Memoria Perdida | h.s

025

Harry

No podía permitir esto, ella era el amor de mi vida.

Maneje por las infinitas calles de Londres y estacione en la esquina donde ella choco. Me senté un momento y pensé, "¿Cómo es posible que arrebataras el amor que Noelle me daba?". Aún había varias personas viendo el desastre que habían causado, mis ojos observaron un pequeño cuadro blanco tirado en una esquina. Era una patente.

Me acerque a ella y supe la oportunidad que este pedazo de metal me otorgaba; Encontrar al culpable que hizo que mi pobre Noelle sufra como lo hizo y hace ahora.

Me la guarde disimuladamente, sin que nadie lo note y conduje hacia mi departamento.

Liam y su amiga Ciara me llamaron infinitas veces, pero ignore absolutamente todas. Al saber lo ocurrido, correrían hasta Londres para visitarla. Ella aun no los conoce, solo seria un problema mas para agregarle. No quiero mas problemas.

(...)

Me senté en el escritorio, con la mente en blanco pero con tantas palabras para decir. Abrí el cuaderno, sumamente decorado. Recuerdo cuando Noelle lo pinto, a ella le gustaba decorar cosas, aun cuando eran tan insignificantes. Cada objeto mío tiene algo de Noelle.

Ella no me recordaba de la misma forma que yo, pero de alguna forma iba a hacer que recuerde.

"Memories" lo titule.

Y comencé a escribir. Escribí los recuerdos mas dulces, feos, tristes y maravillosos que pase con ella. Desde que la conocí, hasta que me olvido. Sentí cada palabra como si estuviera en ese recuerdo, reviviéndolo una y otra vez.

Demonios, la extrañaba tanto. Algunas lagrimas golpeaban la hoja en donde yo contaba las anécdotas. No me importo. Todo era por ella, hasta mi tristeza. Se lo agradecía cada día.

(...)

Eran las 9 a m, mis ojos estaban cansados y mis manos hartas de escribir. Levante mi rostro del escritorio, había doblado una de las hojas con mi cabeza. Me había quedado dormido.

Me bañe lo mas rápido posible, agarre el primer conjunto que encontré entre los cajones y salí corriendo junto con el libro hacia mi carro. No debía perder tiempo.

Los pasillos parecían eternos, mas cuando estaba apurado. La enfermera solo me saludo y me aviso que pronto ella saldria del Hospital con el alta. Nada me hacia mas feliz.

Entre cautelosamente y me la encontré justo como ayer, pero esta vez se notaba mas sana.

-Buen día Noelle-susurre, mientras cerraba la puerta y me sentaba a su lado.

-Harry-su mirada se congelo.-¿Por qué me mentiste?

Fruncí el ceño.

-¿Te mentí?

-Dijiste que éramos amigos y en realidad, eres mi novio. ¿Verdad? O acaso, disfrutan mi amnesia para decirme mentiras quizá.

-Si, es verdad-baje la mirada-No te lo dije por que era mucha información para tan poco tiempo aquí. Necesitabas descansar.

-¿Qué tienes ahí?-señalo entre mis manos.

-Te hice un libro, con recuerdos nuestros. Todo esta aquí. Estuve toda la noche asi que espero que puedas recordar algo o que te guste. A mí me encanto.

-Déjame verlo.