en su plato—. Ah...por cierto. ¿Como cojones has hecho lo de antes? Nadie de quinto ha conseguido hacer un Expecto Patronum. No todavía. Fue increíble.

—Vaya... Ah sí que eres tú —le dijo una chica de ojos verdes que estaba sentada enfrente—. Así que tú eres la hija adoptiva de la anciana Bagshot. ¿Es que te encargas de cuidarla? ¿Te dedicas a eso? ¿A cuidar ancianos?

A su lado Aphard bufó... El chico rubio qué anteriormente había entrado en el compartimento comenzó a reírse.

—Ya empezamos... —susurró Orion.

—Ella es mi hermana Walburga, no le sigas el juego por favor... —le susurró Alphard a Hope.

Hope no iba a contestar, no quería gastar el tiempo con aquella chica, pues no valía la pena.  Hope se puso unas cuantas patatas fritas en su plato y empezó a comer.

—Yo soy Theodore Nott —se presentó el chico que estaba sentado en la derecha de Walburga—. ¿Cómo que no entraste en primer año?

Aquel joven era el abuelo de Theordore Nott, la bruja no lo conoció mucho pero sabía que era el mejor amigo de su hermana, también sabía que había sido un mortífago, que después de eso intentó salvar a su hermana pero fue en vano ya que Voldemort lo descubrió y lo asesinó.

—No me hacía falta, aprendí yo sola. —obviamente en realidad no fue así, Hope estuvo apunto de decir que le había enseñado el mago más poderoso, que era Dumbledore. Ganas no le faltaron.

—¿Y tus padres? ¿Por qué no lo hicieron? —le preguntó Theodore.

—A lo mejor sus padres no son brujos —susurró Walburga mirándola con asco—. A lo mejor es una sangre sucia.

—Pues no lo sé, tal vez es porque están muertos —les dijo con frialdad evitando la respuesta de Walburga, no quería hablar de ese tema.

—Oh. ¿Y cómo murieron? —preguntó Theodore.

—¡Nott! —soltó Orion fulminándolo con la mirada.

—¿Qué pasa? Solo estoy preguntando.

—No pasa nada. ¿Quieres saber cómo murieron? Está bien. Gellert Grindelwald los asesinó —contestó mirándolo y después dirigiéndose  a Walburga—. Soy mestiza, mis padres fueron brujos, y no... No me dedico a cuidar ancianos como tú dices Walburga, pero si lo hiciera no sería de tu incumbencia.

Dicho eso Walburga le dedico una mirada de odio mientras que Theodore solamente asentía y se burlaba de ella. Nadie más hablo y ni le preguntó. Hope estaba cabreada. ¿Por qué Walburga se comportaba así?

Hope sintió de nuevo esa pesadez en su cabeza, observó a Dumbledore que estaba sentado disgustando su plato de comida, era imposible que él fuera esta vez. Miró a todos sus nuevos compañeros y se topó con un chico que le estaba mirando... ¿Con curiosidad? Tal vez. ¿Él quería entrar en su cabeza? Pues lo llevaba claro.

Miró hacia la mesa de Gryffindor, Draco estaba hablando tranquilamente con los leones. Hope debió de tener otra pesadillas de estas que no la dejan ni vivir. ¿Draco esta estableciendo una conversación normal con un Gryffindor?

—Hope... —la llamó Dolohov—. Te olvidaste esto.

Era su libro... Lo cogió y lo ojeo con cuidado. Todavía no se fiaban de Dolohov, podría ser un mortífago, todo estaba correcto, la página de los Horrocrux estaba sana y salva.

—Señorita Bagshot —le llamó el profesor Dumbledore—. Cuando termine, reúnete conmigo en mi despacho por favor.

Dicho eso Dumbledore se marchó.

—Orion...¿Sabes dónde está el despacho de Dumbledore?

Mintió. Sabía perfectamente dónde estaba.

—Ya te acompaño yo, no hay problema —le contestó.

—Está bien.

La cena acabó, Alphard y Orion se ofrecieron a acompañarle. Los alumnos se fueron a sus salas comunes, la bruja vio de lejos a Draco que intentaba acercarse a ella pero la prefecta de su casa se lo impedía.

Al llegar Orion se paró delante de la gárgola y susurró la contraseña que era "Helado de turrón", de golpe la gárgola empezó a girarse con unas escaleras que empezaban a salir y se dirigieron hacia las escaleras.

Entraron al despacho interrumpiendo ya que Dumbledore y Dippet pararon de hablar.

—Vaya, ya estáis aquí —dijo Dumbledore—. Orion, Alphard esperar a la señorita Bagshot a fuera por favor.

Dippet le saludo, se marchó y Dumbledore se sentó.

—Hope, siéntese por favor —le hizo caso y se sentó—. Te he reunido aquí para decirte que como has empezado en cuarto curso, es imposible que sepamos cómo son tus calificaciones en la magia y por eso tendrán que valuarte, por precauciones solamente, no se preocupe, la evaluación solo será para la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras mientras que en las otras clases no se tendrá que preocupar por nada. Mañana temprano se reunirá con la profesora Merrythought y la evaluará. No se preocupe por el joven Draco, él ya está avisado.

Dumbledore se levantó, observó el libro ya que Hope no lo soltaba, le dio los horarios y los miró.

—Pero señor... Aquí no me dice nada de que por la mañana me toque Defensas Contra las Artes Oscuras —dijo Hope mirándolo y frunciendo el ceño.

—No importa. Solo se saltara media hora, después tendrá que ir a la clase que le toque. Espero que le hayan gustado mis eleciones. Ya se puede marchar a descansar —le dijo guiñándole un ojo.

Hope se levantó y se marchó. Al salir se encontró a Orion y Alphard de pie, esperándola para dirigirse a las mazmorras.

Una vez llegaron, se pararon enfrente de un muro de piedra. Orion dijo la contraseña, que era "Sangre Pura" y el muro se abrió para dar con la sala común.

—Esa es la contraseña —susurró Alphard a su lado.

Asintió y entraron a la sala común, la sala era grande llena de columnas, y si no recordaba mal, las habitaciones se compartían como las de Gryffindor.

—La habitación de chicas está debajo de las escaleras. Nosotros la tenemos arriba —dijo Orion.

Hope asintió de nuevo y se despidió. Bajó unas escaleras anchas que después acababan en caracol, observo la placa que había en la puerta, era de color negro que hacía destacar la palabra "Chicas". Agarró el pomo de la puerta y entró.

La habitación era mucho más grande y más espaciosa que la torre de Gryffindor. La bruja se encontró a Walburga hablando con tres chicas más. Las ignoró por completo ya que la miraban y cuchicheaban cosas.

Mi mal humor se esfumó al ver Anubis sentado en su cama en forma de panecillo. Cuando se tumbó en la cama el empezó a ronronearle.

—Creo que antes no hemos comenzado con un buen pie... —dijo Walburga con voz melosa sentándose en su cama—. Ellas son Lucretia Prewett, Druella Rosier y Tracy Vanity.

—Un placer... —dijo Hope frunciendo un el ceño.

Estas cuatro tramaban algo malo y claramente Hope era su objetivo, pero lo que ellas no sabían es que se iban a meter con la chica equivocada.