Todo me lleva a ti

39 - Todo junto

Jade’s POV

                Estaba sumida en hondos pensamientos, intentando ordenar todos estos sentimientos que últimamente me quedaban tan grandes.  Necesitaba controlarlos, para poder superarlos, de eso estaba segura. ‘El autocontrol conduce a la felicidad’ repetía como mantra para mí misma.

                El  timbre retumbante de un celular rompió mi burbuja  de soledad. Me levanté de repente y apoyé mi oreja contra la puerta para detectar si alguien se estaba acercando.

                Escuché lo que parecieron ser pasos y luego silencio. Conté mentalmente hasta 20 y me apuré a salir sin ser vista. Volví a mi cuarto y sorprendí a Sam, sentado en la punta de la cama, revisando mi celular.

-¿Qué estás haciendo?, pregunté enseguida pero intentando permanecer calmada.

-Nada, dijo levemente sorprendido, alejando el celular e intentando ocultarlo bajo su pierna

- ¿Qué es eso? Señalé con el dedo índice. ¿MI celular?

-¿Dónde estabas? Contestó, evadiendo totalmente el hecho que obviamente había visto lo que estabas haciendo.

-Desayunando, dije sin emoción alguna y contraataqué: ¿Qué estabas haciendo con mi celular?

-No estabas desayunando. Fui a buscarte y NO ESTABAS. Elevó la voz, su rostro reflejaba enojo. ¿Enojo? Yo tendría que ser la molesta aquí. Di un suspiro.

-Pasé por el desayunador, tomé algunas cosas y fui a recorrer el hotel. ¿Está bien? No sabía que tenía que informarte todo lo que hacía.

-Todo no. Podrías empezar por no mentirme. 

-No te mentí

-¿No me mentiste? ¿Estás segura? Se levantó, acercándose a mí. Instintivamente retrocedí. Por cada paso que el daba hacia delante yo lo hacía hacia atrás.

-¿¿¿De qué estás hablando???

-¡¡¡HARRY, HARRY, HARRY!!!

                Los pensamientos giraban en mi cabeza a mil por segundo. No podía articular palabra alguna y Sam lo único que hacía era seguir gritando su nombre. HARRY, HARRY…Quería saber qué sabía, pero también quería que se callara…HARRY, HARRY…  necesitaba entender a qué se refería pero a la vez no quería tener que explicar nada de lo que viví con él.

- Me mentiste otra vez Jade y no puedo soportarlo. No voy a vivir de nuevo lo de Derrie.

                ¿Qué estaba diciendo?¿¿¿Qué??? Coloqué mis manos sobre mis oídos, intentando evitar escuchar su nombre, los gritos, las palabras de Sam. Yo tampoco podía soportar todo esto de nuevo.

                Pero la idea de quedarme sola me aterraba más que nada. Rendida, dejé caer los brazos. Me acerqué precavidamente hacia él y dejó de gritar. Su mirada penetraba la mía y sentí miedo recorrer mi espalda en un escalofrío. Solté un grito ahogado al escuchar fuertes golpes en la puerta de la habitación.

-¡Jade! ¿Estás bien?  ¡¡¡Déjanos entra!!!  La voz alarmada de Perrie me hizo comprender que seguramente el hotel entero había escuchado nuestros gritos.

-¡Sam! ¡Déjanos entrar ya mismo! Esta vez fue Leigh-Anne.

                Ambos permanecimos inmóviles, mirándonos. Hasta que los alaridos de las chicas se tornaron insostenibles. Hice un pequeño gesto con la cabeza en dirección a la puerta y él asintió, de acuerdo en dejarlas pasar. Apenas abrí la puerta y entraron en estampida.

-¿Estás bien? ¿Te hizo algo?

-No sé de qué están hablando todas. Las tres me miraban por todos lados, como buscando alguna señal física que les avalara lo que estaban pensando. Estoy bien

-Nos vamos. Habló de pronto Jesy, y me rodeó los hombros con su brazo, no sin antes lanzarle dardos con la mirada a Sam que seguía estático en el mismo lugar.

-¿Dónde vamos? Pregunté confundida mientras me guiaban fuera de la habitación, directo a los ascensores. Eran la 8 de la mañana.

- Nos juntaremos con los chicos en la sala de ensayo para practicar algunos temas juntos. Contestó Perrie con la voz aguda de la emoción.

-¡¿Qué?! 

Esto no es bueno.  ¿Por qué tenía que pasar todo junto? ...  Hay días que no tendría que vivirlos...