Amber's POV.
Estaba tirada en el campus cuando Dianna vino a hacerme compañía, y no porque se la haya pedido. Simplemente se acostó a mi lado y no ha dicho ni una sola palabra desde que llegó, hace diez minutos aproximadamente, ella me hacía sentir tan extraña simplemente con su presencia que me asustaba. Estaba nerviosa, pero fingir que no me sentía así era pan comido, había practicado con Krystal durante años. Mi celular vibró un segundo antes de que abriera la boca para hablar con Camila.
De: Princesa.
Para: Amber.No me haz escrito desde ayer, ¿haz tenido un mal día, amor?
- No sabía que tenías una novia. - mencionó Dianna sonriendo.
- Yo.. sí, la tengo. - hubiese deseado sonar feliz al decirlo, pero no pasó.
- Bueno, cambiemos de tema. - suspiró y se sentó para mirarme.
- Está bien, ¿quieres hablar sobre algo en especial?
- En realidad sí, sobre hoy. ¿Cómo lo hiciste?
- Era muy sencillo deducir que si él es un cazador, sabía como matar, entonces los cortes no coincidían. La persona que asesinó a esa mujer no sabía lo que hacía.
- ¿Quién fue según tú?
- La hija. Su padre asesinó a su mamá para escaparse con esa mujer, yo no estaría muy feliz sabiéndolo.
- Tienes razón, fue ella. Su padre lo supo siempre, pero no quiere presentar cargos.
- Todo es cuestión de deducir.
- Amber, estoy aquí porque la profesora Walls me mandó. - me senté para mirarla - Quiere que vengas conmigo y Cory a una cena en su casa ésta noche.
- ¿Una cena?
- Sí, ella quiere hablar sobre algunas cosas contigo.
- ¿Debo vestir algo en especial?
- Un traje.
- No me gusta usar trajes..
- Entonces un vestido. - sonrió con malicia.
- Bien, llevaré un traje. Pero no sé de donde conseguiré uno.
- Podrías pedirle ayuda a Cory.
- Su camisa me quedará como un vestido. Es el tripe de alto que yo. - evité mirarla.
- Párate, quiero asegurarme de algo. - hice lo que me pidió - Una vuelta.
- ¿Es necesario?
- Muy necesario. - volví a obedecer y ella sonrió.
- ¿Y entonces?
- Tengo el traje perfecto para ti.
....
- Estoy muy segura que es un delito meterse a la habitación del hijo del decano. - susurré mientras apuntaba los posters de la habitación con una linterna.
- No es delito, él me dió las llaves.
- ¿En serio? - Dianna asintió - ¿Y porqué?
- ¿Acaso fue un reproche?
- No, solo que.. el tono de mi voz cambia cuando estoy asustada. - tosí.
- Salía con él, hace un par de meses. Cuando todo acabo dijo que usara las llaves cada vez que se me ofreciera algo.
- Yo creo que él hablaba de otro tipo de "cosas"..