Mike Mine. (Mi tio Mike)/«Hot»

New Life...

Llegamos a la ciudad de Miami en la tarde, ya estaba por oscurecer y moría de hambre.

-Tengo hambre Mike-

-Eh, ¿Y comes tu?-

-Pues comida, no lo ves?, soy humano igual que tu-

Respondo con algo de ironía.

-Oh, ¿En serio? No me había dado cuenta-
Me mira de arriba a abajo y luego pone los ojos en blanco.

Nos estacionamos en un pequeño local de comida china, y el por supuesto sin consultarme, pidió la orden que el quería para ambos.

-Aquí tienes tu comida, pruébala esta buena!-
Me dice luchando por no atragantarse con los fideos.

Tenía muchísima hambre, así que no iba a discutir con el por haber comprado algo que no me gusta mucho .

Comíamos en el auto en frente de la costa, podía ver las olas venir calmada mente y humedecer la arena.

Amaba la playa!, desde niña me encantaban los ambientes tropicales donde podía sentir el calor en mis mejillas.

Los fideos no estaban tan mal, y el tío Mike tampoco lo estaba...es lindo!, no se parece mucho a papa pero, si tenía algunas facciones de los Allen, sin contar el buen cuerpo que tenía, grandes Brazos y piernas, espalda perfectamente ancha, y un trasero redondeado...

"Que diablos estas pensando!!, es el hermano de tu padre niña ingenua"

Llegamos a su casa, era una casa grande pero descuidada parecía la mansión de masacre en Texas, me gustaba, no tenía todos esos lujos y piezas europeas bañadas en oro.

Nos dirigimos al segundo piso, y al final del pasillo había una habitación de color blanco muy amplia y con grandes ventanas.

-Aquí dormirás Victoria- el Mantenía la llave aún en su mano, coloco mis maletas en la cama y luego se fue.

Sin olvidar darme las llaves con una mirada de advertencia.

9:43 pm

Me di una ducha y baje hasta el salón principal, Mike bebía una cerveza mientras miraba el partido de rugby por el plasma.

-Oye Mike, ¿Porque los Allen no te recibieron con abrazos, y porque no fuiste al funeral de papa?-

El suspira y entre cierra los ojos antes de responderme.

- Porque Nunca les agrade mucho, tu querido papi era el favorito de todos, excepto por Valeria, tu madre, allí fue cuando sus planes se vinieron abajo con la familia-

-¿enserio?, pues no lo creo Mike-

-Yo tampoco, Alex tuvo una hija peor que el y su arrogancia-

-Eres un idiota!- le pateo el estómago cabreada de su comentario patético

-Pues agradecele mucho a este idiota, si no fuera por mi estuvieras en una perrera-

10:00 Am

Decidí ir a la playa esa mañana, yo sola.

Cuando iba de salida encontré a Mike reparando el tejado de la casa, tenía puesto un Jean desgastado y no llevaba camiseta.

-Oye niña!!, ¿A donde crees que vas?- grita desde el techo

-A la playa-

-No quiero que vayas sola, no conoces mucho esta ciudad-

- Oh, ¿En serio?- Respondo con sarcasmo

-Si, espérame-

El baja rápidamente y me hace una señal para que suba a su motocicleta.

Era una linda motocicleta, me subo con mucho cuidado pero el asiento era alto y resbaloso, debido a eso me pego más hacia el, lastimandome mis senos contra su espalda.

-Sujetame fuerte si no quieres quedar muerta en el pavimento-

-si que gracioso-

Coloco mis manos en su cintura, pero el las Toma y las sube hasta su pecho duro y muy bien trabajado.

Llegamos a la playa muy rápido, sin pensarlo dos veces me quite la ropa por el inmenso calor que hacía y me lance al agua.

Mike solo se recosto en la arena a fumar un cigarrillo.

El me observaba mientras que yo me divertía en el agua, notaba una mirada extraña de su parte y me incomodaban sus marrones ojos sobre mi.

No Habían pasado más de veinte minutos cuando mi tío me llamo para irnos.

-Que!!!, ¿Tan rápido nos vamos?-

-Si, el calor de esta hora hace daño en la piel-

-¿Que?, ¿Ahora eres dermatologo?-

Me lanza una mirada escalofriante

-Ok Vámonos.- respondo molesta

Me quede con el bikini y subí a su motocicleta, nos detuvimos en un semáforo y al lado estaba un convertible muy bonito de color negro.

El chico que conducía me guiño el ojo e hizo una sonrisa de medio lado al ver que lo mire con indiferencia.

Al parecer Mike se dio cuenta y arrancó a toda velocidad, dejando atrás al convertible.

Llegamos a la casa hambrientos y acalorados, notaba como mi tío estaba sudando y sus mejillas ardían en un tono rojizo.

Luego me mira y se acerca a mi, toma mi mentón y se acerca mucho más, podía sentir su pesado cuerpo aplastar mis senos.

-No quiero que le hagas ojitos a ningún idiota en convertible, ¿Entendiste?-. Advirtió con una mirada severa e irritante -y tampoco quiero que vayas en bikini cuando estés en mi motocicleta-

Me suelta bruscamente y se va hasta la cocina canturreando "safe and Sound" de capital cities, como si no me fuera dicho nada y todo fuera de color rosa.

"Maldito desgraciado"

"¿Quien se cree que es?", no tiene el derecho de decirme que tengo que hacer!

-Oye Mike!...- le grito desde la puerta y el Deja de rebanar las zanahorias y se gira para mirarme, sosteniendo el afilado cuchillo con su mano derecha.

-¿Que quieres Niña?-

-No tienes el mínimo derecho en decirme que diablos tengo que hacer y que no!-

-¿Ah si?-

-Si!, idiota.-

Lanza el cuchillo en el fregadero y de nuevo coloca sus fuertes manos en mi rostro.

-Mírame bien niña, yo tengo tu custodia en mis manos y a mi nombre, por lo tanto tendrás que obedecerme cuando yo lo pida!-

Le arrebato sus manos de mi cara y trato de alejarme de él.

-Ahora me estoy dando cuenta que vivir contigo va a ser como estar en el infierno-

-Acostúmbrate a tu nuevo infierno nena, y si tu quieres...yo puedo ser el demonio perfecto para ti.-