MY MENTOR (BTS ~ JK)

XXXVI «EL FINAL DEL COMIENZO»

Jungkook

Subí uno, dos, tres, cuatro, cinco escalones. Había estado esperando tanto por este momento toda mi vida... la final. No había practicado mucho este año, sin embargo, me sentía con todo el poder del mundo de ser el vencedor. Sabia mis tácticas, de juego, de memoria, las había creado, estudiado y aprendido a lo largo de mi vida, esto era lo que me apasionaba desde que tengo memoria, no había otra persona más segura que yo en los videojuegos.

«Intereses e inquietudes muy acotados o circunscritos que persiguen obsesivamente pero en soledad, como por ejemplo, la recolección de datos o cifras obsesivamente sin ningún valor práctico o social.»

—Y por el lado izquierdo— la tensión se incrementaba, se suponía que nadie esperaba que mi nombre se pronunciara —¡JEON JUNGKOOK!... ¿Jungkook? — se preguntó el presentador.

Salí de la oscuridad y el reflector me seguía el paso. Los pocos chicos que podía observar con la tenue luz tenían la boca abierta mientras que mi contrincante, Kim Woobin, estrechaba sus ojos siguiendo mi dirección.

"¿Esto es imposible?" "pero él estaba descalificado" "ahora Woobin ya tiene una final digna" "y Woobin creyó que la tenía ganada" "Kook le pateara el trasero" eran las frases que se escuchaban por toda la gran sala. Tome valor y alcé mi mano en un puño para rectificar que estaba de vuelta, todos los que me apoyaban empezaron a gritar y a esparcir frases de aliento hacia mí, me sentía bien.

El presentador explicó la metodología mientras Woobin y yo tomábamos nuestros lugares. Él rechinaba sus dientes, apretaba sus manos y mandíbula al máximo, yo solo disfrutaba de verlo con los ojos inyectados en sangre. Él hacía de su gane una realidad absoluta contra un contrincante débil, pero eso era cosa del pasado, ahora debía de competir contra mí.

La pelea dio inicio. Tenía mi equipo y confiaba en ellos, Rapmon como mi consejero, muy leal, Jake como experto en el equipo a usar y Jung... bueno el ayuda en la preparación, torpe, pero tiene un genio interior de tácticas infalibles.

—One, two, three, ¡GO! — Gritaron todos al unísono y los colores explosivos de las grandes pantallas dieron vida delante de nuestros ojos cegándonos por su brillantez.

Estaba totalmente concentrado. Aunque estábamos a la mitad del proceso no sentía que Woobin tuviera algo mayor de dar de él. Rapmon me aconsejaba enviándome tácticas y posibles oportunidades a través del auricular, pero yo lo tenía todo bajo control. Mis dedos parecían no tener control ante los impulsos deseosos de ganar de mi cerebro. Mis músculos, nervios y la adrenalina estaban conectadas y hacían un poder magnifico juntos, algo incomparable.

El tiempo se estaba terminando pero la diferencia entre nuestros resultados era suficiente como para que el me ganara de última instancia. Hice los últimos movimientos, la verdad muy peligrosos y que podían quitarme el gane, pero logrando el éxito todo acabó. Los chicos empezaron a gritar, la sala retumbaba por mi triunfo. El conductor excitando a todos en el lugar hacia porras para mí y la ola de chicos y chicas en las butacas lo seguían con esquizofrenia. Acercándose y alzando mi brazo, me proclamó como el único y primer lugar, el ganador. Recibí mi premio, que constaba de una placa, la medalla y flores, y debía decir algunas palabras pero no quería, entonces lo ignoré, no sabía que decir.

Bajando los mismos escalones los chicos me ayudaban a despojarme del equipo y ayudarme con los premios. Todo había salido bien, ellos me elogiaban con palabras y yo los felicitaba por su gran trabajo, algunos me preguntaban que como me sentía pero yo no respondía.

Algunos entrevistadores llegaron a nuestro lugar rodeándonos y empezaron a acosarnos con preguntas:

—Jeon Jungkook ¿Cómo te sientes siendo el ganador? — pregunto el del gran micrófono.