Juego del Destino #PSF2017

Capitulo 65: Rara amistad.

Estaba nerviosa, asustada, aun con los ojos cerrados y sus manos tapando su rostro con el temor de que Samuel fuera a reprocharle por haberse embarazado, o peor aún, que pensara que no es su hijo y no quiera aceptar su paternidad, sabía que no era buen momento para salir embarazada pero no fue algo planeado, simplemente se dio.

Samuel: Un... ¿hijo? –lo escucho decir, pensó que había sido producto de su imaginación, pero sintió cuando el la abrazo y se lo dijo nuevamente cerca de su oreja- un hijo... vamos a tener un hijo, mi amor, gracias.

Ahora los dos estaban abrazados, la noticia del embarazo de Andrea había llenado a Samuel de alegría, no esperaba tener un hijo tan pronto y en las circunstancias que estaba viviendo últimamente, pero siempre quiso formar una familia, y saber que ahora la mujer que ama tendrá un hijo de él, era más de lo que esperaba, pero estaba contento.

Andrea: Lo siento Samuel, en serio yo no quería... no lo planeamos.

Samuel: Esto es lo mejor que nos pudo pasar Andrea, tendremos un hijo, un bebe –se arrodillo para besar su vientre mientras Andrea lo miraba aun mas sorprendida- esta es nuestra señal Andrea, debemos estar juntos, no solo porque nos amamos, sino para darle una familia a este bebe... se que me porte mal contigo, ambos nos distanciamos, pero aquí lo cierto es que te quiero...

Andrea: Yo también te quiero –le respondió y el dibujo una sonrisa al tiempo que se acercaba a besarla, pero ella retrocedió para evitar que lo hiciera- pero esto es justo lo que nos hace daño, mis inseguridades, soy demasiado cobarde Samuel, tengo muchos temores y no puedo entregarme a ti como lo necesitas, tú necesitas una mujer que este contigo, que te apoye y no alguien como yo que lo único que sabe es darte dolores de cabeza.

Samuel: A pesar de todo yo te amo, quiero estar contigo para protegerte, para ayudarte a superar tus miedos, para cuidar juntos de nuestro bebe –dijo acercándose nuevamente- yo se que me quieres, acabas de decirlo, si me dejas podemos estar juntos...

Andrea: ¿Y Martina? Ella te necesita.

Samuel: Y estaré ahí para ella, para las dos, y para este bebe también... Andrea perdón por todas las cosas que dije, estaba enojado, pero en verdad no lo pienso, eres una mujer increíble y agradezco todo lo que has hecho por mí y por Martina, perdóname...

Andrea: ¿También por haberte besado con Rebecca? –pregunto alzando una ceja y Samuel la miro tensándose- si, te vi hace un rato con ella, se supone que los amigos no se besan, porque no creo que eso haya sido un error...

Samuel: ¡Andrea, si fue un error, sabes que no la amo!

Andrea: Pero me lastimo mucho, esto nos hace daño a los dos, por eso no es el momento de nosotros, no mientras nos siga lastimando de esta manera.

Samuel: Lo siento mucho Andrea yo... entiendo lo que dices, y tienes razón, a veces soy muy impulsivo y digo las cosas sin pensar, pero quiero que sepas que nunca dejare de estar para ti, luchare por ti aunque me tome la vida entera, no te dejare ir y menos ahora.

Andrea: Esta bien –sus palabras lograron emocionarla, por unos minutos encontró a ese Samuel que la había enamorado, pero de pronto empezó a sentirse mareada.

Samuel: Andrea, ¿estás bien? –dijo mientras la sujetaba y ella asintió incorporándose nuevamente.

Andrea: Solo... no he comido.

Samuel: ¿Estando embarazada te saltas la comida? Eso no está bien. Ven, te llevare a comer algo, o mejor le diré a Graciela que te prepare algo delicioso, ya verás que te encantara –dijo mientras los dos caminaban hacia su auto.

Martina: ¡Suéltame bruja! –grito mientras la pisaba logrando que Rebecca la soltara un poco, pero aun así no pudo escapar por que antes la sujeto de nuevo.

Rebecca: No te me vas a ir, primero me pagaras uno por uno cada insulto, y cada una de tus bromas pesadas –dijo agarrándola más fuerte mientras la llevaba a uno de los establos, y con una cuerda empezó a amarrarla.

Martina: ¿Qué.. Piensas hacerme? –pregunto llorando, estaba asustada, y es que Rebecca estaba fuera de si.

Mientras tanto Laura y David terminaron de pasarla muy bien en su día de playa, decidieron regresar al departamento de David, compraron algunas cosas para comer.

David: Me encanta que vengas conmigo a mi departamento –dijo cuando entraban y clocaban las bolsas sobre la mesa- deberías venir más seguido.

Laura: Pero si vengo muy seguido –dijo riendo y él se acerco para besarla en sus labios.

David: Entonces quiero que me visites todos los días, como quisiera vivir contigo, y despertar así juntitos, abrazaditos...

Laura: Uy pero si ya hablamos de eso, no puedo mudarme contigo hasta que nos casemos, tengo que terminar la escuela, cumplir mis 18 años.

David: Si, ya lo sé, quieres hacer las cosas bien, y eso me gusta amor, me encanta eso de ti.

Laura: ¿Solo eso? –pregunto sonriendo.

David: Todo, me encanta todo de ti –dijo antes de besa su labios, así duraron por unos minutos hasta que ambos se separaron- preparare unas botanas, ¿quieres refresco?

Laura: Si, por favor -dijo antes que este fuera a la cocina y Laura saco su celular para revisarlo en el momento escucho un sonido del celular de David de que había llegado un mensaje, en el momento que lo tomo para llevárselo, accidentalmente se abrió viendo la foto de una mujer ¿desnuda?- mi amor, aquí están las botanas –dijo trayendo una bandeja con botanas y refrescos- ¿pasa algo?

Laura: ¿Se puede saber quién es esta mujer y porque te manda una foto desnuda? –pregunto enojada mientras le enseñaba la foto.

Samuel llevo a Andrea a la hacienda, le aviso a Graciela que trajera algo de comer y no tardo en hacerlo, los dos estaban en la mesa, sin hablar mucho, aun la situación era incomoda para ambos.

Samuel: Me gustaría que fueras con el doctor, y te atendieras el embarazo, necesitaras algunas vitaminas.

Andrea: Esta bien, iré mañana mismo –dijo forzando una sonrisa y en ese momento entraron Martina y Rebecca llamando la atención de ambos, era extraño verlas juntas sin que estén peleando.

Samuel: Martina...

Martina: Samuel –dijo y corrió a abrazarlo.

Rebecca: Veo que ya arreglaron sus diferencias, nosotras también lo hicimos, ¿verdad Martina? –dijo y esta asintió temerosa.

Samuel: ¿En serio? –Andrea la miraba sin comprender, pero no muy convencida de que sea cierto, Martina no era de llevarse bien con alguien como Rebecca.

Rebecca: Por supuesto que sí, hasta nos hicimos amigas, es que tu hermanita es muy simpática, ahora soy como su hermana mayor.

Samuel: No se, es que es raro, ¿ustedes amigas?

Martina: Iré a mi habitación –dijo mirando a Samuel, para después mirar a Rebecca y por último a Andrea antes de irse.

Rebecca: Yo también me tengo que ir, alegra verte por aquí Andrea, adiós Samuel –dijo antes de irse.

Andrea: Esto es muy extraño, y desde ahora te digo que no me gusta nada.

Samuel: Bueno, si es muy extraño ¿de dónde les salió esa... rara amistad?

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Rara amistad la que tienen ahora Rebecca y Martina, pero bueno...

perdonen el haber tardado tanto, ando muy ocupada y trato de sacar tiempo para escribir, pero cuando lo hago me gusta estar relajada. Espero les haya gustado el capitulo. Hasta la próxima.