Seis meses después...
Me miré al espejo y sonreí; estaba vestida con un vestido blanco, que me llegaba por encima de las rodillas. Euge estaba en le baño, ella era la que me estaba ayudando en toda esta locura.
Voy a resumir lo que pasó.
Hace 2 meses cumplí los dieciocho ; igual que Peter, que los cumplió un mes antes que yo. Un mes después, a mis padres les ofrecieron irse a California. Me insistieron tanto en que fuera con ellos que casi les digo que si, pero no podía dejar a Peter solo, no iba a abandonarlo.
Entonces, mi hermoso chico me dijo que podía irme a vivir con él, a la casa de sus padres obviamente; hasta hace dos semanas.
Decidimos ir a la universidad de Buenos Aires (por cierto, ya nos graduamos, y nos aceptaron a ambos), entonces alquilaríamos un pequeño apartamento allí.
Como dije, nos mudamos hace dos semanas. Es realmente acogedor, y muy, pero muy hermoso.
Hace... 1 mes y medio, Peter me pidió, nuevamente, matrimonio. Y ahora mismo me estoy preparando para mi boda. Si, voy a casarme con 18 años... loco ¿no?
La mejor locura.
- ¿Estas lista? Mira que falta poco - gritó Euge desde el baño; se estaba maquillando.
- ¡Que si! Ya estoy lista mujer grité por décimo-novena vez. Creo que ella estaba más nerviosa que yo.
Salió y me miró. Sonrió de oreja a oreja y se me acercó, para mirarse ene el espejo.
- Dios, ¡estas preciosa! - me miró y se puse a mi lado, frente al espejo.
- Tu también - le contesté, y era verdad, llevaba un vestido azul por encima de las rodillas. Es mi dama de honor, pero, igual, ella eligió el vestido.
- Cuando Peter te ves se va a caer muerto - comentó.
- Lo mismo opino de Nico - se giró y sonrió.
- Ay, ¿te puedo abrazar? me preguntó con cierto brillo en sus ojos.
- ¡Eso no se pregunta! Ven aquí- caminé un paso y la abracé. Estuvimos asi varios minutos, hasta que nos vinieron a avisar de que estaba todo listo.
- No sabes cuanto me alegro por ti de esto - dijo mientras me miraba por última vez. Estaba a punto de salir.
- Gracias, ahora, prepárate, vamos a salir - le dije. Ella iba a salir conmigo; mis padres estaban en California, y cuando les conté sobre mi boda inmediatamente me dijeron que no podían venir. A lo primero me angustié, pero luego pasó; estaba acostumbrada a que nunca estuvieran conmigo.
- Vamooooooos - dijo antes de salir por la puerta.
Entramos, y ahí estaba Peter, vestido de traje. Esperándome
Tenía el pelo un poco despeinado, algo muy normal en él. Está. Malditamente. Sexy. Me miró entrar y en su boca se formó una pequeña o. Me miró tan fijo que por un momento pensé estar desnuda.
Seguí caminando, junto a Euge. Las miradas de todos estaban posadas en nosotras. La miré y note que estaba un poco sonrojada, al igual que yo.
- Estas hermosa - susurró cuando llegué a su lado.
- Tu también estas muy hermoso - le contesté y sonreímos.
- ¿Aceptas como esposa a Mariana Espósito, en la salud y en la enfermedad, en la prosperidad y la adversidad, para amarla y respetarla hasta que la muerte los separe? - creo que nunca estuve tan nerviosa en toda mi vida. Estaba mirándolo fijamente, sus ojos atrapando a los mios. Sonrió. Necesitaba recordar este momento, siempre.
- Si, acepto - respondió Peter, y se mordió el labio inferior. Mis ojos se llenaron de lágrimas, de emoción por supuesto.
- Mariana Espósito, ¿aceptas como esposo a Peter Lanzani, en la salud y en la enfermedad, en la prosperidad y la adversidad, para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?
Sonreí. ¡Si!. Aunque me moría por gritar que si, que lo amaba y besarlo hasta que nuestros labios se desgasten, quise juguetear un poco.
Me quedé en silencio. Uno, dos, tres, cuatro.
- No lo se - dije por fin, y me giré a voltear a Peter. Estaba asustado, y preocupado. En sus labios estaba la o, nuevamente.
- Es mentira, tonto. Si, acepto - dije, bastante alto. El suspiró, aliviado. Y volvió a sonreír.
- Los declaro marido y mujer. Pueden besarse.
Y no aguanté más. Me lancé a sus labios, mientras todos aplaudían.
- Todavía no lo puedo creer - dije contra sus labios, este momento era realmente hermoso.
- Yo tampoco -me contestó, y sonreímos, todavía besándonos.
- Te amo...- susurró levantándome en el aire. Me reí.- Ey, ¿de que te reís? ¿Acaso no me crees?
- Creo en ti, tonto. Te amo muchísimo más.
FIN del fin.
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wowowowowowoowowowow perdón que es super corto, y que demoré; ¿motivos? 1) sinceramente, no tenia ideas .-. y 2) Me quebré un dedo, si, me esta costando un montón escribir este capítulo. Pero no importa, ¡Porque es el fin!
¿Les gustó la nove? Ay, espero que si ;)
Ahora que terminé esta, voy a seguir con You are the love (novela que empecé a escribir y pausé, hasta el fin de esta)
*No tengo ni la menor idea sobre casamientos, esto lo hice con ayuda de una amiga, ahresi*
AGRADECIMIENTOS:
Bueno, no se que decir, aire.
Gracias a mi mejor amiga, que me mostró lo que era wattpad. Gracias a mi otra mejor amiga, que me dio la idea de hacer esta novela.
Gracias infinitas a cada uno de ustedes.
A las personitas que comentan y votan: GRACIAS, por el apoyo, por votar y comentar ahre, y por seguir leyendo. Gracias a ustedes no borré esta novela u.u
Gracias también a los lectores fantasmaaaaas, que aunque no votan ni comentan, siempre leen la novela <3
Gracias a Lali y a Peter (? y a mi corazón de gorda shipper, que hizo que ahora esté escribiendo esto.
Bueno, simplemente... GRACIAAAAAASJCBEJVBA<NCKAX LS AMOOOJSJS <3
Me pongo en modo cursi (? si.
Con esta novela, literalmente, aprendí un montón (es la primera que escribo). No me considero buena escritora, para nada; pero si leo el primer capítulo y el último, creo que hay una diferencia. Confieso que a veces me dan ganas de cambiar los primeros capítulos, ya que no me gustan ._.
Llegué mucho más lejos de lo que esperaba.
Ay, no la quería hacer tan larga... ta, dejo todo por acá. Si no voy a escribir más agradecimientos que final. ahr.
GRACIAS (de nuevo) Y LS AMOP <3<3<3<3<3<3<3<3
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Cree En Mi ♡ Laliter ||EN EDICIÓN||
FanfictionMariana Espósito tenía una hermosa vida en Uruguay. Hasta que se vio obligada a mudarse a Buenos Aires, ciudad en la que va a conocer a Peter Lanzani, el chico más popular, galán y mujeriego del colegio.