Su llamada me afecto más de lo que pude imaginar, el cuerpo se a mantenido rígido y mis pensamientos constantemente me traicionan, me hacen sentir observada y aceleran ese delirio de persecución. Me siento intranquila por la curiosidad de saber a quién lastimo esta vez, me preocupa que vaya por allí y tome a cualquiera para desquitar su ira o peor aun que se desquité por personas que quiero. "Esa mujer va a volverme loca"... Veo a John salir del ascensor con Melanie, cierro despacio la puerta y la dejo medio abierta, ambos se miran divertidos y en confianza "¿Desde cuándo son tan amigos?" el móvil suena y cierro apresurada la puerta, corro hasta el escritorio y me siento de golpe "Cómo te odio" corto la llamada y frustrada me recargo del escritorio "Odio no poder ser lo que espera la gente de mí, Penélope no ha dejado de marcar y dad mi situación no eh podido responder su llamada"
Después de hablar con ella y saber que se a cobrado lo que e hecho me pone nerviosa, sé de lo que es capaz y que vaya por ahí lastimando a personas para hacerme daño me preocupa; no quiero que más personas salgan dañadas por mi causa y eso me lleva a Pamela, sus mensajes ya tienen mi bandeja de mensajes llenas, no sé cómo decirle lo que sucede y menos cuándo preguntará sin descanso...
—Señora Evans, tiene una visita —asiento y levanto la vista.
Mi respiración se acelera al ver entrar a Peny, su brillante y autentica sonrisa se ensancha al verme, emocionada deja caer su gran bolso e intenta acomodar su cabello que débilmente se sostiene por esa delgada liga. Me levanto y me acerco, alisa su camisa holgada y extiende sus brazos. Se ve tan encantadora con esa pronunciada barriga.
—¡Vaya! ¡Vaya! —me abraza y cómo si fuera una niña pequeña peina mi cabello —No voy a preguntar, pero recuerda que, aunque te sientas sola, no lo estás —escondo mi rostro en su cuello y ella me aprieta
—Te ves preciosa Peny —nos soltamos y sus ojos me observan cálidamente. No sé si es por el hecho de que pronto será mamá, pero su mirada dulce me ve cómo lo hacía Anabell —Yo...
—He venido a mostrarte todo lo que he hecho y a ver cómo estabas —me guiñe un ojo y con pesades levanta el bolso, lo lleva hasta la mini-sala y se deja caer en el mueble —Sé que no sabes nada sobre moda, yo aún sigo aprendiendo, pero... —saca un cuaderno del bolso y me lo extiende —Mira esto y dame tu opinión —asiento y me siento frente a ella.
Tomo el cuaderno y en la primera hoja ve un largo vestido rojo, en su esquina superior tiene un pequeño trozo de tela "Parece que no solo pensó el diseño" sigo mirando la hora y noto los multiples rayones que hay por toda la hoja. Continúo a la siguiente y veo más trozos de tela, diseños diminutos por toda la hoja y líneas indecisas perfil el atuendo de dos piezas "Esto debe de ser vocación, porque no podría hacer algo como esto".
—Todo es muy bello —paso las hojas hasta llegar al final del cuaderno —Viéndolo bien, tu vestido se parece a uno de los diseños que vi —dejo el cuaderno sobre la mesilla y veo sus mejillas sonrojadas
—Es porque lo hice yo —avergonzada desvía su mirada —Que bueno que te gusten los diseños, honestamente venir no fue algo fácil de decidir —sus ojos se cristalizan y tengo el impulso de pararme, pero no lo hago.
"Lo lamento Peny".
—¿Qué sucede? si es por mi ausencia, no deberías llorar, pronto terminaré lo que me mantiene ocupada y te ayudaré. Lo prometo —junto mis manos y las aprieto nerviosa
—Tengo todo listo para la inauguración de la Boutique y me he esforzado es hacer lo necesario para que todo salga perfecto, no es necesario que descuides tus actividades por mí... Es solo que a veces siento que no te acercas a mí, por mi estado —toca su barriga.
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VENGANZA © (Segunda parte de AMOR).
Ficción GeneralUn dolor agonizante, noches bañadas de soledad; recuerdos presentes y hechos dolorosos... Un pasado que no perdona, un presente decidido a cobrar las deudas y un futuro escrito... No puedes escapar de tu pasado y menos de tu destino. ¿Qué quieres o...