Glad You Came (Nathan Sykes y tú) 1ª temporada TERMINADA

Capítulo XXI

Este capítulo se lo quiero dedicar a una de las lectoras que más me han apoyado en todo momento :) Muchísimas gracias a OneMixWantedRush por estar ahí desde que empecé a escribir y por seguir estándolo. Eres increíble :3

¡Disfrutad con el capítulo!

Besos, la autora.

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Comencé a jugar con mis dedos nerviosamente, mientras esperaba que alguien me abriese la puerta. Miré con desespero la hora en el teléfono y me di cuenta de que ya llevaba cinco minutos ahí fuera. "Y luego hablan de que las mujeres tardamos en arreglarnos". Al fin escuché el sonido de la cerradura y suspiré. Me quedé algo sorprendida al ver un chico de pelo negro y gafas apoyado en el marco de la puerta.

- Tú ereh' ____, ¿no? -preguntó con un acento un tanto peculiar- Soy Mahe', encantao'. -me dio dos besos. Parecía bastante majo- Rubiuh' ehtá' en la ducha, enseguida sale.

Entré en aquel apartamento, bastante desordenado a decir verdad. Se notaba que ahí vivía un chico no muy organizado.

- Perdón por el desorden, eh' que Rubiuh' eh' un guarro -reí.

- No, tranquilo, no me asusto -sonreí.

- Bueno, yo me tengo que ir que sino Rubiuh' se me pone celoso por ehtar' charlando con su cita. -se me subieron los colores enseguida.

- Adiós... -dije en un susurro, cuando Manhe ya se había ido. Me senté otra vez hacia el frente y me arreglé rápidamente el pelo cuando vi el pomo de la puerta abrirse. Cuando vi a Rubén salir del baño, sin camiseta, con el pelo mojado y los abdominales que tenía sentí que perdía las bragas allí mismo.

- Oh, hola vecinita. Voy a ponerme algo en la parte de arriba, enseguida vuelvo.

Asentí sin decir nada más, ya que no me salían las palabras.

- Estúpido y sensual Rubius...

- Perdón, ¿decías algo? -sacó la cabeza por el marco de la puerta y me miró con esa cara de violador. Le lancé un cojín del sofá y se metió en su habitación de nuevo, riéndose a pleno pulmón. "Aún no ha empezado la noche y ya la estás cagando" -me dije.

De ahí a unos minutos salió de su cuarto y se sentó a mi lado.

- ¿Te apetece tomar algo? -susurró a mi oído.

- Sí, por favor... -dije en un hilo de voz. Me estaba poniendo muy pero que muy nerviosa, y al juzgar por su sonrisa eso le gustaba. Se levantó y se metió en la cocina, de la que volvió con dos CocaColas y me ofreció una de ellas. La acepté sin soltar ni una palabra y le do un corto sorbo. Saltó por encima del sofá, asustándome y se incorporó a mi derecha. Le miré con pánico y se rió a carcajadas.

- Hago parkour extremo. -me guiñó un ojo. Negué divertida y pasó un brazo por encima de mi hombro- A propósito, tetitas de azúcar... ¿Te apetece pasar miedo? -"¡¿Por qué coño tenía que hablar este niño en ese tono tan...?! Está descontrolado mis hormonas"

- No quiero. -me quedé pálida. Ni en broma iba a humillarme de esa manera.

- Venga, pequeña, -me derretí al instante- ya sabes que sí tienes miedo, me tienes aquí para abrazarme.

~*~

La película terminó y me dolía la barriga de tanto reír. En ningún momento de la película me asusté; estuve todo el tiempo riéndome de los gritos de niña pequeña.

- Hostia puta, hostia puta... -dijo recobrando el aliento- No vuelvo a alquilar una película de estás nunca más.

- Jo, así no me podré descojonarme de ti -reprimí una gran carcajada, mientras limpiaba una lágrima. Él chasqueó la lengua y lo abracé.