Cree En Mi ♡ Laliter ||EN EDICIÓN||

Capítulo 29

Peter.

Horas antes.

- Hola, Peter - me saludó Pablo.

- ¿Que haces acá? - le pregunté mientras agarraba mis cosas. No recuerdo haberle pedido que viniera.

- Vine a buscarte... bueno, necesitaba hablar con vos - comenzamos a caminar. Le hice un gesto para que siguiera hablando - es sobre, anoche... Emm, lo siento - tartamudeó.

- ¿Por que lo sientes? - no estaba entendiendo nada.

- La bebida de ayer... yo pedí vodka, pero me dieron otra cosa, que en el momento no me di cuenta de eso... Resulta que era una mezcla de bebidas, que ahora no me acuerdo como se llamaba, y bueno... tenía una muy, pero muy pequeña dosis de éxtasis - terminó, y frené de golpe. Las drogas nunca habían estado en la lista de cosas que me gustarían hacer. Mierda, mierda. Por eso había alucinado a Lali.

- ¡Mierda Pablo! - le dije furioso. Había cometido un gran error por su culpa.

- Lo siento, de verdad, lo siento Peter - me contestó, y comencé a caminar, dejándolo por detrás.

Llegué al colegio, y ni siquiera miré atrás para ver si Pablo me estaba siguiendo. Al entrar, vi que a unos metros estaba Lali con Euge.

En el camino, se me había ocurrido una idea. No le iba a decir nada, todavía, iba a invitarla a pasear y ahí contarle todo, bien.

Me acerqué a ella y apoyé mi mano en su hombro. Pero cuando se dio vuelta y la vi; con cara de pocos amigos ,pero mierda, es realmente hermosa. Culpa recorrió mi cuerpo. Imbécil.

Vi a Euge, que había dejado de hacer lo que sea que estaba haciendo y se había parado para mirarnos, con la misma cara que Lali. Algo no anda bien.

Le sonreí, pero ella no hizo absolutamente nada. Me acerque a ella para besarla, iba a hacer que cambiara esa cara. Pero hizo lo que menos me esperaba. Me. Corrió. La. Maldita. Cara. ¿Que carajos le pasa?. Y antes de que pudiera pensarlo, se había ido; y me encontré con que Euge me estaba mostrando el dedo del medio. ¿Queeee?.

- ¿Todo bien? - me preguntó Nico, que por arte de magia apareció a mi lado.

- No, nada esta bien... - negué con la cabeza. No lograba entender nada.

- Vamos, llegamos tarde - me empujó para que comenzara a caminar; pero mi mente ya no funcionaba. Mery; ¿Y si le había contado a Lali?.

- No. Antes tengo que hacer algo - me di vuelta en busca de Mery. Caminé hasta que la encontré, sentada en un banco del patio junto con su grupo de amigas.

- ¡Peter! . gritó cuando me vio, saltó y me abrazó.

- Mery, te fuiste al carajo...- ella frunció el ceño.

- ¿Con que?.

- Ya me enteré que pusiste droga en las bebidas de tu fiesta - empezó a reír. No lo podía creer.

- ¿Y que con eso? ¿Acaso no te divertiste? - preguntó irónica, sabía por que lo decía.

- Esto no va a quedar así... - y me fui. Ya debía haber entrado hace 15 minutos. Van a matarme.

- Eh... permiso.

- Llega tarde Lanzani - suspiró la profesora de literatura.

- Lo siento... ¿puedo entrar? - la profesora asintió y mi mirada se fijó en Lali. Lamentablemente, el único asiento libre era al otro lado del salón, lejos de ella.