缓和

fish.

026| las personas que te aman de verdad, harán cosas inimaginables por ti.

— ¿Qué hacemos líder? —cuestiona Adam cruzándose de brazos, rasco mí nunca un poco nervioso por como me a llamado.

— Solamente porque Eurus me dio el mando no tienes porque llamarme así —digo disgustado provocando que los tres hombres rían un poco— ¿Vieron algo?

— Salieron temprano de la comunidad, una chica de cabello largo al igual que un hombre y una chica regordeta —informa Jesse— Traje a unos amigos de fiar, los están siguiendo. Me informaran por aquí —alza una walkie-talkie—Lo último que me han dicho es que caminaban por las vías del tren, de regreso los podremos acorralar. Todo esta asegurado a la perfección.

— Bien —asiento constantemente, sobo mi quijada— ¿Alguien sabe dónde están esas mujeres?

— Que cuida a la novia— susurra Walter dándole un empujón al brazo de Adam provocando que ambos rían— Tranquilo, dijo que vio algo y se desvió del camino.

Antes de poder hacer etiquetas mentales y preocupaciones innecesarias, la castaña se abre paso entre los arbustos y me sonríe un poco: — Líder —dice provocando que las personas que están atrás de mi, rían— Creo que es su día de suerte, agarramos a un pez y de los gordos.

Me es imposible no sentirme confundido pero cuando ella da un paso enfrente muestra un brazo para después jalarlo con fuerza, un hombre de cabellos largos negros y golpeado, se queja en suelo.

— Laila se pasó un poco en el aspecto de... "retenerlo" —enfatiza las comillas, observó a Laila y con gracia se encoge de hombros— Se llama Eugene y conoce a los amigos que queremos detener.

— Yo no hice nada... ¡Se los juro! —suplica el regordete— yo solamente estaba ahí y después...

— Cállenlo —ordenó girando sobre mis propios talones, solo puedo escuchar como Laila lo golpea, dejándolo inconsciente— Es nuestra oportunidad —recargo la ballesta en mi hombro —A partir de ahora se declara la guerra a Negan.

Mis amigos asienten a alrededor mío, para después caminar hacia dónde está Eugene, dejándome solo con Eurus. La castaña soltando un suspiro, suelta su arma y se siente en un viejo tronco.

— ¿Sucede algo? —pregunto un poco confundido ante su comportamiento.

— ¿Desde cuándo te volviste un líder y no un perro asustado? Ahora eres tan... diferente— dice observándome de pies a cabeza.

Me es imposible no sonreír, pues ahora muestra más interés que al inicio de esta extraña "relación", pues a ella le cuesta creer lo que yo soy ahora, pues se enamoro del idiota, patético y torpe Dwight.

— Solamente estoy protegiendo algo que realmente vale la pena, quiero lo mejor para esa persona y esa persona es lo correcta —ambos sonreímos, pues ella me había dicho lo mismo hace ya tiempo— Y estoy seguro porque lo siento —colocó mi mano derecha en mi corazón— Aquí.

Ella ríe y niega con la cabeza divertida: –Sigues siendo sumamente estúpido, pero así me encantas –declara— me demostraste que eras diferente.

Y es en ese momento en que decide mirarme y no puedo evitar observar los claros que son sus ojos, y lo hermosa que es su sonrisa, si mi madre aún viviría aseguró que me diría ¡oh D, has sacado la lotería. No desaproveches el amor que ella tiene, porque sería dejar un vaso de agua en medio del desierto! Más otros miles de sermones.