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Aomine

Eran las dos y algo de la mañana cuando Akashi me marcó.

-¿Que ocurre Akashi? ¿Ya viste la hora que es? -dije con voz patosa.

-Es Tetsuna.

Eso fue suficiente para despertarme. Akashi me dio una breve reseña de lo ocurrido. Salté de mi cama y me puse una chaqueta para salir sigilosamente de mi casa.

Saqué el celular de mi bolsillo y envié un mensaje a Kise diciéndole que fuera a casa de Akashi también.

Llegué a la mansión en unos quince minutos. Apenas me paré frente al portón, la enorme reja se recorrió para dejarme entrar.

La casa de Akashi era una enorme construcción color blanco. Entré al lujoso recibidor, apenas llegar a la sala, la vi. Tetsuna estaba sentada, tenía la vista fija en el suelo mientras se abrazaba a si misma y a su enorme pijama.

-Tetsu...

-Aomine -Akashi salió de su cocina con un vaso de leche y una charola de galletas. Las llevó hasta la mesa del centro y en voz baja le dijo a Tetsu que intentara comer aunque fuera un poco.

-Akashi ¿Que está ocurriendo? -pregunté al ver los ojos perdidos de Tetsu.

Sin embargo, nadie tuvo que responder a mi pregunta. Una brisa de aire fresco entró por el ventanal haciendo que la pitufa se estremeciera. El suéter cayó por su hombro, dejando al descubierto las marcas del crimen.

-No puede ser...

Tetsu estiro la mano para coger una galleta. Sus dedos temblaban, sus ojos se humedecían cada tanto.

Akashi y yo compartimos una mirada. 

Iba a morir, determinamos en silencio, quien quiera que hubiera hecho esto... iba a morir.

Una Muñeca Entre Los Milagros || Kuroko No Básquet FanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora