Mi querido amo del sexo (Editando)

53. no traígo ropa interior

Jade.

Pensé que él lo haría, pero no, Harry y liam llegaron a tiempo, a ese momento y supe que los milagros si existen

***

Harry estaba dolido, disperso y decepcionado porque no pudo matar a Jeremy, se lo impedí, no pude dejarlo.

–Perdóname, jade, juro por mi vida que lo que pasó no te volverá pasar.

Asiento tomando sus mejillas en mis manos, beso sus labios y lo abrazo fuerte.

–¿Quieres olvidarlo, por favor?—Susurro en su oído.

Él me cubre con sus brazos y besa mi cuello.

–¿Segura que estás bien?—Susurra en mi cuello.

Asiento besando el lóbulo de su oreja.

–Te amo, Harry.

Digo, mi corazón no pudo haber elegido mejor. Harry es literalmente perfecto ante mi corazón y toda mi razón.

–Te amo, bonita

Me separa y acaricia mi mejilla, ve el posible moretón en ella y sé que está molesto por ello. Me acerco a sus labios y lo beso, su labio inferior queda entre mis labios y lo chupo suave.

Él desliza su lengua sobre mis labios y no puedo evitar sonreír y sentir un cosquilleo en mi estómago.

–Ésta mañana me invitaron a una celebración de socios...—Comienza hablar sobre mis labios, siento su cálido aliento y medio pellizca mi labio con sus dientes.

–Dije que asistiría con mi novia...

Miro sus labios y muerdo el mío por inercia.

Acepto, acepto el hecho de distraernos un poco luego de ésta mañana.

–¿Sigues queriendo asistir?—Pregunto.

Deslizo una mano por su cabello, su cabello corto, extrañando halar su melena. Lo acaricio y deposito un beso en la comisura de sus labios.

–Quiero presumir a mi novia.

Miro sus ojos y suelto una risita.

Asiento y lo beso logrando capturar sus labios por mucho tiempo más, nuestras lenguas juegan por un minuto y gozo de sus labios delgados.

Dos horas luego.

Dejo que el vestido negro se deslice por mi cuerpo, descotado a los lados de mis piernas y cerrado en mis senos. Busco unos tacones de tiras negro y dejo caer mi cabello por mis hombros, logro cubrir el moretón en mi mejilla y estoy básicamente lista.

–Bonita, me gusta esperar por ti, pero en éste caso me fastidia un poco.

Escucho a Harry detrás de la puerta y sonrío, tomo una cartera de mano y abro la puerta.

Harry me mira y me estudia por un minuto. Dejo que la tela en mis piernas le muestren el corte del vestido y él por fin mira mis ojos.

–Imagino que en ese lugar habrá un pequeño lugar donde pueda disfrutarte mejor.

Toma mi mano y me acerca a él para besarme.

–Eso espero.

Salimos de casa, Harry me sostiene con su mano mientras caminamos a su auto. Abre la puerta para mí y no dejaba de gustarme lo atento conmigo para todo, incluso, me fascina cada día más.

–Gracias.

Arranca el auto y miro por la ventana.

–¿Cuántos hijos te gustaría tener?