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*Narra Jonathan*

Después de todo lo que le dije a _________ entré a mi casa y lloré como nunca, me había pasado bastante y me había dado cuenta de que en realidad amaba con mi vida a esa pendeja, estuve pensando un buen rato hasta que miré la hora, llegaba tarde al entrenamiento por lo que agarré mi bolso y salí casi corriendo de casa, después de asegurar todo subí a mi auto y empecé a recordar sin querer todas las mierdas que le hice a mi hermana, las lágrimas volvieron a salir de mis ojos nublándome la vista, me las limpiaba pero ahí seguían, en un momento de esos me limpié los ojos pero lo próximo que escuché fue un fuerte golpe por lo que paré en seco, me bajé del auto y me di cuenta de que había atropellado a alguien, rápidamente llamé a una ambulancia y me acerqué a la chica, le di la vuelta y no podía creerlo, era mi hermana.

Rápidamente le toqué el cuello para tomar su pulso pero era demasiado bajo por lo que empecé a desesperarme, los pocos minutos que tardó la ambulancia me los pasé llorando y agarrando la mano de mi hermana, cuando llegó la ambulancia y se la llevaron intenté irme con ella pero la policía me detuvo, me llevaron a comisaría y di mi declaración, luego de eso me fui al hospital y le mandé un mensaje a Guillermo explicándole lo que pasó, por suerte entendió y me dio el día libre.

Cuando llegué al hospital pregunté por mi hermana, me indicaron cual era su cuarto por lo que entré, ella estaba con un montón de cables sobre su cuerpo por lo que lloré, agarré la silla y me senté al lado de su camilla para luego agarrar su mano.

-Perdoname por todas las mierdas que te dije, me acabo de dar cuenta de que vos siempre fuiste lo mejor de mi vida, que cuando mamá me regañaba por algo malo que te hice vos estabas ahí para defenderme y negar que yo te había hecho algo, siempre estuviste a mi lado aunque te traté de la peor manera. Cuando te fuiste de casa me sentí tan solo, no tenía con quien discutir, reír y por último no tenía quien me cocine mi comida favorita cuando me enojaba, sos lo mejor que me pasó en la vida y me comporté como idiota solo por culpa de todas las mierdas que mi padre me metió sobre vos. Solo me queda decirte que te amo mucho

Besé su mano y acaricié con cuidado su cara, me senté en la silla y poniendo mi cabeza en la camilla me quedé dormido.

A las horas desperté al sentir que alguien acariciaba mi pelo, abrí los ojos lentamente, me senté y sonreí al ver a mi hermana despierta, agarré su mano y la entrelacé con la suya.

-¿Qué me pasó?- preguntó débil.

-Sin querer te atropellé

-Me duele todo

-Voy a llamar al doctor ¿sí?

-Ok

Llamé al doctor y salí un rato de la habitación mientras él la evaluaba, al rato Pablo llegó por lo que lo saludé.

-¿Qué pasó?

En ese momento le conté todo, él solo me miraba negando con la cabeza, me puso una mano en el hombro y lo palmeó.

-Que bueno que reaccionaste

-Vos deberías hacer lo mismo

-Es diferente

-No lo es

-Ella es adoptada

-¿Y? No porque no hayan salido del mismo sitio significa que no son hermanos, pensa que ella siempre estuvo ahí para vos, iba con vos a todos sitios y nunca te abandonó

-Para no morirse de hambre seguro

-Si supieses lo mucho que te ama...

-Porque vos si lo sabes ¿no?- dijo con sarcasmo.

-Claro que lo sé, fui su novio y sé sus sentimientos hacia vos y como le dolía todo lo que le hacías

-Ya hablaré con ella

-Eso espero

Al rato el doctor salió de la habitación de _________ y me comentó que ya estaba algo mejor y que esperaba que en unas semanas salga del hospital y esté recuperada, le di las gracias y con Pablo entramos a su habitación, ella estaba dormida debido a los calmantes que le habían puesto así que me senté, Pablo hizo lo mismo y nos pusimos a hablar sobre cualquier cosa.

Durante el día varios de sus amigos y los chicos de Boca fueron a verla, ya cuando acabó la hora de visita tuve que irme por lo que me quedé muy mal, quería estar ahí para ella pero no me dejaron así que me fui a mi casa, al llegar en la puerta estaba Patricia.

-Hola, ¿cómo está _________?

-Más o menos, estaba muy adolorida

-Que mal, espero que se recupere pronto

-¿Queres pasar?

-No creo que sea buena idea.

-Dale, así tomamos un café, necesito un poco de apoyo ahora mismo

-Está bien

Los dos entramos a mi casa, la guié a la cocina e hice el café, ella me lo recibió y empezamos a tomar mientras hablábamos de todo lo que había sucedido hoy, ella solo me sonrió y me dijo lo encantada que estaba de que haya cambiado, le agarré la mano y le agradecí para luego darle un beso en los labios pero una cosa llevó a la otra y acabamos pasando la noche juntos, estaba tan feliz de tenerla de nuevo conmigo.

La apuesta {Pablo Pérez}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora