Capítulo 1

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POV RICK

Soy un tío especial… me encanta divertirme, sentirme vivo. Para ello, llevo una doble vida que me hace sentir así. Por un lado, soy Richard Castle un escritor de novelas policiacas… novelas negras. Un día decidí que lo mío era la escritura pero para ello necesite de otra vida para llenarme de la inspiración necesaria para conseguirlo. Mi otro yo es Richard Rodgers, soy un investigador privado, de lo mejor que hay en Nueva York y no es que quiera exagerar, si no que mi curriculum así lo dice. Me gusta ponerme retos y superarlos… resolver misterios en la vida real, no solo con las palabras.

Intento mantener mis dos vidas separadas y por eso soy un autor de libros anónimo. Tengo bastante éxito y quizás si me diera a conocer eso ayudaría aún más, pero me perjudicaría en mi otro trabajo y de momento, lo necesito para desarrollar mi escritura.

He tenido grandes casos, incluso alguna vez la Policía de Nueva York ha precisado de mi ayuda, lo que ha hecho que consiga fama como investigador, aunque a parte, también he conseguido bastante trabajo en este último año. Tanto es así que me puedo tomar el lujo de aceptar los casos que me apetecen, los que me llaman la atención, o los que pueda usar de guion en mis futuros libros.

Un día recibí una llamada de una persona importante en esta ciudad donde vivo, Nueva York. Tenía un caso para mí, por lo que fui a visitarlo para ver si podía hacerme cargo o no de su investigación. Aunque, por desgracia, estaba seguro de que me tocaría aceptarlo, era amigo del alcalde y a él nunca le dije que no, es un amigo mío de la infancia y mantenemos un cierto contacto. Nos gusta el póker y ambos disfrutamos de noches enteras bebiendo, jugando y despellejando a algunos tipos amigos suyos, que nos dejan bastantes beneficios… son meros aficionados a nuestro lado.

Solo esperaba que fuera un caso que me divirtiera… quizás difícil y que llamara mi atención lo suficiente para no aburrirme. Últimamente ese tipo de casos eran simples búsquedas de personas desaparecidas sin ninguna importancia. Y ese tipo de investigaciones no me traían nada nuevo para aportar a mis escritos.

Justo antes de recibir la llamada de mi amigo el alcalde me estaba preparando para tomar unas merecidas vacaciones pero ahora… tendrán que esperar, paciencia… aunque le hare saber a mi compañero de póker, que me cobrare ese favor.

Me acerque hasta la dirección que me había proporcionado y cuando llegue a la casa salió alguien de la seguridad para comprobar mi identificación. Me imaginaba que tenía que ser alguien importante, pero tanto como para tener ese dispositivo de seguridad, me pareció excesivo.

Cuando entré me encontré con un hombre fuerte, no muy alto, rubio con un traje gris. Se acercó a mí con determinación y me dio un fuerte apretón de mano, tanto es así que en cuanto se dio la vuelta me permití hacer un gesto de dolor.

- Señor Rodgers… soy William Sorenson.

- ¡Oh…! - Fue lo único que me salió en aquel momento.

Había escuchado la noticia que le rodeaba a aquel hombre que se hallaba frente a mí. Era un alto cargo dentro del FBI. Hacia cosa de un mes, llegó a su casa tras uno de sus casos y se encontró con que su mujer e hijo habían desaparecido. De eso, paso un mes y desde entonces no se sabía nada de ellos. A pesar de las investigaciones que se habían hecho no consiguieron sacar nada en claro, no habían dejado ni un rastro.

- Necesito encontrarlos – me pidió exagerando su "dolor".

- Entiendo. ¿Qué cree usted que paso? – le pregunté intentando tener algún detalle más del caso.

- Usted que cree… - me dijo demostrando su ira en el rostro. Más que preocupado, parecía enfadado.

- Bueno, usted tendrá muchos enemigos, puede que alguien se quisiera vengar de usted.

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