Me desperté pensando que se me olvidaba alguna cosa. Como si hoy fuera a ocurrir un acontecimiento del cual no me acuerdo. Al ser hoy sábado, no me cambié para bajar a desayunar.
La relación entre Josh y yo iba mejor que nunca. Habíamos solucionado nuestros problemas y parecíamos una de esas parejas demasiado amorosas.
Cuando bajé el último escalón, Shane se atravesó y me levantó por los aires. No pude evitar un pequeño grito de sorpresa. Shane me bajó finalmente con una sonrisa en su cara.
-¡¿Qué haces, aborto de topo?! ¡Me has asustado!
-Hasta en tu cumpleaños estás amargada.- dijo sacándome la lengua- Felicidades hermanita.
-¡¿Es hoy?!
Shane frunció el ceño mientras asentía lentamente. Yo simplemente lo abracé mientras sonreía.
-Ya soy mayor de edad. Ya me puedo ir de aquí.
Shane me sonrió y me dio un beso en la frente.
-A desayunar.- cuando llegué a la cocina, vi que Shane me había hecho tortitas, las cuales devoré en seguida.- Por cierto, Emily ha llamado. Preguntaba por ti.
-Ahora la llamaré.
Fui hacia mi habitación y cogí el teléfono. Al no ver ninguna llamada perdida supuse que Emily había llamado al fijo, o a mi hermano. Marqué su número y esperé dos pitidos hasta que lo cogió.
-¡Felicidades!- gritó. Yo reí.
-Gracias.- dije sonriendo.
-A las 16:00h. Tú. Yo. Tarde de chicas. No sirve negarse.
-Vale, pues supongo que acepto.
-Así me gusta. Vendré a recogerte y no volveremos hasta tarde, así que lleva dinero, mucho dinero.
-Eres una derrochadora, en serio.
-Ya lo sé, así soy yo. Y así me amas.
-Si quieres puedes venir a comer, no creo que a mi hermano, que también es tu novio, le importe.- le comente a Emily.
-¿Puedo?
-Claro, ahora aviso a mi hermano. Ven sobre las 14:00h.
-Genial. Eres la mejor.
-Lo sé.
Hablamos unos minutos más y luego colgué. Bajé al salón para comentarle a mi hermano de la unión de Emily para comer. En cuanto se lo dije, se le escapó una sonrisa que luego intentó ocultar.
Me pasé la mañana leyendo. Tenía demasiados libros pendientes y no me daba tiempo a leerlos todos.
Emily llegó pocos minutos después de la hora acordada. Shane corrió a abrirle la puerta y la recibió con una sonrisa. Les dejé un tiempo hasta que me harté y fui a saludar a Emily.
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-¿Estás lista para divertirnos?
-¿Sabes? Eso se suele decir cuando se sale por la noche, no a las cuatro de la tarde.- comenté mientras me ponía las botas.
-Da igual. Nos podemos divertir igual ahora.
Me levanté y me miré al espejo. Me había vestido con una camiseta corta atada al cuello negra, una falda negra con rayas verticales y horizontales blancas, una chaqueta vaquera azul claro, una botas negras y medias transparentes.
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Odio entre clases
Tienerfictie-Idiota, te odio. -En realidad me amas.-dijo con una sonrisa burlona. -Jamás podría enamorarme de alguien como tú. No otra vez. -¿Apostamos?
