Siento la tardanza :( Ya no puedo hacer gif, si alguien sabe unir dos o más gif que se ponga en contacto conmigo. Gracias <3
PD: Es un poco corto, pero los dos que vienen sé que les encantará.
Escuché una explosión y vi como mi secuestrador miraba en dirección al sonido.
-Qué curioso, nadie había venido a por mis esposas jamás.-Sonrió.- Mejor para mí, más recompensas.
La imagen de Ace, encadenado golpeó con fuerza mi mente. Recordé como había estado a su lado, llorando y como había intentado en vano romper las cadenas. No. No permitiría que Ace volviese allí.
-¡No lo lograras!-Si no puedo moverme, gritaré como una loca.- ¡No lo permitiré!
-Te recuerdo ojitos lindos, que no te puedes mover.-Dijo señalándome con un dedo. No tuve mejor idea, así que se lo mordí con fuerza. Noah gritó.-¡Suéltame!-Cerré los ojos y mordí con más fuerza, cuando sentí su puño en mi mejilla le solté.- Juba se encargará de ellos. Yo me encargaré de ti.
Con el golpe el pelo me tapaba ahora los ojos y por la fuerza veía borroso, pero pude ver perfectamente como tomaba un cuchillo que brilló. El corazón se me aceleró espantado.
-Esto lo suelo utilizar más adelante pero...
Ace. Ace... ¿Dónde estás?
00000
Deje atrás a Luffy mientras éste combatía con uno de los esbirros de ese asqueroso monstruo. Todos nos habíamos acabado separando. Continúe corriendo, comenzando a desesperarme. ¿Dónde está Alia? No podría vivir, sin ella, si algo le pasase me moriría.
Necesito un plan, llamar la atención del Noah y alejarlo de ella. Pare mi marcha y observé mi alrededor. Quizás si comienzo un incendio, pero eso implicaría que podría herir a Alia y quizás a mis nakamas.
Tengo que pensar rápido. Llevé mis manos a mi cabeza y la presioné con fuerza, necesito pensar, necesito una idea ya.
-Piensa ¿Qué haría Alia?
Al decir su nombre no pude evitar imaginármela siendo torturada, gritando y llamándome. Mis venas abrasaron de pura ira, y mi piel comenzó a arder.
-¡NOAH!
Todo a mí alrededor comenzó a arder. Había perdido por completo el control de mí mismo. Era incapaz de controlarme, con tan sólo imaginar a Alia sufriendo ha podido con mi cordura. Todo se estaba convirtiendo en cenizas, absolutamente todo.
-Que mala educación. Destrozar de esta manera mi hermosa casa.
Me giré en redondo al escuchar su voz.
-¿Dónde viviremos ahora mi esposa Alia y yo?
La ira me recorrió entero. Era incapaz de pensar o de actuar de una forma medianamente racional. No pensé solamente ataqué con toda la furia que tenía dentro.
-¡¿Dónde está Alia?!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
