— Hasta luego, Ángela – sonreí.
— Bye – saludo con su mano.
Salí de la habitación donde los niños ya dormían y cerré la puerta.
Caminaba por el pasillo cuando me tope con esa puerta. Aquella puerta de hospital donde se encontraba Charlotte Whithe. Diablos, la había olvidado, su historia había quedado inconclusa...
Me acerque a esta insegura y toque nerviosa.
— Adelante – hablo la persona adentro.
— ¿Charlotte?... –entré con timidez.
— ¡Oh,____!, ¡Que bien que vuelvas!
–sonrió con ternura.
— Lo lamento, Jos...
— ¿Jos? – cuestiono confundida.
— La persona más dulce de este planeta.
–sonreí mientras mis mejillas tomaban color.
— ¡Tu novio! – exclamo con una risita.
— No, aún no. – reí – Venía por el final de su historia...
— Oh claro – sonrió – ¿dónde quedamos?
— "Bajo un árbol de flores de cerezo, el le confeso algo que cambiaría su vida para siempre".
— Tienes razón, dijo que...
Y mi celular comenzó a vibrar adentro de mi bolso, ¡Maldición! ¿Porqué siempre en la parte interesante de la historia, algo lo interrumpe?
— Lo siento Charlotte, tengo una llamada. – la anciana asintió con la cabeza y me dedique a retirarme de su habitación – ¿Hola? – conteste con fastidio.
— ¡____! ¡Ven rápido, los chicos! – grito Jay con preocupación.
—¿Qué...que ocurrió? – cuestione con el ceño fruncido.
— ¡Sólo ven al Pub lo más rápido que puedas, por favor! – exclamo y se oyeron disparos.
— ¡Lo siento, Charlotte! ¡Mañana hablamos, adiós!
— Hasta mañana – respondió con una sonrisa.
Jay corto la llamada en el momento en que se oyeron los disparos. ¡Diablos! ¡Les eh dicho que no fueran a aquel horrible lugar! ¡Maldición!
Hice frenar un taxi para que me llevase a mi destino, pero respondió de mala manera, por lo cual, por orgullo, me digne a correr y para empeorar la situación, llovía. ¡Maldito sea!
— ¿____? – oí aún lado mientras corría.
— Ahora no, debo llegar rápido. – dije con lágrimas en los ojos, la preocupación de que les habría ocurrido a los chicos me asesinaban por dentro.
— Te llevare – musito y reconocí esa voz, no la había visto en días.
— ¿George? – pare en seco – ¿Pero que...?
— No es tiempo de preguntas, luego hazlas, ahora, ¡Sube! – ordeno.
Asentí con la cabeza y sin temor alguno, subí a su motocicleta. George me hizo entrega de un casco protector y me aferre a el cuando comenzó a rechinar las ruedas.
— ¿Dónde es?
— Es el pub más cercano del anfiteatro.
— Allá vamos.
George iba a una velocidad increíble, a todo lo que daba. El temor volvió a mi persona y enterré mis uñas libres de manicure en su torso.
— Romperás mi pecho – dijo con una risita.
— Jamás me han agradado las motocicletas. –confesé– Además ahora estoy preocupada por Jos y los chicos, se oyeron disparos desde la otra línea.
— Tomaremos un atajo.
Con una movida rápida, se adentró en un callejón oscuro y automáticamente cerré mis ojos, los feos recuerdos volvían a mi mente en estos minutos.
Flashback
El viento golpeaba mi rostro de una manera suave, comencé a despejar mi mente y sin notar hacia dónde iba me adentre a un callejón obscuro.
— Vaya, vaya... – susurro alguien – ¿Qué tenemos aquí? – un chico alto y vulgar salió de una sombra que ocultaba su rostro.
— ¿Qué quieres? – dije neutra para que no se notará el miedo que recorría mi ser.
— Estas buena... – dijo acercándose más, mordió su labio inferior con deseo y recorrió con su lengua todo su labio.
— Si que estas buena... – oí otra voz detrás mío.
Fin Flashback.
No _____, no. Olvida eso, ya todo quedo en el pasado, Jos te rescato de aquella vez y de muchas más. Ahora es tu turno de ayudarlo a el.
— Descuida, estaremos allí en menos treinta segundos.
— S... Si – tartamudee
— ¿Ocurre algo?
— ¿Continuamos en el callejón obscuro? – cuestione con temor.
— No, ya lo hemos dejado atrás.
— Genial – suspire.
George estaciono la motocicleta y visualizamos a un gran cantidad de personas retirándose del pub, incluso al gorila de la entrada.
— Rápido – dije con preocupación, no veía salir a Jay, Freddy, Alonso o Jos, ninguno de los cuatro.
— Malditos mal nacidos – susurró entre dientes un horrible hombre de cabellos obscuros, a su lado iban dos hombres más con grandes músculos en sus extremidades, ayudándolo a ponerse de pie – Pagarán por esta mierda.
— Toma mi mano ____. – ordeño George – Entraremos rápido, ¿Vale?, ahora tranquilízate, todo esta bien...
— ¡¿Cómo diablos quieres que este tranquila!? ¡No los veo salir por ningún lado, Shelley! – grite.
— ¡Entremos maldición, antes de que este alborotó sea más grande!
Tome su mano y comenzamos a correr entre la multitud. Motociclistas, drogados, alcohólicos, putas, había de toda clase de personas. Fu difícil entrar,pero finalmente lo hicimos.
Entre todos esos desconocidos no logre reconocer a mis amigos y nerviosa, comí mis uñas.
— Arriba. – aviso George
Visualizamos una escalera en Caracol que dirigía a la segunda planta y con gran velocidad la subimos. George empujó una de las puertas rotas y los encontramos, allí estaban los cuatro, sobre el suelo con el atuendo rasgado.
— ¡¿Qué diablos sucede con ustedes?!
– grite enfada – ¡Jos, prometiste no venir a este horrible lugar! – voltearon a observarme y su expresión facial cambio a una de sorpresa.
— ¿Qué... que haces aquí?... – tartamudeo Alonso.
— Jay, marco mi número – todos voltearon a verle.
— Entre en pánico, lo siento – extendió sus manos hacia arriba – Pero después de todo, fue muy divertido. – río y los demás le acompañaron en esto.
— ¡¿Porqué mierda ríen?! ¡Observen sus atuendos, rasgados y con... sangre!, dios... – apreté aún más lento la mano de George, quien aún permanecía en silencio – Jos, yo no se sí confiar más en ti. – musite con la mirada fija a el, y sin darme cuenta, las lágrimas ya caían por mi mejillas.
— ____... – murmuro el.
— ¡Demonios! – exclame – ¿ Alonso, estas bien? – cuestione corriendo hacia el con una mueca de preocupación, tenía un gran corte en su ante brazo.
— Si. – contesto sin darle importancia al tema, rápidamente me aleje.
— George... llévame a casa ... – musite en un suspiro de decepción.
Hola chicas ¿como están?, espero y genial
¿Qué tal les parece la novela? 😏.
Perdón por no haberles subido capítulo pero lo pude 😔.
Muchas gracias a las chicas que votan, comentan y comparten la novela.
Es muy lindo de su parte que apoyen esta novela.
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