VENGANZA © (Segunda parte de AMOR).

Capítulo 7

Con delicadeza y cuidado levanto la tapa, veo las rosas rojas y sobre ellas una nota, miro a Pamela quién no deja morderse las uñas, John se mueve inquieto por el estudio, César y Carlos vigilan la entrada. Martha se llevo un susto al ver la rosas destruidas en la entrada.

"Es momento" con el corazón acelerado volteo la nota y el corazón solo se acelera más y más...

"Una rosa por todos los días en que estuvimos separados, para que sepas que aunque estemos separados pienso en ti a cada momento"

                                       J".

Abrazo la nota y me permito llorar libremente, necesito sacar éste dolor que esta acabando conmigo, quiero entender las razones por las que me hieren de esta manera, pero no encuentro respuestas, no comprendo lo que hice para que haga sufrir así, para que se tomen tanto tiempo en mí. Saben absolutamente todo de mí... Miro a mi alrededor y busco en cada rincón angustiada... Solo hay una forma...

—Es una clara provocación —John se para a mi lado 

—¿Por qué sigue haciéndolo? no es necesario la tortura —me quita la nota y la observa

—¿De qué hablan? ¿Cómo que es una provocación? —Pamela pregunta angustiada —Marily ¿Qué sucede? —suspiro y con un nudo en la garganta la miro.

No sé cómo le diré esto, esta intentando llevar su vida con normalidad y decírselo podría perturbar todo lo que a construido, pero si no lo hago, la estaré poniendo en riesgo. La ignorancia podría costarle caro.

—¿Podrías darnos un momento a solas? —John sale y cierra la puerta —No sé cómo sonora esto o si es la explicación correcta, solo te diré que lo sucede —necesitada sujeta mis manos —Los asesinos de Theo, están jugando conmigo, eh recibido paquetes y visitas de desconocidos —cubre su boca asombrada

—Marily, ellos no están jugando y eso lo sabemos con certeza —traga con dificultad —Tengamos confianza en que cuando el caso se solucione, ellos queden tras las rejas y paguen por delito —niego y aprieto sus manos

—El caso esta cerrado, los superiores creen que no hay delito que perseguir y han hecho que el detective pierda las pruebas que encontró —sobresalta me suelte 

—¡¿Cómo es posible que actúen tan negligentemente?! ¡Un hombre inocente fue asesinado! —grita y lleva su mano al pecho —No voy a permitir que esto se quede así —camina pensando que hacer.

Veo mis manos y las sujeto para que dejen de temblar, pero mi cuerpo tiembla ligeramente y hace que mi inestable corazón no logre estabilizar sus frenéticos latidos.

—Fui sincera contigo porque no quiero exponerte y espero que te mantengas al margen, por ahora solo soy lo que quieren, pero si de inmiscuyes, no solo pondrás tu vida en riesgo, tienes familia —me mira incrédula

—Tú eres mi familia ¿Cómo puede pedirme que te abandone? —herida por mis palabras respira para controlarse 

—No te preocupes por mí, obtendré la justicia y tal vez solo así pueda vivir tranquila —desvío la mirada hasta el mini-bar.

"Un trago me ayudaré a seguir"...

—¿Justicia? o ¿Venganza?... ¿Sabes? nos hemos mantenido lejos para darte espacio y no asfixiarte con nuestra presencia, pero esto sobre pasa todo —se calla y señala la puerta —Has aceptado cerca a un extraño, mientras alejas a tu familia ¿Cómo quieres que me sienta? —agitada se sienta 

—Es mi hermano, es el hijo perdido de Anabell y es lo único que me queda de ella —sujeta su cabeza con ambas manos

—Es evidente que algo tendría que ser de ella, pero ¿Estás segura de que puedes fiarte de él? —dejo de desear el vino y volteo a verla —No creo que lo que busques sea justicia y honestamente no quiero que sigues con eso —levanta el rostro y veo su rostro manchado de dolor y agonía