Capítulo XX

2.2K 82 11
                                    

- ¿Rubén? ¿Eres español?

- Noruego, muyaya.

- ¿Mu..., qué? -fruncí el ceño. Este chico estaba comenzando a asustarme.

- ¡Usté', usté! -me apuntó con el dedo, cambiando su voz a uno más agudo y extraño. Le miré raro y se comenzó a reír solo. Sinceramente, no sé como había terminado con un enfermo como lo era él en ese ascensor. Yo allí no pintaba nada.

- Me das miedo.

- Así que no me conoces, ¿no?

- Sí, sé que te llaman Ruti o Rubos o... -negó con la cabeza, reprimiendo una carcajada- ¡Cómo sea!

- Rubius, tontita. Y no, no me refería con que sabes mi mote. ¿De verdad no me conoces?

- ¡Pero si nos acabamos de conocer! -bufé.

- ¿Nunca has visto mis vídeos? -abrió los ojos como platos, como si no haberlos visto fuese una "catástrofe".

"¿Vídeos? Este tío está chalado".

De repente, las luces del ascensor se apagaron y se escuchó un enorme estruendo. Comencé a asustarme.

- Holy shit -murmuró.

Oh, no, aquello no podía significar nada bueno. Entonces Rubius (sí, era así, ¿no?) sacó su teléfono del bolsillo y encendió la linterna de esté, apuntándome directamente a los ojos y descojonándose de mi expresión de terror.

- ¿Quieres dejar ya de reírte de mí? -le di un leve puñetazo en el hombro y a continuación me deslicé por la pared, terminando en el suelo frío y metálico, en una esquina, abrazando mis piernas.

- Qué pasa, ¿tienes miedo? -se arrodilló a mi altura.

- ¿Acaso no es evidente?

- Eh, yo solo intentaba ser amable contigo. ¡Sólo intentaba ser amable!

Le miré de reojo unos instantes. Vale, sí, quizá había hecho mal en molestarle así. De pronto, hizo una especie de mueca con la boca y levantó su dedo índice. ¿Qué demonios estaba...?

- ¡UST! -exclamó, sobresaltándome- ¡UST, UST, UST...! -definitivamente, estaba pirado- ¡UUUUUST! -gritó a mi oído, haciéndome reír a carcajadas- Joder, por fin te ríes -su semblante volvía a ser serio. Negué con la cabeza divertida.

- Está situación es del todo menos normal.

- Bitch, no todos los días puedes estar en un ascensor con el Rabos. -se relamió los labios. Parecía un pedófilo- Vale, estará loco, ___, pero es muy sex...

Me llevé las manos a la boca. ¡Había hablado en voz alta, y me había oído!

- ¿Sexy? -arqueó una ceja, acercándose hacia mí con cara de violador del bosque. Tragué saliva sonoramente.

- Yo... Yo no he dicho esto -me incliné hacía atrás. "Esto no está bien. ¿En qué demonios estás pensando?

- Pero estabas a punto de decirlo -esto último lo dijo susurrando a escasos centímetros de mi cara, chocando su aliento contra mi rostro y provocando que una corriente eléctrica me recorriese. En ese preciso instante, la luz volvió y se separó de mí lentamente, sonriendo victorioso. Genial, ¿acaso se estaba riendo de mí?

- Nos vemos, nueva vecina -me guiñó un ojo y me dejó allí sola, cuando el ascensor se paró y las puertas se abrieron en... Espera un momento.

Rebobinemos.

¿Nueva vecina? ¿Y encima vivía en la misma planta que yo? No, eso era imposible. Allí vivía Bryan. Aunque él se había ido a vivir con Verónica y me había dicho que su piso estaba en venta. "¡Joder!"

Glad You Came (Nathan Sykes y tú) 1ª temporada TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora