33 - Mi Historia

1.9K 62 15
                                    

Jade’s POV

                Después de haberme consumido solo entre suspiros de pesadumbre decidí que ya era demasiado, no podía seguir sintiendo pena por mí misma, era momento de enfrentar que me había equivocado, sí, pero que ya no podía hacer nada para modificarlo. Harry estaba viviendo su historia y yo debería empezar a vivir la mía.

                Salí a caminar por Regent Street. A perderme entre la gente de paseo. Sabía que si cerraba las cortinas y me encerraba nuevamente en mi habitación, no saldría jamás. Caminaba casi sin rumbo, dejando las lágrimas caer incontrolablemente. Había dejado de limpiarlas o tratar de ocultarlas, las dejaba salir, libres, y secarse en mis mejillas por sí solas.

                Poco me importaba si alguien me reconocía,  además, para ser sinceros, las probabilidades de ser reconocida con esta facha eran prácticamente nulas.

                Iba casi perdida, sumida en la música que salía de mis auriculares y me envolvía, concentrada en la letra de la canción Many The Miles de Sarah Bareilles cuando me pareció reconocer una figura a la distancia.
                Me frené en seco, re calculando mis próximos movimientos. ¿Debería hacer de cuenta que no lo he visto y pasar de largo, esconderme y espiar con quien está o sólo girar sobre mis talones y cambiar de dirección?

-¿Jade? Demasiado tarde para todas las opciones...

- Hey Mitch. ¿Cómo estás?

- Yo bien. ¿Tu? ¿Cómo has estado?

- He estado mejor, no voy a mentirte. Se rascó la nuca, seguramente sopesando qué decir. No esperaba ser tan sincera, él incluso menos, pero las palabras brotaron instintivamente.

- Emm. Volvió a rascarse la nuca. No sé si debería inmiscuirme en sus asuntos pero...Sam tampoco ha estado muy bien que digamos

- Me cuesta un poco creer eso.

-Puedes preguntárselo…ahí viene…

-No creo que sea buena idea. Mejor me voy yendo. No estaba segura de estar lista para verlo y resistir sus posibles palabras de odio. Adiós Mitch. Fue bueno verte. Comencé a caminar de vuelta hacia mi hogar

                Había hecho apenas cinco pasos cuando escuché su voz y mis rodillas flaquearon.

-¡Jade! Junté fuerzas y me di la vuelta.

-Hey, Sam. Fue todo lo que fui capaz de decirle.

-Hey…

-Hey… Ambos reímos ante nuestra incomodidad.

                Parecían literalmente años desde la última vez que habíamos hablado, era extraño, sí, pero de alguna manera reconfortante. Sus ojos cafés eran gentiles, sin rencor, y me retrotraje a la primera vez que nos vimos. Recordé cada una de sus palabras la primera vez que me invitó a salir, y nuestro primer beso, ese día que prestó su campera porque hacía frío. Sonreí, encontrándome con su sonrisa curva que tanto había querido.

-¿Dónde ibas?, habló después de unos momentos de absoluto silencio.

-Estaba volviendo a casa. Mi voz un poco ronca por los nervios.

-¿Puedo acompañarte?

-Si quieres…

-Si

-Está bien entonces…

 

-Es bueno verte después de tanto tiempo, ¿sabes?

-Mhm

-No me crees. Dijo adivinando mis pensamientos.

-No mucho.

-¿Por qué? Realmente te he extrañado.

-Podrías haber llamado. O aún más fácil, haber atendido alguna de mis trescientas llamadas.

-Quería hacerlo, pero no podía, no en ese momento.

-¿Tanto me odias? Pregunté deteniendo nuestro paso y mirándolo directo a la cara.

-No te odio, Jade. Nunca lo hice. No podía hablar contigo porque sabía que dijeras lo que dijeras, ibas a convencerme de volver.

-¿Y qué cambió ahora?

-¿La verdad?

-Si… Suspiramos al mismo tiempo, el preparándose para hablar, yo para escuchar.

-Creí que ibas a ir corriendo a los brazos de Harry, pero me equivoqué. Él está con otra persona y tu estas…sola...hasta donde sé.

-¿Por qué creíste eso?  No me atreví a decirle que en cierto modo así había sido.

-Había entre ustedes una energía indisimulable, pero supongo que fueron los celos que hicieron que viera cosas donde no las había, o algo así.

-Algo así…dije nuevamente no atreviendome a esclarecer los hechos. ¿De qué servía ahora decirle que si había pasado algo entre nosotros pero que para Harry no significó nada?

                Sonrió y antes de que pudiese reaccionar me tenía tomada de la mano. Le di un leve apretón y caminamos así, juntos como antes, hasta mi casa. Sam, al fin y al cabo, era mi historia. 

Todo me lleva a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora