Cree En Mi ♡ Laliter ||EN EDICIÓN||

Capítulo 34

¿En donde estoy?

Abrí los ojos de a poco. Mis párpados pesaban demasiado, haciendo que no pudiera mantener los ojos abiertos por mucho tiempo.  Giré mi cabeza lentamente, y una punzada de dolor me atravesó el cuerpo, desde mi cabeza hasta mi estómago. Apenas podía moverme. ¿Que me pasó?.

Cuando por fin pude girar mi cabeza ya no sentía tanto dolor. Y lo único que pude ver fue una pared blanca. Y ahí me percaté de que estaba en una camilla. ¿Un hospital?. Miré mi mano, tenía conectado un suero. ¡Ugh, odio las agujas!

Giré mi cabeza hacia el otro lado, ahora ya no dolía tanto. Y la imagen que tuve frente a mis ojos me llenó de ternura. Peter estaba dormido en un pequeño sillón; parecía no estar muy cómodo. Sonreí, y al instante me sentí un poco mal.

Volví a mirar al techo y traté de recordar que me pasó. Pero no funcionó, mi mente estaba en blanco.

- ¿Lali? - escuché su voz en un susurro. Giré lentamente la cabeza y mis ojos se encontraron con los suyos. Sonrió - ¿c-como estás? - parecía un poco preocupado.

- Bien... ¿que me pasó? - tenía la voz ronca.

- Hum... voy a llamar a un médico - esquivó mi pregunta. ¿Acaso quería que no supiera que me pasó?.

- ¡No! Quédate aquí, conmigo - le pedí, pero me ignoró completamente. Se levantó del pequeño sofá y se fue. A los minutos volvió acompañado de una enfermera.

- Lali... ¿Como te sientes? - preguntó la muchacha.

- Me duele un poco la cabeza, pero estoy bien... creo - ella asintió y se acercó a mi. Tocó mi cabeza un momento, creo que para comprobar que no tuviera... ¿fiebre? ¿por qué tendría fiebre?.

- Estas bien, hoy mismo te daremos el alta - respondió la enfermera. Y se dió media vuelta para irse; pero antes, se tomó el tiempo de dedicarle una guiñada a Peter. La miré fijamente, ella se sonrojó y se marchó.

- Ahora, ¿vas a decirme que me paso? - resoplé. El se sentó nuevamente en el sillón.

- Esta bien, cruzaste sin mirar la calle y te atropelló un auto - ¿Queeeeeeeeeeeeeeee? Lo miré sorprendida y antes de que pudiera contestar se levantó y me abrazó - me pegaste un susto de muerte. Mierda Lali, no sabes cuanto me preocupé. No vuelvas a hacerlo ¿si? - me despegué un poco de él para poder verlo a la cara. Sus ojos brillaban y estaba levemente sonrojado; sin dudas, la imagen más sexy que vi en mi vida.

- Si... - susurré y sonreí, antes de volver a abrazarlo.

Nos quedamos así varios minutos, hasta que vinieron a avisarme de que ya podía irme.

Salimos, y no reconocí el lugar. Bueno, tal vez era porque nunca  había estado allí.

- ¿Quieres ir a tomar un helado? - Peter me sacó de mis pensamientos.

- Si tu quieres - me encogí de hombros. Y luego asentí.

Caminamos hacia una heladería y pedimos 2 helados, el de Peter más grande que el mio. Nos sentamos en absoluto silencio y comimos el helado. Esto nuevamente se estaba empezando a volver incómodo; solo que esta vez no podía poner excusas para irme...¿o si?

- Peter, tal vez deba volver a mi casa... mis padres deben estar preocupados y...

- Hablé con tus padres - me interrumpió. ¿Que? No,no, no por favor, no. No quería que se enteraran así de que tenía novio, no.- y les dije que te quedarías en mi casa -  no, no, no, no, no. Vergüenza y más vergüenza  recorrió mi cuerpo, provocando que me sonrojara.

- ¿Que hablaste con ellos?- le pregunté. El serió, pero sin mostrar su perfecta dentadura.

- Nada, les dije que tuviste un accidente y que luego te ibas a quedar a mi casa, solo eso - rió.

- ¿Que te dijeron ellos? - estaba a punto de atragantarme con el helado.

- Eso no importa... Ahora, vamos que se hace tarde - se levantó. Aún no habíamos terminado nuestros helados, pero parecía estar apurado.

Caminamos unas dos cuadras lentamente, mientras terminábamos de comer. Llegando a su casa, pareció ponerse nervioso. Antes de entrar, noté como se puso tenso y me miraba fijamente. ¿Que esta tramando?.

Abrió la puerta y literalmente corrió, hacia adentro de la casa. Estaba todo oscuro, solo había una luz que parecía venir de la cocina. ¿Y sus padres?

- ¿Peter? - lo llamé. Entré lentamente a la casa, ya que me había dejado sola. Por alguna razón, un par de escalofríos recorrieron mi cuerpo, haciendo que me estremeciera.- ¿Peteeeer? - pregunté nuevamente, esta vez alargando la e.

Caminé un poco más rápido y frené en seco al ver la cocina.

¿Que demonios?

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Perdón que es super corto... ¡estoy de vacaciones! Y bueno,de viaje, nuevamente sin internet... Igual, en unos días voy a un hotel (ahora estoy en la casa de mi abuela xd) y el hotel tiene internet! Así que voy a tratar de subir.

'Perdón si tiene faltas, lo escribí con el celular'

Creeeeeeeeeeeeeeo :s que este es el penúltimo capítulo. Por lo que tengo planeado voy a hacer solo un capítulo más y el epílogo...

Espero que les guste <3 Graciaaaaaaaaas por los votos y a las personitas que comentan! Ls quierooooooooup ❤