Capitulo 74: Lo va a pagar.

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Tanto Samuel como David se juntaron con el detective que estaba llevando el caso de Laura, mientras Andrea se quedo con Graciela y Margarita que tenían los nervios de punta con toda esta situación, ella quería ir con Samuel y no quedarse con los brazos cruzados, pero él no se lo permitió por su estado. Ya estaba amaneciendo, pasaron toda la noche en vela esperando respuesta, pero ellos llegaron al amanecer, y no tenían nada todavía.

Andrea: No puede ser, ya han pasado casi 24 horas y no aparecen, me estoy comenzando a preocupar.

Samuel: Solo vine a comer algo, y a ver como estabas –dijo y se acerco a depositar un beso en los labios- ahora con la luz del día será más fácil seguir las pistas, y tu, quiero que estés tranquila, ya verás que pronto la encontraremos.

Graciela: Señor –dijo acercándose a ella algo agitada, traía un teléfono inalámbrico en la mano- es del hospital, quieren hablar con usted, y dicen que es urgente –tanto a Samuel como a Andrea se les reflejo el miedo en el rostro, imaginándose lo peor, rápidamente agarro el teléfono.

Samuel: ¿Bueno? –contesto, aun con un nudo en la garganta, y se detuvo a escuchar lo que le decían.

Andrea: ¿Para qué te llamaban? ¿Es algo... relacionado con Martina o con Laura? –pregunto asustada cuando termino de hablar por teléfono.

Samuel: Al parecer tienen a Martina, tengo que ir por ella... además me dijeron que también hay dos mujeres lastimadas, todo indica que una de ellas es Laura.

David: ¿Qué estás diciendo Samuel? –pregunto cuando entraba a la habitación.

Samuel: Eso me dijo la enfermera con quien hable, ahora mismo iré a comprobar si es cierto...

Andrea: Yo te acompaño Samuel, y no acepto un no por respuesta, de todos modos iré –advirtió muy decidida.

Samuel: Esta bien, vamos –dijo y los tres se fueron juntos.

Al llegar al hospital, Samuel pregunto por la enfermera con quien había hablado por teléfono, y una de ellas los condujo hacia donde estaba. Al abrir la puerta vieron a una mujer que hablaba con una niña que estaba de espaldas, al cerrar la puerta miraron hacia donde estaban las dos al mismo tiempo, y ellos suspiraron aliviados, efectivamente se trataba de Martina.

Martina: Samuel –dijo y se dirigió corriendo hacia donde estaba, Samuel abrió sus brazos para recibirla y la abrazo fuertemente, sentía como si su alma regresara al cuerpo después del susto que había vivido desde su desaparición.

Samuel: Martina, ¿Dónde estabas? Nos tenias a todos preocupados –dijo mirando su carita.

Martina: Lo siento Samuel, pero esa mujer me llevo a la fuerza, Rebecca no es buena persona como piensas, ella quería hacerme daño –una vez más la abrazo, esta vez en compañía de Andrea quien se sumo a aquel abrazo.

Samuel: Discúlpame Martina, tantas veces te expuse con esa mujer, y yo no te hice caso –dijo con dolor- pero prometo que la hare pagar por todo lo que te hizo, ¿está bien? –dijo tomándola por la cara y ella asintió antes que le diera un beso.

Martina: Andrea –esta vez ella fue abrazando a Andrea que estaba a un lado de Samuel- perdóname por todo lo que te hice, yo no quería hacerte daño –dijo llorando.

Andrea: No te preocupes pequeña, ya todo paso, ahora lo importante es que estés bien.

Martina: Laura se pego bien fuerte, pero yo no quería lastimarla, solo quería salvarla de Rebecca que le estaba haciendo daño...

David: ¿Qué paso con Laura?

Martina: Ella quería ayudarme a escapar pero no lo consiguió, y esa mujer quería matarla.

####: Afortunadamente están fuera de peligro, las dos –hablo la enfermera.

David: ¿Puedo ir a verla?

####: En cuanto terminen de hacerle los estudios le avisare, mientras tanto esta niña necesita comer algo, desde hace dos días no come bien y los niños deben comer mucho para crecer –dijo entregándole una paleta a Martina y esta le sonrió cuando la sostuvo.

Samuel: Entonces no se diga mas, vamos a comer Martina, ¿Qué te parece?

Martina: ¿Puedo pedir lo que quiera? –pregunto feliz.

Samuel: Si, pero el postre después de la comida.

Martina: Esta bien, vamos Andrea –dijo sosteniendo la mano de Andrea para conducirla hacia afuera.

David se quedo esperando hasta que lo dejaran pasar donde estaba Laura, mientras Andrea y Samuel acompañaron a Martina para que comiera algo, que bastante hambre tenia. A pesar que la comida no estaba tan buena, a Martina solo le interesaba comer, lo que si le gusto el pastel de chocolate que había pedido de postre.

Martina: Ahora si puedo comer lo que quiera –dijo con la boca llena.

Samuel: Martina...

Andrea: Samuel, déjala, está feliz –dijo sosteniendo su mano y este asintió sonriendo.

Martina: ¿En serio no quieren comer? No está muy bueno pero se puede comer.

Andrea: No, está bien pequeña... aunque si me das un poco de pastel te lo agradecería mucho –dijo y Martina le partió un pedazo de pastel de chocolate y se lo dio.

Samuel: Martina, en estos días, ¿no has recordado nada más?

Martina: Si, ya me acuerdo de casi de todo, creo que el miedo que sentí me ayudo –dijo pensativa para luego mirar a Andrea- por eso quiero que me perdones Andrea, yo no quería hacerte daño ni al bebe tampoco –se levanto para abrasarla.

Andrea: No tengo nada que perdonarte, en todo caso no sabias nada, y esa mujer te obligo, ya todo está bien –dijo abrazándola, Samuel las miraba con atención, era una escena muy tierna.

Martina: Ya podemos vivir como una familia, ¿verdad?

Andrea: Si, ya somos una familia –dijo sosteniendo la mano de Samuel, mirándolo sonriente.

Samuel: Muy pronto nos vamos a casar.

Martina: ¿De verdad? ¡Qué bueno! –dijo emocionada abrazándolos.

David estaba sentado en la sala de espera, una enfermera le había dicho que en pocos minutos podía ver a Laura, estaba desesperado, aunque ya sabía que estaba bien, necesitaba verla, hablar con ella, algo le decía que las cosas no terminaban ahí.

Leonel: David –dijo acercándose a él, estaba bastante preocupado- ya estoy enterado de todo, ¿Cómo esta Laura?

David: La están terminando de medicar, y me dejaran verla...

Leonel: Todo esto es mi culpa, yo debí hacerle caso cuando me lo advirtió.

David: ¿De qué está hablando? –pregunto confundido.

Leonel: Que todo este tiempo ustedes tenían razón, Brenda no es una buena mujer, ella planeo todo junto a su amiga Rebecca, las dos quisieron hacerle daño, iban a matar a mi hija, yo la escuche hablando por teléfono...

David: Hable más despacio, ¿Cómo que Brenda planeo todo esto, y quiso matar a Laura?

Leonel: Yo la escuche, pero ya es demasiado tarde, ella escapo con una fuerte cantidad de dinero que robo de mi despacho, afortunadamente logre llamar al banco a tiempo y no pudo sustraer más dinero, estaba dispuesta a dejarme en la ruina.

David: Así que Brenda, me lo imaginaba. No se preocupe señor, le doy mi palabra que esa mujer va a aparecer, y va a pagar por todo lo que les hizo a Laura y a usted.

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Bueno, hoy por fin pude actualizar, se que les debo mucho, han sido muy pacientes conmigo, de verdad, quisiera darles más, pero el tiempo es muy pequeño para mi, parciales, exámenes finales, es todo un caos, espero les haya gustado el capitulo, ya nos acercamos al gran final, no se lo pierdan. Hasta la próxima.


Juego del Destino #PSF2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora