Mi querido amo del sexo (Editando)

10.- ¿tayler?

Él hizo silencio y me miró con tristeza y preocupación.

-¿Tú qué?

No podía esperar más.

Pasó una mano por su cabello, y miré los tatuajes de su pecho. Estaba nervioso, mucho, y era algo preocupante.

-Yo estoy enamorado de una chica-Terminó por soltar y un suspiro de alivio salió. Sonreí y me urgía saber quién era la afortunada, Louis nunca en su vida se había enamorado, siempre tiene unos ojos muy buenos que buscan la perfección en una mujer, y yo me sentía muy bien al saber que lo tiene así una mujer y no algo que yo pueda llamar la mierda de un caballo.

-Jesús, no vuelvas a tener éste maldito suspenso conmigo y más por una chica.

Él parecía igual, tenso y serio, no entendía.

-Harry, me enamoré de una chica que es intocable, es prohibida. Estoy perdido, yo no puedo tenerla en mis brazos y duele saberlo.

-Te escuchas cómo un pobre bastardo.

Él rió con lástima y me sentí culpable. Le golpee la espalda y quería animarlo, pero nada qué podría ayudar salía de mi boca.

-Es inútil... -Tapó su rostro y yo mordí mi labio con indignación.

-Amigo, eres todo un rompe faldas. Podrás tener a esa chica bajo tus bóxer, lo sé. Sólo... inténtalo-Él sonrió y me observó con determinación. Sus ojos azules querían decirme algo, pero no lograba entender qué. Imaginaba que todo ésto sólo era por la chica, lo prefería así.

-Gracias. Pero nada ayudará.

JADE

Me arreglé y tomé mi cartera junto con tarjeta de crédito y mi móvil. Bajé y salí de la casa... Esperaba desayunar afuera y arreglar mis pensamientos, arreglar cosas mal en mí.

Crucé la calle para caminar, la cafetería estaría cerca a unas cuadras y me vendría bien hacerlo.

-Ángel.

Me detuve y observé a mi alrededor, no encontraba a más nadie para que lo llamaran ángel, soy la única que anda caminando a éstas horas de la mañana por aquí. Volteé y miré a un chico, moreno con piel clara, ojos azules, cabello negro y un cuerpo muy presentable.

-Soy tayler-Extendió su mano y dudé en tomarla. Lo estudié y definitivamente es muy atractivo.

-Jade-Él sonrió y me guiñó un ojo

-Disculpa por ser atrevido. Soy tu nuevo vecino, me mudé el domingo...

Asentí y quería tomar de nuevo mi rumbo.

-Disculpa. Tengo que irme

Él asintió y metió sus manos en sus bolsillos delanteros... Suspiré y me di la vuelta para caminar a la cafetería, sentía esa intensa mirada que pasaba por todo mi cuerpo y sabía que él me observaba. Apreté los puños y caminé más rápido.

***

La noche cayó y aún estaba paseando por las calles perdida en una oscuridad que sólo yo conocía.

-¡Hey!

Volteé atrás y miré a dos hombres detrás de mí. Tenían un mal semblante y lucían patético s. Uno de ellos era más alto y es rubio, el otro es moreno y más acuerpado.

-Se supone que niñas cómo tú no deben estar por estos lados a ésta hora y mucho menos sola-El rubio escupió y me miró con deseo, un deseo que para mí era un completo asco.