Me mira fulminante al igual que yo lo hago, a pesar de la oscuridad que abundaba en toda la habitación, sabía perfectamente que como yo, él quería golpearme hasta dejarme inconsciente, ninguno de los dos debía estar aquí, al menos él no debería. Zayn cierra la ventana detrás de él, haciéndome saber que él no se iría de aquí, ni siquiera con mis supuestas amenazas. Mis manos forman puños, llenos de ira y confusión, veo una sonrisa arrogante asomarse en su rostro, algo que nunca me había gustado que venga de su parte.
—¿Qué se supone que estás haciendo aquí? —susurro precavido, tratando de que _____ no se despertara—.
—Aquí la duda es que haces tú aquí—me responde con otro susurro, cruzándose de brazos—.
—Yo te pregunté primero.
—Vale, la vine a visitar, ¿problema?
—Si, me crea muchísimos problemas, idiota—aquello había salido sin permiso alguno—.
—¿Qué? —se acerca “amenazador” hacia mí—.
—¿Me golpearás? Adelante, hazlo—acerco mi mejilla hacia su rostro, rozando su nariz. Escucho su gruñido y se aleja a una distancia de mí—.
—Deberías estar en tu casa, Payne—noto que se va acostando al lado de _____, abrazándola por la cintura. Doy un suspiro tratando de calmar mis celos y cierro los ojos fuertemente—.
—Tú deberías estar en casa—entre dientes, digo—.
—Muy gracioso Liam, sabes perfectamente que soy el típico “chico malo” según todos, yo no sigo las órdenes que tú o otra persona me pueden dar.
—No te irás, ¿cierto? —ríe irónicamente. Me sorprendo al verlo levantarse y acercarse a la ventana—.
—Solo quería comprobar algo, y ya lo comprobé.
—Zayn…—digo seriamente. No sabía que era lo que quería comprobar, pero sabía que él no era para nada bueno en ocultar secretos—.
—Tranquilo, Payne, Rita no se enterará de que te sientes atraído por ella—veo otra sonrisa arrogante. Frunzo el ceño confundido, para después verlo desaparecer a través del ventanal—.
¿Atraído por _____? ¡¿Atraído? Oh no, claro que no, solo la veía como una mejor amiga, casi una hermana para mí. Si, tal vez me haya sentido celoso de vez en cuando o me haya gustado sus labios pegados a los míos, pero esto estaba prohibido, al menos lo era para mí. No podría salir con _____, no era por el hecho de tener este tipo de relación, si no por el hecho que ella es demasiado buena para ser de mi territorio, ella merecía algo muchísimo mejor que yo, de eso estaba completamente seguro.
Vuelvo a suspirar, para después acercarme a su costado, abrazándola por la cintura como lo había hecho Zayn. Se mueve incómoda, pero no despierta, al contrario, acuesta su cabeza sobre mi pecho, tal vez, escuchando los rápidos latidos de mi corazón. Trago saliva y cierro los ojos, imaginando que era Rita a mi costado, quien era ella la que provocaba estos latidos en mí, con la que podía comportarme normalmente como lo hago con _____. Es completamente complicado comparar a ____ junto a Rita, no diría quien era mejor, simplemente las amaba a ambas por casi igual.
Domingo. Once de la mañana y seguía con sueño. _____ seguía en la misma posición que en la madrugada, ni siquiera se había movido de aquella posición, algo que me había hecho el día por completo. Un respiro profundo sale por mi nariz, despertándola y sobresaltándola a la vez. Sus mejillas se tornan rosadas, algo que considero verdaderamente tierno de parte de ella, siempre me había gustado aquel efecto en sus mejillas, la hacía ver más tierna de lo que ya era.
—¿Liam? —frunce su ceño antes de sentarse en la cama. Suelta un bostezo y me mira fijamente—. ¿Qué haces aquí? ¿A qué hora viniste? No te escuché entrar—sonrío levemente e imito su acción de hace segundos atrás—.
—Estaba aburrido, no tenía sueño y no quería estar en casa. Vine a la madrugada, tú estabas en un sueño profundo—se ríe divertida y me da el típico beso en la mejilla de “buenos días” —.
—Hoy es domingo, debo hacer la tarea y estudiar, así que levanta tu trasero y haz lo que yo—la veo levantarse, yendo en búsqueda de una toalla—.
—¿O si no qué? —elevo una de mis cejas, desafiante—.
—O si no te sacas un cero mucho más grande que tu cabeza y no podrás graduarte—sonríe. Sin contradecirla otra vez, me levanto y me desperezo—.
—Usa el baño de abajo, si necesitas algo de ropa solo grita mi nombre o el nombre de mamá, de seguro está despierta haciendo el desayuno—asiento y la veo desaparecer en el baño—.
La música de la llegada de un mensaje en su celular se escucha al mismo tiempo que las gotas de agua caer en la regadera. “La curiosidad mató al gato” Y Liam Payne mató a al gato.
Me acerco a su celular, notando que el sobre amarillo era ocupado por el nombre de “Austin”. ¿Austin? ¿Austin Mahone? Sin más tiempo que perder, abro aquel mensaje, sabiendo perfectamente que esto no estaba bien.
“Eh regresado, ____ y no creas que te eh olvidado, esta vez, voy a por ti”
¿Va a por ella? ¡¿Va a por ella?! ¿Qué demonios era esto? ¡¿Qué estaba haciendo él aquí?! ¡Se suponía que ____ lo había olvidado por completo al igual que él! Por dios santo, esto no estaba en mis planes, él fue su ex mejor amigo y su ex novio, ¿querrá robar lo que supuestamente es mío? ¿O yo estaré pensando mal? Al diablo con todo esto. Abro las configuraciones de aquel mensaje, dando a la opción de borrar. Dejo el celular en donde anteriormente estaba y hago como si nada hubiera pasado.
_____ sale de pronto, con una toalla a su alrededor. Muchos aprovecharían de mirar cada centímetro de su cuerpo, pero yo estaba nervioso, no podía ni siquiera pensar.
—¿Pasa algo? —pregunta al verme en aquel estado. Niego rotundamente, debatiendo conmigo mismo. ¿Le pregunto o no? ¿Lo habrá olvidado? Le sonrió tratando de verme sincero y salgo hacia el baño de abajo, totalmente arrepentido. Si ella me ayudaba con Rita, ¿por qué yo no dejarla ser con Austin? ¡Bah! Hasta pensarlo me da una tremenda jaqueca
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"22 intentos y siempre fuiste Tú" LiamPayne
Fiksi PenggemarLa mayoría de las personas se rinden al primer intento. Otros, se rinden al segundo. Liam James Payne es la excepción. Con tan solo diecinueve años se había enamorado de verdad, según él. Aquella chica con curvas, de cabello dorado y ojos azules, ha...