2/7 #SuperHiperMegaMaraton
____________________________—¿Cuándo volverás a visitarnos?—ahora estaba a punto de irme al aeropuerto. Mis padres me estaban dando la despedida mientras que Zeus bloqueaba la puerta.
—En cuanto pueda.—los dos se acercaron a abrazarme mientras que a mí se me escapaban unas lágrimas.
No quiero que pase otro año sin verlos.
Aunque me agrade ser independiente, ellos aún siguen siendo mis padres y lo serán hasta lo ultimo día de vida. Ciertos días los extraño más que otros, a veces necesito verlos, una pantalla nos hace sentir más cerca, pero aun así nada se compara con verlos en persona.—¿Estás segura de que no te llevemos al aeropuerto?—tome esa desicion pues papá debe irse al trabajo en diez minutos y por mi culpa llegaría tarde. Asiento y me separo del abrazo.
—Estaré bien, los llamaré en cuanto llegue.—con un abrazo y más lágrimas por parte de todos, atravesé la puerta después de que Zeus se hizo a un lado y me dirigí al taxi que estaba esperándome fuera de casa.
—Al aeropuerto, por favor—él asiente y pone en marcha el vehículo.
Sin duda los extrañare demasiado, pero debía volver hoy. Mañana es el cumpleaños de Spencer y quiero darle una sorpresa.
Él supone que llegaré en la noche a Los Ángeles, así que no irá al aeropuerto a recibirme, todo es parte del plan.
Cuando llego al aeropuerto, él conductor me ayuda a bajar la única maleta que traje conmigo, que de hecho está casi vacía. Casi todo lo que traía eran regalos para mis padres y Zeus.
—¿Qué haces aquí?—se pone en frente de mi bloqueándome el paso. Tiene una sonrisa de oreja a oreja como si fuese de mi agrado verlo.
—¿No puedo darte la despedida de Washington?—no puedo confiar en él después de lo que casi pasa ayer.
*Flashback*
—Y... ¿Qué quieres tomar?—estábamos en frente de una cafetería en el centro comercial. Él ya había hecho su pedido, yo ya me había decidido por un cupcake de chocolate, pero faltaba mi bebida.
—¿Qué me recomiendas?—lleve mi vista hacia él, que de hecho estaba mirando la tabla de cafés.
—Tal vez un americano.—asiento y él hace el pedido por mi. Una vez con nuestros pedidos, nos sentamos en una mesa que estaba cerca de nosotros, más exactamente en una silla para cuatro esquinera, por lo que estábamos bastante cerca.
—Entonces ¿No querías participar en el concurso?—le había contado un poco de mi vida y habíamos llegado a ese punto.
—Mis padres me dijeron "No hay nada que perder"—dije remarcando las comillas con mis dedos para luego dar una mordida a mi cupcake.
—Y resultaste ganando—asenti y él tomó un poco de su capuchino.
—Al principio no me gusto mucho la idea de ser famosa, era muy pequeña y muchas personas me exigían demasiado. Juntando la presión de la escuela, era caótico. Pero logré terminar la escuela de la mejor manera—mientras que yo hablaba, él me miraba atentamente mientras comía su pedido—, logre estar en varias películas en papeles secundarios y aquí estoy.
—¿No te han dado más propuestas de trabajo?—aprovecho para dar otro bocado a mi cupcake y tomar un poco de mi americano.—Ya que en la que actuaste fue cancelada, supongo que las propuestas de trabajo abundan.
—Esho—paso el bocado y continuó.—. Eso es mentira. Las propuestas no son muy fáciles de conseguir, aveces pasan meses si trabajar en una producción, pero por mi parte me lo tomo como unas vacaciones. Y no, no he recibido más propuestas.—El viajar a Inglaterra ya está descartado.
—Pensé que a una gran actriz como tú tendría varias propuestas.—se acercó un poco, pero no le preste atención, solo tome otro poco de mi café.
—No es tan fácil como se piensa, a veces...—ahora esta demasiado cerca, su cara esta a pocos centímetros de la mía. ¿Qué se supone que debo hacer? Él pone una de sus manos en mi cuello y reacciono para tomar el café y lanzarlo a su cara. Tome mis cosas y corrí lejos de allí.
¡Él sabe que tengo novio! Además de que no siento nada por él. Era la única manera de alejarlo, si no hubiese reaccionado a tiempo no sé qué hubiera pasado, tal vez él utilizaría eso en los noticieros o distorsionaría la información.
Pero no puedo verlo otra vez, lo intentaría de nuevo y tal vez no podría impedirlo.
No puedo confiar en él.
*Fin del Flashback*
—¿A caso no tienes vergüenza?—lo empuje lejos de mi. Su presencia me es repugnante.—¡Sabes que tengo novio y aún así lo intentaste!—empezó a caminar hacia mi.—Me das asco, Logan. Jamás creí que fueras así.
—Pero así te gusto—y esa fue la gota que derramó el vaso, pero eso a él no le importó. Se acercó más a mí y me tomo de ambos brazos dejándome inmóvil.—¿No crees que podríamos intentarlo, Lauren?
—Vete a la mierda Logan—en un movimiento rápido quite sus manos de mis brazos y lleve una de mis palmas a su mejilla con la fuerza suficiente como para generar un sonido seco y que la mayoría de las personas se girarán a ver, si es que aún no lo hacían.
Tome mi maleta y me dirijo a la sala de abordar ¿En serio pensaba que echaría por la borda mi relación con Spencer para estar con alguien que apenas conozco? Si mis sentimientos hacia Spencer me fueron difíciles de reconocer, que llevaron meses para ser admitidos y al principio los creía irreales ¿Piensa que me enamorare de alguien tan fácil y rápidamente? Pues en eso se equivoca.
Lo que sorprendió fue ver su sonrisa arrogante al pensar que caería a sus pies. Jamás pensé que Logan era él tipo de hombre que piensa que puede tener a todas las mujeres a su disposición con solo su sonrisa y hablando de su profesión. Se necesita más que eso para tener a Lauren O'Connell.
El día en que me entrevistó no parecía ese tipo de personas, pero ya veo que las apariencias engañan. Me sorprende como las personas pueden aparentar una personalidad completamente diferente a la real para lograr sus objetivos pasajeros. Es más, ni siquiera estoy segura de gustarle en verdad a Logan, puede que solo me halla buscado por placer, para añadir una chica más a su lista o simplemente para pasar el tiempo.
—¡Lauren!—y esa era Abby. Si Spencer no sabia de mi llegada, de seguro mi amiga si lo sabría—¿Qué tal tu viaje?
—Debo contarte muchas cosas.
—Estoy aquí para escuchar.
***
—Iré a ver a Spencer—ya le había hablado de todo lo que había pasado en Washington, incluido Logan. Ella apoyo mis acciones y cada una de mis palabras hacia él.
—Te espero aquí.—baje de su auto sin sacar la maleta aún. Solo tengo su regalo de cumpleaños en mis manos, no puedo esperar hasta mañana para dárselo.
La puerta está entreabierta y la abro sin dudar, de inmediato mis manos pierden fuerza y sueltan el perfume gracias a lo que estoy viendo.
Esto no puede ser cierto.
Esto no puede ser real.____________________________
No haré Spoilers, créanme esto me duele más a mí que a ustedes.20/04/2017
ESTÁS LEYENDO
¡Corte! | ✔
Teen FictionLauren, actriz por profesión y pasión, nunca ha sido protagonista en ningún tipo de producción en la que ha sido contratada. Desde que inició su carrera ha querido obtener ese papel, pero no se le ha dado hasta ahora. Hoy a sus 23 años de edad, esta...