Capítulo 3.
E: Buenos días Amaa. Entra y le da un beso en la mejilla.
I: ¡Hijo.. me asustaste por qué no me respondías!.
E: ¿Asustarla, por qué usted se asustaría Amaa?
I: Olvidalo mijo, cosas mías..
Nerviosa.
E: ¿Se siente bien jefa?
I: Si, si, si me siento bien, muy bien mijo. Tartamudeando.
E: Esque la notó muy nerviosa..
I: Hay no mi vida, son alucinaciones tuyas.
E: Y usted me puede explicar entonces ¿que hace en bata de baño a estas horas?
I: ¿Qué tiene de malo?, ¡todavía es temprano!
E: Pues si.. pero como usted siempre es la primerita que se levanta, se me hizo raro que no estuviera en la cocina chambeando y vine a buscarla haber si estaba usted bien.
I: Hay hijito no cabe duda que tengo al mejor hijo del mundo. Pellizcandolé los cachetes.
E: Bueno ya Amaa. Riéndose. La dejo para que termine de alistarse.
I: Si mi amor. Le da un beso en la mejilla.
E: Pero antes prestemé su baño Amaa, ¡que ya me anda!.
I: ¿El baño?
Inés se puso muy nerviosa, no sabía que hacer ya que en el baño estaba Victoriano escondido.
E: Si Amaa, ¿por qué?
I: Por que.. por que.. ¡No funciona!
E: Usted no se preocupe, yo ahorita se lo arreglo que vaa. Caminando hacía el baño.
I: ¡Noo, nooo!.. No te preocupes hijo, alrato mandó a que me lo reparen, aparte tú no le entiendes a estas cosas, no sabes ni cambiar un foco.
E: ¿¡Qué pasó Amaa!?. Riéndose. Bueno esta bien, entonces me voy, alrato la veo. Abre la puerta y se va.
Inés da un suspiro de alivio y va por Victoriano.
I: Ya puedes salir, ya no hay nadie. Tocando la puerta.
V: - Salé del baño. ¿Qué pasó, quién era?. Angustiado.
I: Era mi hijo, Emiliano.
V: ¿Emiliano?
I: Si..
V: ¿Y qué hacía aquí, a que vino?
I: Me dijo que se preocupó por no verme en la cocina, cuando soy la primera en despertar.
Victoriano se acerca hacia Inés.
I: Victoriano, ¡te haz puesto a pensar en que hubiera sucedido si nos hubieran encontrado juntos!
V: Inés..por favor, tranquilizate.
I: No Victoriano no, Esto no puede seguir así, no es moral.
V: Inés, mi amor. Acercándose por detrás, tomándola de los brazos.
I: No Victoriano, esta no es la manera de arreglar las cosas, sal de mi cuarto ahora mismo.
V: Inés acepta que me amas, si lo hicieras todo sería diferente.
I: No te amo. Luchando para que no se le salieran las lágrimas.
V: Eso no era lo que deseabas unos momentos, antes de que tocarán la puerta. Susurrando mientras le besaba el cuello.
