"22 intentos y siempre fuiste Tú" LiamPayne

Capítulo 26: "¿Celoso?"

La noche se estaba haciendo mucho más fría y aún no la encontraba, hace unos minutos la había encontrado, ¿a dónde podría haberse ido en tan poco tiempo? Me eh fijado principalmente en cada una de las habitaciones, a pesar de haberme encontrado con varias escenas obscenas, había seguido con mi búsqueda. Ella no estaba con algún chico en una de las habitaciones; le pregunté a Harry, quien ya estaba pasado de copas, pero él tampoco la vio. Seguí con una de sus amigas, pero ella estaba tan borracha que a penas se podía parar para bailar. A punto de darme por vencido, su risa se escucha en la parte del jardín, había pasado por allí, ¿cómo no la había visto? Noto que se encontraba con un chico musculoso, de pelo naranja y ojos verdes, creo. Frunzo el ceño, pero no de enojo, es más, ¡no sentía celos! Bien Payne, te has dado un buen golpe sin que lo sientas o lo sepas, estás simplemente loco.

—¡Liam! ¡Querido! —como me hubiera gustado escuchar eso hace semanas, cuando no estaba confundido, cuando no había besado a _____.— ¿Cómo estás? —camina hacia mí con tropezones. La tomo de la cintura antes de que caiga al suelo y se de un golpetón—.
—Rita, ¿cuánto has tomado? —el aliento a alcohol se hacía presente en mis fosas nasales, realmente, aquel aroma era bastante fuerte. Suelta una fortísima carcajada, dejándome por unos segundos, aturdido—.
—¿Qué cuanto qué? —vuelve a reír, negando con la cabeza—. Oh Liam, ¿por qué no lo noté antes? ¡Eres guapísimo! —relame sus labios, pero esta vez no los deseo, ni por un mínimo segundo. Sus brazos rodean mi cuello y me acercan a su rostro, dejando la distancia en cero. Sus labios se mueven bruscamente, ¡hasta podría dejarme un corte en los labios! Forcejeo para separarla de mí, no con mucha fuerza, era una mujer y no debía hacerle daño alguno. Le da un leve mordisco a mi labio inferior y se separa con una mirada seductora; se acerca a mi oído, pero no me estremece como antes lo hubiera podido hacer—. Te espero en el cuarto, guapetón—se ríe pícaramente y se va con pequeños saltos hacia arriba.

¿Qué sucedía? Nadie me entendería, ¡ni yo mismo me entendía! ¿A quién contarle sobre mis sentimientos? Louis de seguro estaba con Eleanor y no precisamente en la fiesta, además, se lo contaría en un santiamén a _____, sería algo inservible. ¿Zayn? ¡a aquel bastardo le gusta mi chica! Bueno, no exactamente mi chica, ¡pero si mi mejor amiga! Suspiro con cansancio y me voy de aquella descontrolada fiesta, antes de que Rita baje y me busque. El aire fresco rellena mis pulmones y respiro aliviado, vomitaría si duraba un segundo más en aquel lugar. 

¿Y ahora qué? ¿Cómo ir a casa? Mamá de seguro aún sigue en el club de poesía con Carla, ella misma dijo que no la esperara despierto. Saco mi celular y con suerte, había cobertura para hacer una llamada. Busco desesperadamente en mi agenda y llamo al primer número que sé que puede llevarme a casa, sano y salvo.
Su carcajada me hace saber que no está sola, ¿sigue con aquel inepto?

—¿Aló? ¡Zayn! ¡Deja de hacer trampa! —ríe levemente, y después se pone seria—. ¿Liam?
—_____... estoy en un caos
—¿Caos? ¿Sigues en la fiesta? ¿La has buscado a Rita? De seguro está tomada de copas, ¿tu madre te pasara a buscar? —me río para mí mismo al escuchar sus preguntas, ella estaba preocupada por mí… creo—.
—Si, _____, sigo en la fiesta. Quiero irme y mi mamá está con tu mamá en el club de poesía, necesito a alguien para que me lleve a casa y no tengo a nadie quien conozca—escucho unos murmullos, seguramente entre _____ y Zayn—. 
—Quédate fuera de la fiesta, iremos a buscarte—luego de aquello, escuche el “bip” que anunciaba que me había cortado—.

Por alguna razón saber que ella seguía con Zayn me molestaba, no poco, si no mucho. Me estaba asustando de mis sentimientos y eso que no había tomado nada de alcohol, ni una simple gota desde que eh llegado. Opto por esperarlos en el mismo banco en el que _____ se había sentado. ¡Mi buzo! Ella tenía mi buzo… Una sonrisa se forma en mis labios, uno de felicidad, uno lleno de orgullo…

Los minutos pasan, y el frío aumenta. Aun así no me arrepiento de haberle dado mi buzo a _____, prefería enfermarme yo que ver como ella moría, literalmente, de resfriado. 
La bocina de un auto me sacan de los pensamientos; me levanto rápidamente, deseando que _____ siguiera usando de mi polera, Zayn debía saber que ella era mía… literalmente también…. Mi sonrisa desvanece cuando lo veo al pelinegro salir con rapidez y abrir educadamente la de ella. Su mano se entrelaza con la de él, y noto que tiene puesta su chaqueta, no mi buzo, ¡su chaqueta y no mi buzo! El idiota me saluda con un movimiento de su cabeza, mientras _____ miraba al suelo avergonzada, ¿avergonzada? ¡Sí! ¡Debía estar avergonzada por romperme el corazón! Bueno, no lo había roto, pero… ¡Bah! Estoy celoso y lo admito.