Memoria Perdida | h.s

13

- ¡Apenas termines de acomodar tus cosas, te mostrare lo que es esta ciudad! - exclama Liam, mientras me acompaña a lo que sera mi habitacion - ¡Dios, estoy tan feliz! Veras todo es tan hermoso y la Torre Eiffel de noc... 

- Ya ya - reí dejando mi maleta por encima de la cama y abriéndola. - Habrá tiempo para todo tontín. ¡Eres el mejor! - me acerque para abrazarlo. 

Liam se retiró a los segundos para preparar el almuerzo del día. Comencé a sacar mi ropa y cosas, cuando un papel en impecables condiciones apareció en el medio de la maleta. Lo sostuve unos segundos y me senté en el borde de la cama, me estaba quebrando por dentro. 

La carta de Harry estaba intacta, por un momento había olvidado que la había guardado junto con lo demás. Cerré los ojos y mantuve la postura, no quería llorar. 

Pero lo extrañaba tanto... Llorar a veces hace bien. 

Las lagrimas comenzaron a caer en cuanto releí la carta, destruyéndome nuevamente. Sentí unos pasos acercarse a mi y fue entonces cuando me di cuenta que Liam estaba parado enfrente mio. Viendo como me desvanecía de a poco.

- Liam, yo lo s... - traté de disculparme por mi estado, pero el se acercó sentándose a mi lado y me abrazo. 

Necesitaba tanto un abrazo que no dude dos segundos en responderlo. 

-Lo se, lo se. Calma - repetía, acariciando mi cabello.

- ¿Com..como sabes? - suspire para tranquilizarme.

- Te traeré agua primero - exclama. Asentí y limpie mis lagrimas en el momento que el se fue. Guarde la carta en la maleta y camine hasta uno de los sofás en la sala de estar. 

Solo pude tomar un sorbo ya que las lagrimas volvieron a caer, pero esta vez pude controlarlas. Liam se posiciono a mi lado y con una mano frotaba mi espalda.

- Nunca perdí contacto con Harry, me llegaron rumores de lo que te hizo y enloquecí. Siempre fuiste una buena amiga y enterarme de eso, me partió en dos - suspira - Hace unas semanas Louis me llamo para avisarme que ambos volverían al pueblo...

- ¿Por qué me cuentas esto? - dije, esta vez frunciendo el ceño.

- Porque quiero que sepas la verdad. Bueno... a lo que estaba, cuando me enteré no sabía que pensar. Tenía miedo por ti, por como reaccionarias. La semana que nos cruzamos, ese mismo día también choque con Harry y el lucía diferente. ¿Sabes lo que me dijo?

- ¿Qué?

- Que lucharía por ti, haría lo imposible para volverte a tener a su lado. Al inicio no le creí, porque bueno... los rumores que escuche de lo que te hizo no eran de los mejores. Pero lo vi tan decidido y sincero, que no se lo negué. Anoche hablamos y el me dijo que... - le interrumpi. 

- ¿En verdad te dijo todo eso? - pregunte, con los ojos como platos. 

"Que lucharía por ti."  

- ¿Quieres saber cuanto te quiere? - Justo entonces su mano recogió mi móvil y lo posiciono en la mía. - Llámalo. 

- No creo que sea buena idea - Negué, mientras observaba el celular. 

- No lo sabrás hasta que lo hagas, ambos se necesitan y están a casi 600 kilómetros de distancia. Pero nada les impide hablarse.

Obedecí y marque su numero telefónico. Al inicio nadie respondía, lo que me hacia pensar en la tontería que estaba haciendo. Suspiré cuando la llamada se activo. 

- Noelle - Abrí la boca para decir algo pero su voz me interrumpió - ¿Liam esta ahí contigo?

- Harry - respondí - Si, esta a mi lado. El pensó que seria buena idea hablar.

- ¿Te contó todo?

- ¿Lo que hablaron hace unas semanas? - Giré mi vista en Liam para ver como el desgraciado se reía. ¿Acaso dije algo mal?

- Dile al mal parido que te cuente y luego llama de nuevo, mi amor - me colgó. 

Dejé mi móvil en la mesa enfrente nuestro y corrí mis ojos hasta los de Liam. Su rostro parecía estar aguantando una profunda carcajada y aún no entendía que estaba pasando. 

- Explícame, por favor - rogué.

- Trate de contarte, pero tu solo escuchas lo que te conviene - responde entre risas.

- Liam... ¡Me estas alterando! 

- No se por donde empezar - se acomoda a un lado. - Apenas te fuiste de Holmes, Harry fue con Louis a pedirle ayuda para recuperarte y al idiota se le ocurrió la loca idea de que viajara en auto hasta aquí. Pues claro que el otro idiota aceptó y bueno... 

- ¡¿Y... y bueno que?! - Me levanté del sofá con los ojos como platos, viendo la reacción de Liam, el cual estaba sumiso en una gran carcajada. 

- Y bueno, ya conoces a Harry. Le quedan solo 2 horas de viaje para llegar. ¡SORPRESA! - grita de emoción, abrazándome mientras yo seguía inmóvil. No podía creerlo - Se quedara solo unos días, pero algo es algo.

- ¡LIAM TE AMO, ERES EL MEJOR! - lo vuelvo a abrazar pero esta vez si estaba consciente de lo que el me decía. 

Volvería a ver a Harry.

Capaz no es tan complicado como creí, capaz no sea el fin de nada. Si no, el comienzo.