¿Cómo Conquistar A Mike? | Muke

|•Motel•|

Michael

¿Qué se cree el puto de James? Es un hijo de puta, no merece vivir, no merece nada. Se ha pasado, se ha metido con Luke, está muerto, jodidamente muerto.

¿Cómo puedo estar seguro de eso? Bueno, sólo no crean que yo soy un homicida, de hecho no es tanta la culpa. Es como si no hubiese pasado nada, quién podría extrañar a ese baboso, nadie, ni siquiera un mosca.

Estaba feliz de la vida, no tanto pero lo estaba. Habían pasado tres días desde que Luke fue atacado por ese idiota, así que yo estuve investigando y toda la cosa, con ayuda de algunos amigos un tanto misteriosos, y no, no estoy hablando de Calum ni Ashton, esos dos no saben nada de lo que sucedió. Encontré la dirección del apartamento del tal James, su nombre completo y un poco sobre su vida, especialmente en la parte amorosa y mi Luke estaba incluido.

En fin, le hice una pequeña visita, se sorprendió cuando le conté todo lo que sabía de él y lo que le había hecho a Luke. 

Idiota.

—¡Cómo sabes eso?

—Yo lo sé todo— respondí , mostrándole mi mejor sonrisa.

Después de eso mis friends se hicieron cargo de él, esa es la parte en donde no tengo, aún, ni puta idea de donde esté.

Pero lo bueno de todo esto es que Luke ya no estará en peligro.

Ya saben, no se metan con mi Lukey, no lo hagan jamás. Ahora sí, Luke me seguirá conquistando, bai.

***

Consejo 2: invítalo a sus lugares favoritos, y demuéstrale a todos que te pertenece.

Luke estaba en una nueva fase, esa en donde está prácticamente loco y mal por Michael. Así que, para tener todo bajo control, escribió una lista de consejos y cosas para enamorar a Michael, incluyendo los que anteriormente ya había colocado en práctica, quién quita que los vuelva a necesitar.

—¿Luke? Son las siete de la mañana— su voz estaba ronca, acababa de levantarse de la cama.

—¡Y qué estás esperando!— exclamó mientras agrandaba sus ojos.

—Tengo sueño, Luke — se quejó el teñido, restregando su ojo derecho a la vez que bostezaba.

—Te ayudaré — la blanquecina dentadura del larguirucho rubio, resplandeció.

Y antes de que el teñido vociferara un 'pero', el rubio lo tomó de la muñeca y le llevó hasta el baño.

—¿Qué pretendes, rubiecito?— encaró una ceja y se cruzó de brazos.

—Te voy a ayudar a bañar— se encogió de hombros e hizo un puchero.

—Ni lo creas, yo puedo solo.

Con empujoncitos sacó a Luke del baño. Casi una hora después Michael estaba listo para irse con Luke a algún lugar.

—¿A dónde me llevas?— el teñido tenía una bandana que cubría sus ojos verdosos, mientras el rubio conducía el carro que su padre le prestó.

─Es una sorpresa, amor─ dijo el rubio, mordiendo su labio inferior.

El resto del camino fue silencioso, Michael estaba con sus brazos cruzados, y murmurando cosas ininteligibles; por otra parte, Luke brotaba felicidad y ansiedad por sus poros. Aparcó el auto dos cuadras lejos del lugar.

─Llegamos, pero aún no puedes quitarte eso─ advirtió el rubio.

─¿Por qué no? ¡Luke, yo quiero saber dónde estoy!─ pataleó el otro muchacho.

─Solo te diré que te va a encantar─ soltó una risilla maliciosa, bueno eso aparentó.

Un pesado suspiro salió del interior del teñido, se cruzó, una vez más, de brazos y dejó que el rubio lo guiará por un camino en donde casi pierde una pierna y por poco su nariz, otra vez. Y en ciertas ocasiones gritaba a desconocidos: "No lo mires, es mío"

─Ten más cuidado─ habló a regañadientes, mientras se levantaban del suelo.

─Lo siento, son los nervios.

Cuando llegaron al destino planeado por el rubio, por fin se pudo deshacer de esa bandana. Un alivio sintió el mayor, sin embargo no duró mucho.

─¿Qué significa esto?─ detalló el lugar.

─Sorpresa, bebé─ abrió sus brazos, esperando probablemente un abrazo por parte de su acompañante.

─Es un motel, Luke─ frunció sus labios.

─Y a ti te gusta el sexo─ encogió sus hombros─. Una buena combinación, eh─ elevó repetidas veces sus cejas.

Una sonrisa socarrona por parte del chico de cabello de color, fue suficiente para demostrarle a Luke que lo había hecho bien, o eso creyó el rubio.

─Conque me gusta el sexo, eh─ tiró a Luke contra la cama de sábanas blancas. Un par de esposas estaban sujetadas en una barra de la misma. ¿Coincidencia? Por supuesto.─¿Crees que soy un sucio pervertido?─ besó fuertemente el labio del menor, quien no respondió con más que un gemido de satisfacción.

─Mi-michael.

─Luke, esta vez yo te enseñaré una cosa─ tomó la muñeca del rubio, y lo esposo, hizo lo mismo con la otra muñeca. Le dio otro beso y masajeó su entrepierna.─ Si tienes en plan un motel, recuerda que es mejor de noche, Lukey─ hacía pausas para dejar besos en su cuello.

─Yo, yo. Michael─ gimió.

─Ya que aprendiste algo nuevo...─ se levantó de la cama y sujetó la perilla de la puerta.

─¿Mike?

─Yo quería ir a un puto parque de diversiones, pervertido.

Michael salió de la habitación y la cerró a su paso, cuando llegó a la recepción se encontró con Matt, su primo.

─Matt, te encargo al rubiecito de la habitación, déjalo veinte minutos, luego lo sueltas y le dices que estaré con Jack en el parque de diversiones.

Matt asintió y chocaron manos.

─Saludes a mi tía─ gritó.

El perfecto plan de Luke se fue a la basura, así que prefirió quedarse dormido en esa sucia cama.

El nuevo plan de Michael, fue increíble, aunque vomitó al bajar de la montaña rusa.   

***