Capítulo 18.

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Amber's POV.

- ¿Porqué tardaste tanto? - ella entrelazó nuestras manos mientras ocupaba mi asiento.

- Encontré a una amiga en el baño.

- ¿Amiga? - alzó una ceja - ¿Alguna exnovia de la que no me haz contado?

- No, amor. Solo es una chica que conocí de casualidad hace un par de días.

- ¿Es aquella que nos mira? - Krystal señaló con su mentón la fila de abajo y asentí sonriendo en cuanto lo confirmé.

- Su nombre es Tiffany.

- Como la novia de Chucky.

- ¡Lo sé!

- Bueno, ahora cállate, la película va empezar.

Nuestra relación había pasado algunas fases hasta ahora, la primera fue ser jodidamente cursis, y aunque nunca me ha gustado ser así, con Krystal era algo que me salía tan natural, la segunda fase fue querer estar todo el día como chicles, y seguir siendo cursis, y la tercera y en la que ahora nos encontramos, es la popular "tira y afloja", es tan divertido molestarla, aunque siempre que se molesta, tengo que soportar que me ignore durante horas. Cuando las dos horas habían pasado, me di cuenta que no vi ni la mitad de la película  solo por contemplar mi mano y la suya, juntas. Algunas veces cesaba de mis pensamientos solo porque sentía que alguien me miraba, y muchas veces fueron las miradas de mi novia, pero otras fueron las de Tiffany, y cada vez que pasaba rompíamos la conexión sonriendo.

- ¿Te gustó la película?

- Me enc..

- Señoritas. - alcé la vista y era Tiffany, que se encontraba al lado de una castaña.

- Hola otra vez. - le sonreí y miré a mi lado - Ella es Krystal, mi novia.

- Es un gusto conocerte, Amber me habló muy bien de ti. - agradecí que dijera éso, aunque nunca la mencioné en nuestras conversaciones.

- ¿Y quién es tu amiga?

- Amber, ella es Suzy. - le sonreí a su amiga y ella me devolvió la sonrisa.

- Fue un gusto conocerlas. - dijo Suzy.

- Igual, quizá algún podamos salir en pareja. - mencionó Krystal con una extraña sonrisa.

- Oh, no. Nosotras no somos pareja, Suzy se va casar pronto y.. - Tiffany me miró - Estoy soltera.

- Lo lamento, es que.. no sé en que estaba pensando.

- No te preocupes, suele suceder. - le dije mientras le dejaba un beso en la cabeza - Bueno, nos tenemos que ir.

- Claro, te veo luego. - Tiffany me besó en la mejilla y repitió el acto con Krystal, luego ambas caminamos a la salida.

- ¡Amber, espera! - me giré y Tiffany me hacía señas para que me acercara.

- Ya vuelvo, amor. - dejé a Krystal en la salida y corrí hacia donde ella estaba - ¿Qué ocurre?

- Suzy quería invitarte a su boda, no sé cuando volveré a verte, por eso te invito ahora.

- Mmm.. está bien. - saqué mi móvil y se lo ofrecí - Tu número.

- No deberías pedir el número de una chica cuando tu novia está viendo. - ambas reímos.

- Bueno, ella no sé enterará.

- Extrañaba que seas así, eres diferente cuando ella está cerca.

- No es eso, solo que se podría sentir incómoda. Suelo ser así con todos mis amigos. Pero ella no te conoce, podría molestarle y no quiero arriesgarme.

- Es muy bonita. - dijo cambiando de tema.

- Lo sé.

- Listo, te mandaré los datos ésta noche. 

- Estaré pendiente, nos vemos.

Cuando salimos del cine, noté a Krystal algo callada. Incluso cuando hice mis típicos chistes malos, no me molestó, fue entonces cuando me preocupé, ya estábamos afuera de su casa.

- Amor, todo el camino haz estado tan callada..

- No es nada, creo que las palomitas me han hecho mal.

- No te creo, te conozco. Algo te pasa.

- No es nad..

- ¿Esto es por Tiffany?

- No, bueno, no tiene que ver con ella.

- Explícate mejor.

- Verte conversar con ella, reírte con ella, me hizo pensar en muchas cosas. Tú estarás en New York, conocerás miles de chicas, y eres hermosa. - sonreí - Solo estoy un poco asustada.

- Quiero que escuches lo que te diré. - la abracé de la cintura - Te amo.

- También te amo.

- ¿Y recuerdas lo que te dije hace una semana?

- Me haz dicho muchas cosas, específica.

- Te dije que te amaría por siempre.

- Tú no sabes éso.. - agachó la cabeza.

- ¿Quieres decir que tú no sabes si me amarás de acá a cinco años?

- No es lo que dije. - abrí la boca para empezar a hablar - Ni es lo que pienso.

- Bueno, da igual. Quizá tengas razón.

- ¿Qué?

- Creo que no estoy siendo realista.

- Amor..

- Que ésto dure lo que tenga que durar, y luego adiós.

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