Todo me lleva a ti

12 - ¿Jade y Liam?

1 Semana después

Harry’s POV

                Intenté contactar a Jade durante la semana pero evidentemente estuvo evitándome. Terminé por preguntarle a Perrie, primero a través de Zayn, luego personalmente cuando vino de visita a uno de los ensayos.

-¡Ay Harry, eres tan tierno!

- No lo soy, sólo es curiosidad.

-Por supuesto que sí…lo que tu digas, contestó burlándose al mismo tiempo que me apretaba las mejillas. Alejé sus manos de mi rostro.

-¡Oh Vamos Perrie! Sólo contesta…

-Eres malvada, acotó Zayn. Muy bien, tenía el cartel de turno. Había llegado la hora de burlarse del tonto y estúpidamente enamorado Harry.

-¿Podemos empezar a ensayar de una vez por todas? ¿Dónde diablos está Liam?, cambié de tema, algo molesto.

-Llegando tarde, pero llegando, gritó alegre Niall desde una esquina de la sala, con su guitarra en mano.

                Gruñí por lo bajo y me senté a su lado, un poco apartado. Observé por unos minutos cómo se divertían tocando distintos acordes con Louis, mientras Zayn y Perrie se susurraban cosas al oído y reían tontamente. No podía, ni quería, dejar que mis sentimientos siguieran afectando mi vida y mi trabajo, pero tampoco podía evitarlo. Era en extremo frustrante como Jade no me dejaba entrar a su vida, había una pared invisible entre nosotros, más que una pared, era la maldita muralla china para ser más exactos.

-¡Hey! ¡Lamento la tardanza chicos!, se anunció Liam sonriente. A pesar de estar un poco molesto por habernos hecho perder casi 40 minutos, fingí una sonrisa conciliadora.

-¡No hay problema, hermano! ¿Fue productivo al menos?, preguntó Louis despertando mi curiosidad.

-¡Oh si! ¡No tienes ni idea! De eso necesito hablar luego contigo, tu opinión es requerida.

-Cuando quieras, contestó emocionado.

-Hey Payne, ¿no saludas?, le reclamó Perrie evidenciando su acento cerrado de South Shields, que me hizo recordar a ya saben quién.

-¡Claro que sí! No te vi hoy, te fuiste antes que llegara, dijo Liam, entregándole unos anteojos de sol, Jade te envía estos, los olvidaste arriba de la mesa o algo así.

-¡Los estaba buscando! Tengo la mejor amiga del mundo.

-Estoy bastante seguro de eso, afirmó él en tono suave, refiriéndose a Jade, mi Jade. ¿Cómo rayos es que él pudo verla? ¡Algo estaba pasando y todos parecían saberlo excepto yo! Fruncí el ceño y mantuve mis puños apretados unos minutos mientras consideraba las posibilidades. Jade me odiaba, ¿pero por qué?, Liam había ido a visitarla a pesar de sus negativas, pero cuando yo fui, se hizo negar por la madre, ehmm, ¿qué otra cosa podía ser?… Oh no, todo era claro: Entre Jade y Liam pasaba algo, y todos eran cómplices de su romance. 

                Ni bien finalizó el ensayo, corrí hacia la salida, azotando la puerta a mi paso. La idea de Jade y Liam juntos, besándose, me atormentaba. Ahora entendía la reacción de Liam en Australia cuando decidí declararme indirectamente a Jade desde el escenario. Iba a golpearme, lo pude ver en sus ojos en ese instante, pero la verdadera razón salía a la luz recién ahora. ¿Por qué nadie me lo dijo? Me han dejado todo este tiempo como un tonto, esperando algo que jamás sucedería, ignorando por completo como mi supuesto amigo seducía a la persona que más me importó jamás, y justo delante de mis narices. ¿Cómo pude ser tan idiota?

          Me alejé sin rumbo, seguí corriendo, cada vez con más fuerzas, hasta que mis pulmones se quedaron sin aire. Ni siquiera podía soportar escuchar música en este momento, todo me recordaba a la traición de mi amigo. De todos ellos. Saqué el teléfono de mi bolsillo, repasé los contactos y llamé a Nick.

-Hey Nick, soy Harry

-¡Hola amigo! ¿Dónde estás?

-Uhm, no estoy muy seguro, Londres seguro.

Río ante mi respuesta, -¿Y bien?

-¿Qué?

-La fiesta…, volvió a reír.

-Oh si, para eso llamaba. Cuenta conmigo.

-¡Perfecto! Cara realmente quiere conocerte.

-Genial, respondí, decidido a avanzar con ella finalmente. Basta de Jade en mi vida.

Jade’s POV

                Algo cambió en mí desde el ataque de pánico, o mejor dicho, desde que volví de esa oscuridad y lo vi. Sus ojos penetraron en los míos y puedo jurar que vi su alma. Era un costado de Harry que no conocía, ni siquiera creí que existíam, y haberlo juzgado me avergonzaba, no sabía cómo volver a enfrentarlo después de aquél encuentro.

                Había descubierto un Harry más allá de toda actitud y pose, pero él, me había visto totalmente expuesta, con todas mis debilidades a flor de piel, y yo, simplemente no podía soportarlo. No era capaz de costear que alguien atravesara la coraza de protección que tardé tanto tiempo en armar.

                Mi corazón no podría aguantar que alguien más conozca mis secretos, ya era abrumador que Liam lo haga, y a pesar de nuestro acuerdo tácito de no hablar de ciertos temas, a veces, se sentía como un elefante en la habitación. Imposible de ignorar, pero también imposible de hablar, ya que era, en cierta forma, hacerlo real. No sé si me explico.

                Inmediatamente después de mi crisis, comencé a escribir frenéticamente. Por algún lado tenía que depurar todo esto que me estaba aniquilando por dentro. Decidida a alterar mi actitud, le pedí ayuda a Liam. Llené dos cuadernos en menos de una semana.

                Escribir, superar y continuar era el mantra de mi amigo, que además, era un brillante compositor. Originalmente venía a casa un par de minutos al día, que luego se transformaron en horas, para leer lo que había escrito, y aunque se sentía como desnudarse frente a la otra persona, no se me ocurría nadie mejor para compartir todo esto. Su tranquilidad era reaseguradora, siempre estaba alentándome a ir más allá.

                Únicamente por su insistencia, terminé aceptando que Louis también viniera a ayudarnos. No era ningún secreto, sólo se sentía demasiado personal para ser compartido. Al menos por ahora, no estaba lista para liberar mis escritos al mundo.

                Louis se sumó a la dupla, luego de su ensayo. Habíamos estado puliendo la letra de una canción con Liam y el nos ayudaría con la melodía que ya teníamos en mente.

-Jade, ¡esto es fantástico! exclamó Louis con brillo en sus ojos.

-¿De verdad lo crees?, dije tímida.

-¡Por supuesto!, levantó una ceja inquisidora, ¿Por qué lo dudas?.

-Ni te gastes Louis, le he estado diciendo lo mismo por casi una semana y sigue dudando.

-¿Qué? Deberías mostrárselo a las chicas, sería excelente para el nuevo álbum.

-No lo sé…

-Creo que es la mejor idea que alguna vez salió de esa cabeza, hermano, agregó Liam con su típica media sonrisa mientras se posicionaba entre nosotros colocando cada brazo en nuestros hombros -¿Cuándo haremos la reunión de presentación?

-No, no, no. Ni lo sueñen, los miré con seriedad.

Ambos rieron y gritaron: -Eres una dudadora compulsiva, además ¡Ya arreglamos todo para esta noche!

Sonreí inconscientemente ante sus expresiones expectantes. Tal vez si era el momento.