Juego del Destino #PSF2017

Capitulo 57: Escapada.

Sin saber que responder, David rascaba su cabeza mientras analizada como pudo hacerse esos rasguños, hasta que recordó la visita de Brenda en su habitación, debió haber sido en el momento que se le lanzo encima, pero como le explicaría esto a Laura.

Laura: Estoy esperando –dijo cruzada de brazos, ya se estaba comenzando a impacientar con su silencio.

David: Eh... Laura.

Laura: No pensé que te cansarías tan rápido cuando te pedí tiempo, pero ya veo que buscaste a otra que pueda complacerte como yo no, ¿verdad? –dijo y el la miro extrañado- ya veo que estoy perdiendo mi tiempo detrás de ti –se dio la vuelta para irse, se sentía indignada con David, pero cuando estuvo a punto de salir este la detuvo por el brazo.

David: Espera, ¿Por qué te vas? No me has dejado explicarte...

Laura: No hace falta que digas nada –dijo enojada y se fue dejando a David sorprendido y confundido.

Andrea y Samuel se tomaron el día para pasear por el rancho, se detuvieron para ver como los vaqueros entrenaban con los caballos, la hacienda contaba con excelentes jinetes y los caballos estaban en plena forma.

Samuel: Me gustaría que saliéramos... no sé, a un restaurante a cenar o donde quieras –dijo mientras le sostenía la mano y ella lo miro no muy convencida.

Andrea: Preferiría que nos quedáramos aquí... no tengo muchas ganas de salir, además así me ayudas a estudiar, tengo que presentar un examen muy difícil para mañana.

Samuel: Uy, aparte de novio también profesor particular, me gusta la idea –dijo sonriendo- entonces nos quedamos estudiando y tal vez después te secuestre en mi habitación para repetir lo de anoche –susurro cerca de su oído y ella se sonrojo mirando a todos lados.

Andrea: ¡Samuel, aquí están tus empleados! Se mas discreto...

Samuel: No te preocupes amor, no me escucharon, pero si me hace falta un besito de tus labios, estoy empezando a desfallecer –dijo fingiendo que le faltaba el aire y ella comenzó a reír.

Andrea: No seas payaso, te daré muchos besitos para que nunca te falte el aire –dijo y comenzaron a besarse.

En la noche, Laura no quiso bajar a cenar, no quería encontrarse con Brenda y tampoco con David, el había intentado hablar con ella pero era demasiado orgullosa para escucharlo, desvió todas sus llamadas y no le abrió la puerta cuando el estaba del otro lado suplicando que le escuchara. Recién había salido de la ducha, aun cubierta con el albornoz empezó a aplicarse la loción y su crema por todo su cuerpo, pero un ruido en su ventana llamo su atención.

Laura: ¡David! –grito sorprendida cuando lo vio entando por la ventana, de alguna manera se las habrá ingeniado, porque subir por ahí estaba algo complicado.

David: Necesito hablar contigo, y como no me contestabas tenía que buscar alguna manera...

Laura: Estas loco, pudiste caerte, lastimarte o algo peor.

David: No importa, ahora lo que quiero es que me escuches, Laura las cosas no son como parecen, yo no me he acostado con nadie, no te he engañado...

Laura: ¿Ah sí? ¿Y esos rasguños de que son?

David: Te contare, pero no quiero que pegues un grito en el cielo, al menos espera a que termina, ¿va? –dijo y ella asintió. Empezó a contarle todo lo que había pasado, y lo que Brenda le había dicho, y por supuesto que Laura no lo tomo bien.

Laura: ¡Pero que se cree esa mujer! Piensa engañar a mi padre con... contigo!

David: Pero yo no acepte...

Laura: Corrección, no has aceptado, porque ella no te está dando opciones, si no aceptas, será capaz de decirle a mi padre de nuestra relación –dijo y el la miro algo confundido- ¿Qué vamos a hacer?

David: Pues, decirle a tu padre lo nuestro y asunto arreglado...

Laura: No es así de fácil, David no conoces a mi padre y el es capaz de matarte si se entera.

David: Pues no me importa, iré a hablar con el y tendrá que escucharme –dijo empezando a caminar hacia la puerta.

Laura: No por favor, no vayas...

David: Y que quieres, ¿qué me acueste con Brenda para que ella no diga nada?

Laura: No, creo que lo mejor es... que te vayas.

David: ¿No estás hablando enserio?

Laura: Es lo mejor, así ella no tendrá como chantajearte, será lo mejor David...

David: Esta bien, si eso es lo que quieres me iré esta misma noche –dijo sintiéndose enojado y se fue antes que ella pudiera decirle algo más.

Samuel ayudaba a Andrea con sus estudios, pasaron un buen rato antes de ir a cenar, era tan extraño sin la presencia de Martina en la mesa, pero por otro lado les daba mas intimidad, además que podían colocar bebida en la mesa.

Samuel: No sé, pero me está empezando a gustar eso de que Martina este de viaje –dijo y Andrea empezó a reír.

Andrea: No seas malo, ya la extraño, quiero que regrese.

Samuel: Si yo también... ¿te parece si cuando regrese organizamos un viaje para el acuario? Una vez me comento que le gustaría ir, pero no tenía tiempo en ese entonces y se me olvido.

Andrea: Me parece bien, a Martina le gustan mucho los animales, creo que deberías considerar eso de comprarle una mascota.

Samuel: ¿Para qué? con tantos animales que hay en el rancho, solo lo descuidaría así que mejor cuando este mas grande.

Andrea: Exageras con ella, al menos dale la oportunidad de demostrarte que puede cuidar de un animalito.

Samuel: Te prometo que lo pensare, ahora porque mejor no hablamos de nosotros, sabes lo que quiero, ¿verdad?

Andrea: Samuel, aun no sé si quiero... todavía es muy pronto como para... vivir juntos.

Samuel: Piénsalo si? Es que quiero tenerte más cerca, te prometo que tendrías tu propia habitación, aunque no me enojaría si quisieras dormir conmigo.

Andrea: Bueno, al menos esperare a que regrese Laura, y luego te digo, ¿está bien?

Samuel: Como quieras, pero hoy te quedas de nuevo, ¿sí?

Andrea: Eso si que no, hoy me regreso con mi tía, mañana tengo examen y necesito descansar, y si de algo estoy segura es que no lo conseguiría contigo –dijo y el sonrió. Ambos terminaron de cenar para después el llevarla a su casa.

Samuel: ¿Nos vemos mañana?

Andrea: Hasta mañana –dijo besando sus labios y después salió del auto, Samuel se quedo mirándola hasta que ella entro a la casa.

David preparo sus cosas y las llevo hasta el auto, pensaba irse esa misma noche de ahí, le dolía el hecho que la misma Laura se lo haya pedido, pero no podía aguantar un segundo más. Estaba a punto de entrar al coche cuando ella lo llamo por detrás y el se volteo para verla, viendo que ella traía una maleta.

David: ¿Qué haces con esa maleta?

Laura: Es que... pienso irme contigo David –dijo y este se quedo perplejo al escucharla.

David: ¿Estas... segura?

Laura: Si, David, quiero irme contigo, le deje una carta a mi papa diciéndole que me tuve que regresar a casa contigo, el se encargara de llamar a mi mama y listo, pero no quiero quedarme aquí, por favor llévame...

David: Esta bien –dijo y se acerco para coger su maleta, después la miro a los ojos antes de acercarse a besarla- te amo Laura.

Laura: Yo también, David –dijo sujetándole la mano y los dos entraron al auto para luego el conducir alejándose de la casa del padre de Laura.

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Uff una aventura estos dos, Laura y David se fueron juntos.

Aquí les dejo el capitulo, espero les haya gustado. Muchas gracias por leer.