Juego del Destino #PSF2017

Capitulo 45: No te olvides de mi.

Atravesaron la puerta principal del hospital, preguntando a las enfermeras hasta que llegaron a la habitación donde estaba Agustín con Martina, ella postrada en una cama, afortunadamente ''despierta'', tanto Andrea como Samuel se lanzaron para abrazar a Martina, sentándose en cada costado, abrazándola y besando su cabeza.

Agustín: Bueno... si me permiten –dijo llamando la atención de ambos que no le habían prestado atención.

Samuel: ¿Cómo esta mi hermana? –pregunto mirándolo mientras Andrea continuaba abrazando a Martina.

Agustín: El golpe que recibió en la cabeza fue algo superficial, pero sinceramente lo que me preocupa es el estado emocional de Martina –dijo y tanto Andrea como Samuel lo miraron frunciendo el ceño.

Andrea: ¿Qué es lo que pasa con Martina?

Agustín: Desde que despertó no ha dicho una sola palabra –los dos miraron a Martina con preocupación, que en efecto no decía nada y se mantenía mirando hacia un punto fijo.

Samuel: Esto no puede estar pasando –dijo tomando la cara de Martina haciendo que ella lo mirara, y el miedo se apodero de él cuando esta no lo miro, sus ojos no se fijaban en el- ¿Qué le pasa a mi hermana? –dijo histérico levantándose de golpe.

Agustín: Puede tratarse de un trastorno, pero antes de sacar conclusiones, lo mejor será dejarla descansar esta noche, y que mañana la vea un especialista.

Andrea: ¿Puedo quedarme con ella esta noche? –pregunto dedicándole una mirada suplicante a Samuel y este asintió.

Samuel: Esta bien –se acerco para besar la frente de Martina- buenas noches chiquita, descansa.

Agustín apago las luces en el momento que el y Samuel salían dejando a Martina solo con Andrea, el cuarto solo estaba iluminado con una lámpara que estaba encima de la mesita de noche, y Andrea empezó a cantarle a la niña hasta que esta quedo dormida.

Los siguientes días fueron pasando, Laura le conto a Margarita su decisión, y ella la comprendió aunque se quedaría triste sin su hija, entendía que no estaba pasando por un buen momento, y que necesitaba aclarar muchas cosas. Martina continuaba sin hablar, solo a Andrea le decía algunas palabras, Samuel la llevaba a terapia con una psicóloga infantil, y esta le dio ciertas recomendaciones.

Andrea: ¿Entonces iremos a la playa?

Samuel: Si, la psicóloga dijo que le haría bien a Martina estar en un ambiente diferente, y que mejor lugar que la playa... además ya te había invitado, ¿no lo recuerdas? –pregunto sonriendo mientras rodeaba el escritorio hasta llegar donde Andrea, poniendo sus manos en su cintura y acercándola a él.

Andrea: ¿Cuándo nos iríamos?

Samuel: El viernes, ¿te parece? –dijo y ella asintió cerrando sus ojos para sentir cuando el besaba sus labios.

Andrea: Entonces tengo que organizar mis cosas, mañana es viernes. Por cierto, hoy se va mi prima, tengo que ir a despedirla.

Samuel: Esta bien, pero mañana pasaremos por ti bien temprano para irnos a la playa, le dire a Graciela que prepare todo lo de Martina, lleva ropa suficiente para dos días.

Andrea: Muy bien, entonces nos vemos mañana –dijo mirándolo mientras se separaba de el, el aprovecho para besar sus labios por última vez y luego la soltó para dejarla ir.

Samuel: Hasta mañana –dijo despidiéndose con la mano y una sonrisa hasta que ella cerró la puerta.

Cuando Andrea llego a la estación donde despediría a Laura, la vio despidiéndose de Margarita, ambas lloraban mientras se abrazaban, Agustín estaba a un lado, y del otro estaba Antonio sosteniendo su equipaje.

Margarita: Procura portarte bien, obedece a tu padre en todo, y si no te sientes bien allá, puedes volver cuando quieras a tu casa, ¿está bien? –dijo mientras las lagrimas corrían por sus mejillas y Laura las seco con sus dedos.

Laura: Esta bien Mama, te lo prometo, regresare tan pronto como pueda –volvió a abrazarla y luego fijo su vista en Agustín- me alegra que hayas entendido mi situación.

Agustín: Y a mí que me dejaras quedar como tu amigo –se acerco a abrazarla con una sonrisa- te escribiré –después se acerco donde estaba Antonio.

Laura: Gracias por todo Antonio, eres un gran amigo.

Antonio: Siempre, en las buenas y en las malas –dijo para después besar su cabeza y luego la abrazo, entonces se percataron de la presencia de Andrea.

Andrea: Cuídate por ahí, que no tengamos que ir a buscarte –bromeo al instante que Laura le dio una palmada en el hombro y se abrazaron.

Laura: Cuida de mi madre, y no le des tantas vueltas a lo que hablamos, se feliz –le sugirió guiñándole un ojo y Andrea sonrió.

Justo en el momento que iba a coger su maleta, su mirada se encontró con la de el, estaba allí, la miraba mientras se acercaba con una cajita en las manos. Todos miraron cuando David se acerco, el solo la miraba a ella quien se quedo incapaz de moverse.

David: Supe que te ibas y... espero no te molestes que haya venido a entregarte esto –dijo extendiéndole la cajita para que ella pudiera cogerla, después de pensarlo unos segundos la sujeto, sintiendo el tacto de sus manos, sus dedos hicieron contacto.

Laura: No tenias que molestarte –dijo mirando la pequeña cajita que le había entregado, tenía un moño rojo envuelto y era de color amarilla.

David: Espero que te guste –sintió el deseo de abrazarla, pero se contuvo cuando escucho que hacían el primer llamado.

Margarita: Hija, el tren está a punto de salir –le puso una mano en su hombro y ella la miro sin ninguna expresión en su rostro, pero la conocía tan bien y sabia que tenia unas ganas inmensas de llorar.

Laura sostuvo su maleta al escuchar el segundo llamado, todos se despidieron de ella por última vez, menos David que solo la observo hasta que ella entro en el tren, y encontró su mirada una vez se dio la vuelta para mirarlo por última vez, luego el tren cerró sus puertas, y partió.

''Los extrañare a todos'' dijo entre sus labios cuando tomo asiento en la ventana haciendo un ademan con las manos, viendo a cada uno de los que estaban allí, la mirada de su madre que estaban llenos de lagrimas, la de Andrea que le sonreía, sabía que la apoyaba, y se sentía bien con eso, después miro a sus amigos, Agustín y Antonio, hasta que finalmente lo vio por última vez antes que el tren se pusiera en marcha. Fijo su vista en la pequeña cajita que le había entregado y se dedico a abrirla, encontrando dentro de ella un pequeño medallón, podía abrirlo y se encontró con una foto de David, luego miro una pequeña nota que decía ''para que no te olvides de mi, como yo tampoco me olvidare de ti, te quiere, David''.

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Hola, aquí está el capitulo, pensé que no llegaría a actualizar, pero me esforcé por ustedes. Sé que prometí dos para hoy, pero en verdad no podre, estaré ocupada con mi otra historia ''Ciego Amor''.

Espero les haya gustado este capítulo. Me gustaría saber si les está gustando la historia, si hay algo que quieren que cambie, o si tienen alguna sugerencia de alguna escena, los próximos capítulos les gustara, a las que son fans de Andrea y Samuel, pondré mi imaginación a volar con esta pareja. Hasta la próxima.

J�/����Z