Capitulo 73: Secuestradas.

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Habían pasado horas, todos estaban preocupados buscando a Martina, Laura tampoco aparecía, David la había buscado por todos los lugares donde pudiera entrar pero no había tenido ningún resultado. Samuel mando a todos los trabajadores a buscar a Martina, pero ya se estaba haciendo de noche y tampoco la encontraban.

Andrea: ¿La encontraron? –pregunto cuando vio entrar a Samuel y este negó- Laura tampoco ha aparecido, están empezando a preocuparme...

Samuel: Nada de eso, Andrea. Ya verás que la encontraremos pronto –dijo acercándose a abrasarla para confortarla, pero lo cierto es que el también estaba desesperado por saber donde estaba su hermana.

Rebecca: ¡Cállate! ¡Niña malcriada! –grito ya desesperada para que Martina se callara.

Martina: Quiero a mi hermano Samuel –lloro.

Rebecca: Pero el no te quiere a ti, o te recuerdo que quiere mandarte a un internado –dijo y Martina la observo cuando fue a abrir la puerta.

Brenda: Como se están portando las, princesitas –dijo en tono burlón mientras entraba fijando su vista hacia Laura.

Rebecca: Te dije que no es buena idea tenerlas a las dos en un mismo lugar.

Brenda: ¿Qué querías? ¿Qué la llevara a casa de su padre? Sabes que no puedo. Nadie sospecharía de ti, así que es mejor que las tengas aquí, solo por unos días, ya estoy buscando un lugar donde podamos tenerlas mejor.

Martina: Par de víboras, ni mi hermano, ni mi primo les harán caso nunca después de lo que están haciendo –dijo y se cayó cuando Laura le hizo una mueca.

Rebecca: Eso está por verse, niñita.

Brenda: Tengo que hablar algo contigo, ¿me acompañas? –dijo mirando a Rebeca y ambas salieron.

Las dos estaban en un cuarto muy obscuro, cuando trajeron a Laura ella estaba sedada, tampoco se dio cuenta cuando trajeron a Martina, pero por lo que había escuchado, esas dos estaban dispuestas a todo.

Laura: Martina –susurro para que solo ella escuchara, sabía que debía tener mucha precaución- debes guardar silencio, no le respondas a ese par...

Martina: Quiero irme de aquí, quiero estar con Samuel, y Andrea –dijo llorando.

Laura: Shh tranquila... se que no nos hemos llevado muy bien y que no somos las mejores amigas, pero no dejare que te hagan nada. Eso si, tienes que colaborar, ¿esta bien? –ella asintió- muy bien, lo primero que tienes que hacer...

Rebecca: Ya fue suficiente –dijo entrando nuevamente al cuarto azotando la puerta, Laura se incorporo de inmediato y Martina... estaba hecha un manojo de nervios- es hora de cenar, no queremos que la niña se enferme, ¿o sí? –dijo riendo mientras tiraba una bolsa plástica, y Martina hizo un gesto de desagrado al ver lo que traía.

Martina: No comeré eso, se ve asqueroso...

Rebecca: Princesita, no estás en tu palacio donde tienes sirvientas a tu disposición y puedes comer lo que quieras, aquí tendrás que comer lo que yo te traiga –dijo antes de volver a salir.

Laura: Martina, tienes que confiar en mí para que salgamos –dijo viéndola llorar, tenía que lograr que colaborara con ella, sino estaban perdidas.

Al día siguiente todos seguían muy angustiados, David tuvo que llevar a Margarita a emergencia ya que tenia la presión alterada, Andrea también estaba muy preocupada, y en ningún momento Samuel se separo de ella, solo cuando llamo a las autoridades para reportar la perdida de Martina y el posible secuestro de Laura, su carro lo habían encontrado cerca del rancho, y era más que obvio que la habían forzado a bajar del auto, ahora ya no tenían dudas que fuera un secuestro, solo les faltaba averiguar quién quiere hacerle daño.

David: Samuel –dijo entrando a la habitación donde Samuel estaba con Andrea.

Samuel: Ya reporte el caso de Laura, la policía abrirá una investigación, en una hora me llamaran para darme información del caso.

Andrea: ¿Cómo esta mi tía?

David: Lograron estabilizarla, tuve que dejarla en el hospital, al menos allá la están atendiendo, pero está muy preocupada por Laura, y yo no me puedo quedar de brazos cruzados –dijo y se dispuso a salir a buscarla hasta debajo de las piedras.

Samuel: Espera David –dijo antes que este se fuera- debemos hacer las cosas bien, actuar inteligentes, no sabemos con qué clase de delincuentes pueda estar Laura...

David: Estoy desesperado, quiero encontrarla ya, no quiero que le hagan daño Samuel, porque si es así los mataría con mis propias manos, eso tenlo por seguro.

Por fin estaba todo en silencio, Laura miro a todas partes, estaba oscuro. Martina dormía a un lado de ella, seguramente incomoda ya que el suelo estaba frio, había pensado en algo, y era hora de ejecutarlo.

Laura: Martina –susurro moviéndola despacio hasta que ella poco a poco fue despertando- ¡Shh! Vamos a escapar.

Martina se levanto como pudo, se pudo soltar fácilmente ya que las cuerdas le quedaban flojas, luego intento ayudando a Laura pero no podía soltarla. Vio una navaja oxidada, eso le serviría para soltar el nudo. Tenía mucho miedo, quería salir de ahí, si no fuera por Laura no sabía que sería de ella, le agradecía que estuviera allí.

De repente se enciende una luz, se ve por debajo de la puerta, alguien caminaba. Ambas se tensaron, e inmediatamente Martina soltó la navaja escondiéndose detrás de la puerta antes que la abrieran.

Rebecca: ¿Dónde está la enana? –pregunto gritando cuando vio que solo estaba Laura y al lado de ella, la cuerda que amarraba a Martina, pero ella no estaba- maldita, ¡se escapo!

Laura: No se iba a quedar aquí, aguantando tus maltratos –lo hacía para hacer que Martina ganara tiempo y escapara, pero esta solo se quedo detrás y rogaba para que aprovechara la oportunidad- en este momento debe estar denunciándote con las autoridades.

Rebecca: ¡Maldita, te voy a matar! –dijo empezando a ahorcarla- se quisieron burlar de mi y ahora no saldrás con vida de aquí –dijo apretándola más, la cara de Laura ya estaba tornando un rojo intenso, casi no podía respirar.

Martina estaba asustada, no sabía qué hacer, miro a su alrededor y fue cuando encontró un tubo largo, sin pensarlo más tiempo lo sostuvo con sus manos, era pesado pero tenía que lograrlo, empujo hasta que por fin el tubo se soltó cayendo encima de Rebecca que cayo después encima de Laura.

Martina: ¡Laura! –grito asustada, Rebecca había caído inconsciente, ese tubo le había pegado directamente en la cabeza, pero le asustaba más que Laura pueda haberse lastimado, no reaccionaba cuando esta la llamaba- Laura por favor, no me hagas esto –dijo llorando mientras quitaba a Rebecca de encima de Laura como podía- ¡Laura!

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Bueno, les voy a contar, estaba pensando en ya escribir los capítulos que faltan para que se termine la historia, y luego publicarlos todos el mismo día, pero he visto que algunas de ustedes quería saber que había pasado con Laura y Martina, así que decidí subirles este capítulo. También me gustaría saber si están de acuerdo en que suba todos los capítulos una ves terminada la historia, o si prefieren que actualice cuando tenga listo un capitulo, como lo he hecho siempre. Muchas gracias por leer.

Juego del Destino #PSF2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora