Capítulo 26.
Hacer el amor va mas allá de estar juntos en una misma cama, desnudos, besándose y sintiendo el placer de aquel instante.
Inés y Victoriano estaban acostados en la cama abrazado uno del otro.
V: Hay mi morenita, eres genial... magnifica.- le da una nalgada
I: No Victoriano no hagas eso.- le pega en la mano riéndose
V: Por qué no si son mías.- divertido
I: No son tuyas, son mías.- regañándolo
V: Bueno te las presto.- le da un beso el los labios
I: Victoriano que horas son?.- se sienta
V: Mmm.. es temprano
I: Dios mío ya pasa de media noche..
V: Shh, no pasa nada..
I: Claro que si pasa, ya hay que dormir..
V: Me parece perfecto.- se acomoda en la cama
I: No Victoriano jajaja, que gracioso.- se ríe a carcajada
V: No le encuentro la gracia.- serio
I: No puedes dormir aquí amor..ya vete a tu habitación..
V: No sabes como me gustaría dormir a tú lado.
I: A mí también mi vida, pero por el momento no podemos, no puedes, tu esposa esta embarazada y si ve que no duermes en la habitación va a hacer un coraje y eso es malo para el bebé, tu hijo.
Victoriano se sorprendió de la preocupación de Inés sobre Deborah o mejor dicho sobre el bebé que Deborah traía en su vientre.
V: Te amo Inés, eres una mujer sorprendente, gracias por preocuparte por Deborah y por..
I: (lo interrumpe) Por Deborah no me preocupo por que ella no te ama sólo esta contigo por interés, me preocupo por tu hijo que yo se que lo deseas con ansias, que es tu felicidad, la cual yo no pude darte..
V: Tú me haz dado la mayor felicidad que se puede tener y es enseñarme lo que es el verdadero amor, el amar.- la besa en la comisura de los labios.
Inés abraza muy fuerte a Victoriano con pequeñas lágrimas en sus ojos.