¿HERMANASTROS? [PAUSADA]

CAPITULO 10

NASH POV

No me podía creer que Hayes haya aceptado en acompañar a Hayden a comprar mientras que yo me quedaba en casa solo. Aunque bueno, a él le cae bien ella y a ella también, cosa que entre nosotros dos no pasa.

Por una parte me gustaría llevarme bien con ella por el simple motivo de que vivimos juntos pero es que después la veo y se me quitan las ganas. Es algo que no puedo evitar.

Se habían marchado a las 11 de la mañana y ya son las tres de la tarde. No me puedo creer que hayan decidido comer fuera y ni siquiera hayan llamado para avisar. De ella vale, sí, lo veo normal, pero de Hayes, no me lo esperaba.

-Gracias por venir, Hayes y Hayden han salido y me han dejado solo en casa -dije sentándome en el sofá junto con todos mis amigos, a quienes acababa de invitar a casa para que pasen la tarde conmigo. No sé a que hora volverán y no quiero aburrirme y estar solo.

-De nada bro, para eso están los amigos -desvié la mirada hacia Cameron y le sonreí como él a mí.

Estábamos solos en casa, y éramos chicos así que lo único que se nos ocurría hacer era el bruto. Como siempre hacemos.

-¿Y que tal te va la vida con una mujer en tu casa? -preguntó Gilinsky sonriente.

-Pues como una mierda -le miré- No para de dar problemas

-No debe de ser tan malo... -interrumpió Johnson esta vez. Como se nota que ellos no están viviendo ni han vivido nunca con una mujer y menos con Hayden.

-Prefiero hablar de otra cosa que no sea Hayden -dije y todos ellos asintieron con la cabeza.

Escuché la puerta abrirse, al parecer fui el único en darse cuenta. Vi a Hayes entrar y seguidamente a Hayden con unas cuantas bolsas en sus manos. A penas se paró a saludar porque se fue directamente hacia arriba, mientras que Hayes se dirigió al salón con todos los demás.

-Por fin asomas el culo por la puerta -saludó Taylor a Hayes seguido de los demás. Para ser el pequeño del grupo es querido por todos de la misma forma que los demás y eso me parece bien, espero que no hagan lo mismo una vez que conozcan a Hayden.

-Siento no haber avisado que no vendríamos a comer, se me pasó por completo -intentó disculparse mi hermano cosa que no acepté, estaba claro.

-Hombre, con ese pedazo de mujer, a cualquiera se le olvidan las cosas -esta vez intervino Carter haciendo que por mi parte tuviese una mala mirada.

Vale que Hayden este buena y tal pero si no está presente, no hables de ella. Lo único que quiero es olvidarme de que ella esta en esta casa viviendo y cuando traigo a mis amigos lo único que hacen es hablar de ella.

-¿Que hacíais los dos juntos arriba? -pregunté nada más ver a Hayden junto a Shawn entrar en el salón.

-¿Que haces tú aquí? -preguntó, cosa que no entendí mucho pero igualmente le contestaría.

-No te importa -una sonrisa asomó por su boca.

¿Os he dicho que tiene una sonrisa muy bonita pero que ella es una estúpida?

-Pues a ti tampoco -me calló la boca en un abrir y cerrar de ojos. No me esperaba esa respuesta por su parte. Tengo que decir que me ha pillado bien pillado.

Se sentó junto a Hayes en el sofá, ya veo que estos dos se llevan demasiado bien. Espero que no sea por mucho tiempo.

-Ahora que tenemos la oportunidad, ¿Nos podías decir cosas sobre ti no? -dijo Cameron desviado la mirada hacia Hayden, quien estaba algo avergonzada, estoy seguro que no está acostumbrada a estar tan rodeada de chicos. Y menos, de nosotros.

-Pues mira, te lo resumiré en muy pocas palabras, tengo una casa en Madrid muy bonita, con amigos increíbles, un día a mi madre le viene un pronto queriendo viajar a Carolina del Norte, me parece buena idea, viajamos, llegamos a una casa completamente desconocida para mi pero súper interesante para mi madre, entro, me dicen que voy a vivir aquí y no voy a volver a mis amigos. Me doy cuenta que tengo que compartir casa con una niña, Skylynn, encantadora, amable y simpática, con un chico, Hayes, simpático, amable y increíblemente increíble y finalmente con otro chico, al que suelen llamar el mayor, Nash, estúpido, imbécil y súper creído. Espero que no se me olvide nada porque mi vida es un desastre, ¿Te ha quedado claro o te sigo contando más cosas?

-Gracias todo lo que has dicho sobre mí, pero has estado un poquito borde, ¿no? -dijo Hayes.

No es que haya estado borde, es que ella es borde.

-Lo siento, no pretendía ponerme de esta forma pero es que sigo sin acostumbrarme a esto -intentó disculparse, cosa que conmigo no sirvió. Miró a todos y cada uno de ellos, mi mirada estaba fija en ella, sabía que eso le ponía nerviosa así que eso haría. Empiezo a conocer sus puntos más débiles cosa que me ayuda mucho.

-Perdonarme pero mi barriga me está pidiendo a gritos que le dé comida así que voy a por algo a la cocina, ¿Alguien quiere algo? -todos y cada uno de los chicos estaban babeando como críos pequeños. Tampoco es para tanto la chica, de verdad que me ponen histérico- Está bien Matt, te traeré comida -no entiendo a este chico, está comiendo a todas horas y es un fideo, esta completamente delgado a pensar de toda la comida que come.

Mi mente estaba comenzando a tener una idea, a lo mejor no muy buena, pero ¿Cómo puedo saber si es buena o no si no la pruebo? Así que eso haré.

Puse mi pie estirado justo en el momento que Hayden pasaba haciendo que accidentalmente ella cayese al suelo. No quise reír en carcajada así que sonreí.

-¿Estás bien? -la voz de Shawn hizo que todos nosotros desviáramos la mirada hacia él. Este chico nunca cambiará. Siempre ha sido y será buena persona con todo el mundo.

-Si tranquilo, solo me podría haber abierto la cabeza pero nada, esta todo bien -dijo después de levantarse del suelo y mirándome muy desagradablemente. Me gustaba esa mirada.

Ella siguió su camino hacia la cocina y yo me giré hacia mis amigos quien habían comenzado una pelea demasiado estúpida.

-No, los delfines son más bonitos. Son cariñosos y extremadamente bonitos -expresó su idea Aaron.

-Te equivocas, las focas son mejores. Dan palmadas y te hacen sonreír. Los delfines son malos, te pueden morder -habló Cameron.

-Pues yo sigo pensando que soy un dinosaurio -se levanto Matt de su asiento e imitó a un dinosaurio. Nunca cambiará nuestro querido Matt, siempre será nuestro pequeño dinosaurio.

Reímos todos a la vez junto con Matt. Este chico era demasiado gracioso e idiota, Como todos los demás.

-¿¡Que haces!? -me toqué la cabeza y era muy desagradable notar las cáscaras y el huevo roto en mi cabeza. Todos comenzaron a reírse mientras que yo me empezaba a enfurecer.

-Perdón pero es que alguien me ha hecho tropezar y fíjate, el huevo ha tenido que caer en tu cabeza -dijo ella sonriente mientras que yo seguía desconcertado.

-Te arrepentirás de hacer lo que acabas de hacer -le dije mirándola fijamente a los ojos muy desafiantemente.

-Si me disculpas -pasó por mi lado y se fue de nuevo hacia el sofá.

Esto no va a acabar así.

No iba a dejar que ella se quedara de rositas después de haberme roto un huevo en la cabeza delante de todos mis amigos. Así que me dirigí hacia ella y la cogí como un saco de patatas, me la cargué en el hombro y me la llevé hacia el jardín. Supe que ella sabía lo que iba a hacer por el simple hecho de que no paraba de dar patadas haciendo que su cuerpo se moviera.

Ahora mismo tenía su culo en mi cara y te digo yo que incómodo, no estaba.

-Te juro que un día de estos te mato -dijo ella saliendo de la piscina muy enfadada, aunque bueno, no niego que tengo unas muy buenas vistas desde aquí.

-Te recuerdo que llevas unos pantalones blancos y que tienes un culo muy bonito -dije sonriente viendo como ella rápidamente entraba al salón y se iba para su habitación.

Siendo sincero, la chica no está nada mal y ahora que nos ha enseñado a todos una parte que no conocíamos de ella, más interesante me parece. A lo mejor Hayden no me caía bien pero por ese motivo no tiene porque no estar buena.