Mundos Unidos.

Consecuencias del pasado

Habían trascurrido 2 semanas desde que Sonic había caído inconsciente. A pesar de todo nadie dejaba la habitación del ojiverde sola, y habían prohibido el ingreso a los visitantes.

Ya no había tanto odio mutuo, pero sí que habían varios resentimientos y, por supuesto, un gran aire de incomodidad. Tails era él que más pasaba dentro de la habitación. Una vez llegó a encerrarse por varias horas y había cerrado la puerta con clave. Solo Knuckles había sido capaz de sacarlo dándonle un golpe a la puerta casi rompiéndola. 

El encuentro con Eggman tampoco fue agradable. Este había venido a los dos días de la llegada de los otros y estos casi se le abalanzan en cima.

Los de la dimensión X, tuvieron que explicarles todo correctamente, para que así ya no hubieran malentendidos.

Y que Shadow esté vivo había dejado muchas preguntas que solo habían sido respondidas por el erizo negro.

Se había decidido que se construiría una casa cercana o dos, para que así pudieran vivir cómodamente, pero por el momento vivían en dos habitaciones de invitados en colchones pequeños comprados exclusivamente para ellos. Las chicas en una habitación y los chicos en la otra.

Shadow casi todos los días salía sin decir a donde iba. Se dirigía a un prado cercano para poder pensar con claridad y poder hablar con Brillitos, el cual seguía sin responder. 

Esto ya le tenía preocupado. Sonic tampoco había mostrado mejoría alguna y eso solo significaba que lo más probable era que Brillitos supiera que le había pasado al erizo azul...y que era tan malo que le afectaba a él también.

Ese día Manic y Sonia habían salido a un parque cercano para conversar sobre lo que estaba pasando.

- Ya me harté.- Dijo Manic siendo retenido por su hermana mayor.

- Manic.- Le regañó Sonia al ver sus intenciones.

- Pero no pueden negarnos verlo. ¡Es nuestro hermano!

- Lo sé. Pero si hacemos algo imprudente nos echarán de la casa y eso no ayudaría mucho. Aparte, recuerda que todos esos sentimientos solo le hacen daño a Sonic.- Manic al oír esto último terminó bajando la cabeza.

- De acuerdo...-Dio un suspiro.- Pero sigo sin estar de acuerdo con esto. No nos han permitido verlo, ¡Ni siquiera en fotos! Para mí eso ya es rencor...

- A mí también me parece raro pero no hay que actuar de forma tan precipitada. Hay que ganarnos su confianza como con los otros. Aunque me parece que esta vez no va a ser tan sencillo.

- Pero...

- Manic, por favor.- Le miró a los ojos para luego bajar la mirada.- Es la única oportunidad que tenemos para poder estar con Sonic de nuevo.

- Lo sé, lo sé.- Manic le sonrió a su hermana.- Yo también quiero ir a verlo, pero no puedo seguir estando en la misma casa que Sonic no podamos verlo.

- Debe haber otra forma en que podamos verlo.- Se quedaron en un silencio incómodo pensando en diferentes cosas relacionadas con su hermano, hasta que Sally junto a Rotor fueron a llamarlos para almorzar.

Ellos simplemente asintieron y se dirigieron junto a los otros hacia a la casa. No podían creer la suerte que tenían, la horrible suerte que habían llevado desde pequeños hasta ese momento.

///HACE  10 AÑOS- PERSPECTIVA DE SONIA///

Una pequeña niña estaba sentada en uno de los sillones de la casa, esta se encontraba algo molesta ya que sus *padres*1° se habían ido a una fiesta con el emperador y no la habían llevado con ellos, y tampoco le dejaron ir con su mejor amiga. Prácticamente, se había quedado sola y la única persona que podría hacerle compañía sería el mayordomo que esperaba tranquilamente en la puerta de la habitación por si la pequeña deseaba algo.