Confusing Love

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- Parrish, ¿podrías por favor venir a mi oficina un momento? - exclamo en voz alta el sheriff al tiempo que el mencionado se levantaba de su escritorio y se dirigía a su oficina - Cierra la puerta por favor - este obedeció y tomo asiento frente a él.

- Dígame - menciono tranquilamente.

- Bueno, ya son más de las 9:00, creo que debemos dejar el formalismo de lado ¿no crees?

Siempre le había agradado su jefe. Era una persona justa y legal y siempre le había inspirado a seguir al pie las leyes en el pueblo, pero solo había algo que él no podía seguir ocultando más, y era que de cierta manera le disgustaba, la insistencia de salir a cenar.

- Quisiera que me acompañaras a cenar a mi casa - exclamo y este no pudo evitar abrir los ojos enormemente.

Siempre había sido lo mismo, lo invitaba a cenar y él se excusaba con cualquier cosa.

- No puedo, mi perro se enfermó y lo llevare a la veterinaria.

- Lo siento, es que mi madre está enferma y la llevare al médico.

- De verdad lo lamento, pero es que me enferme un poco y me recostare temprano.

Pero esta vez era distinto, lo había invitado a SU casa y eso significaba que cierto castaño estaría ahí.

- Como siempre te niegas a salir conmigo pues que mejor que en un lugar más cómodo ¿no crees?, además, Scott estará con nosotros y Stiles preparara lasaña.

Ese nombre, era solo la droga para que su corazón latiera frenéticamente.

- Claro, esta vez estoy libre - sin pensarlo acepto lo que ocasiono la alegría del mayor.

- De acuerdo, no perdamos el tiempo - exclamo entusiasmado mientras tomaba sus cosas.

...

Permanecía sentado al borde de su cama, mirando el suelo limpio y recién pulido, había olvidado cuantas veces lo había hecho por el simple hecho de pensar en compartir una cena con su mejor amigo.

No era como que jamás lo hubiera hecho, pero ahora era distinto, se había dado cuenta que estaba enamorándose de él y eso no era algo bueno.

- Solo es una cena Scott - se recrimino a si mismo mientras se ponía de pie y se miraba al espejo.

Jamás se había comportado de esa manera, incluso jamás se miraba al espejo para ver si se miraba bien, solo tomaba lo que encontraba en su closet y se marchaba a su cita, pero esto no era una cita, era solo una cena como tantas antes había tenido con su MEJOR AMIGO.

Tomo su billetera y cerró la puerta de su habitación para después caminar por la calle hacia la casa de aquel castaño que se encontraba preparando la cena.

...

El timbre sonó y el castaño dejo la charola que había sacado del horno para poder abrir la puerta.

Cuando esta se abrió observo a un chico de cabello castaño y ojos verdes recargado en el marco de la puerta.

- Hola Stiles - le sonrió y este lo miro curioso.

- ¿Qué haces aquí Jackson?

- Bueno, pasaba por aquí y quise ver como estaba mi amigo.

- Tú y yo no somos amigos - menciono.

- Bueno, eso tú lo diste por hecho.

- Jackson, quisiste matarme, a mí y a la manada.

- Pequeñeces, no pienses en el pasado.