Memoria Perdida | h.s

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Espere en el marco de la puerta unos segundos tratando de encontrar a aquel imbécil. Baje un escalón... otro mas... y el ultimo. Parecía perdida espiando a mis alrededores mientras caminaba hacia un punto inexacto. 

Pero entonces lo vi. 

Justo a un costado mio, se encontraba con una mano dentro del bolsillo de su vaquero. Con la otra, en cambio, sostenía un cigarrillo. ¿Desde cuando fuma? A pesar de eso, no podía negar que se veía sumamente hermoso y que, la ebriedad me hacía querer cosas que se que odio. 

Camine mientras me tambaleaba hacía el, pero aun no se daba cuenta. En cuanto estaba detrás de el, raspe mi garganta dos veces para que sepa que estaba allí. 

- Noelle - suspiro. Su voz... la echaba de menos. Poso sus manos en mis hombros y notó que estaba titilando - ¿Tienes frió? 

Sus brazos actuaron a sus impulsos y me empujaron mas hacia el, haciendo que el mínimo espacio que existía desapareciera. 

Todo parecía ser perfecto, pero todo lo perfecto se termina.

- No puedo... - Quita sus brazos de mi envenenado cuerpo y me mira unos segundos - Ven. 

Le obedecí y como pude, lo seguí hasta un banco cerca de la casa y me senté a su lado. Aún el alcohol me controlaba. Sentía mucho frió, pero no me importaba.

- Noelle, ¿Qué pensaste cuando me viste otra vez aquí? - Pregunta algo dudoso, pasando la mano por su cabello.

- Harry.. -pose mi dedo en sus labios para que calle - solo... quiero... besarte - me acerque lo suficiente para tenerlo a centímetros de mis labios, el no se movió pero tampoco accedió. Solo se quedo algo confundido.

- De verdad no quieres besarme, no lo hagas - resopla.

- ¿Para que me buscas si no quieres besarme? - pregunte, alejándome por completo de el. 

- ¿Y tu si? - pregunto, mientras se asomaba una pequeña sonrisa en sus labios. 

- ¿Yo que? - fruncí el ceño luego de entender - Oh no, no - negué con la cabeza - Yo a ti te odio Harry Styles. 

- ¿Ah si? Que curioso... Hace minutos me querías besar - contraataca defendiéndose. 

- Vete a la mierda - No se porque lo dije, pero sentí un alivio. Me levante de mi lugar y comencé a caminar en linea recta, gire un momento para ver a Harry pero el seguía en el mismo lugar así que no frene. 

Gire mi vista nuevamente al frente y de la nada, caí al pasto seco. Quería pararme, pero no podía. No tenía fuerzas.

Recuerdo que una voz me decía que me mantuviese despierta, pero es que tenía tanto sueño... 

***

 Me removí varias veces en la cama, deslizando toda la sabana hacia un costado. Tenía mucho calor, aún sabiendo que estábamos en pleno invierno. No llegue a abrir los ojos que un dolor de cabeza hizo que me levantara con una mano posicionada en la frente. 

Pero justo cuando abrí los ojos, note algo raro. Había un ropero gigante con una foto de -supongo- un futbolista, no estaba mi escritorio blanco y las paredes eran azules. Esto definitivamente no era mi habitación... 

Me levante de la cama demasiado confundida y note la camiseta blanca que llevaba puesta. ¿Pero que carajos? 

Unos ruidos provenían del piso de abajo y rápidamente los seguí.

- No puede ser - susurre, pero al parecer se escucho por las esquinas. 

- Buen día, Noelle - su voz ronca atemorizaba cada parte de mi cuerpo. - De seguro no te acuerdas de nada - rió - Déjame explicarte, corazón. 

- No... No te pedí explicaciones - gire hacía las escaleras y comencé a subirlas de prisa, tras sentir los pasos de Harry por detrás mio. - ¿Así que ahora te aprovechas de mujeres ebrias? 

- No es como tu crees - se defendió - Déjame explicarte que paso anoche, por favor. 

- ¿Por que no te vas a la mierda y me lo explicas cuando vaya? - gire dándole la espalda para poder colocarme el brasier y mi vestido. Lo que menos me importo fue estar desnuda enfrente suyo, estaba demasiado enojada como para pensarlo.