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YOONGI: Yoongi continúa mirando la puerta del baño.

Los minutos siguen pasando y Jimin no ha salido aún, está preocupado, pero no puede ir, teme hacerlo, porque después de todo, Jimin no iba a contarle nada.

Tal y como aquel día no debió meterse en su problema de Jungkook, no debe meterse ahora. No es asunto suyo.

JIMIN: Cuando consigue calmarse, se seca la cara llena de lágrimas con el puño de la manga de la camiseta y se levanta del suelo. Se mira frente al espejo. Perfecto. Ahora tiene la cara y los ojos tan hinchados que parece que viene de una pelea. Joder, si apenas veía con claridad. Tal vez no era buena idea trabajar hoy. Nunca había pedido una baja, pero quizás hoy era el día.

Salió del cuarto de baño, tapándose la cara y dirigiéndose rápido hacia la oficina del jefe, intentando que Yoongi no le viese.

Abre la puerta tras dar tres ligeros toques en ella y el jefe se levanta de su silla nada más verle.

-Pero Jimin! ¿Qué te ha pasado?

Dice acercándose a él, preocupado.
Jimin no puede evitarlo y le abraza, hundiendo su rostro en el hombro contrario y volviendo a llorar de nuevo.

El jefe no sabe por que llora, ni que ocurre, pero aún asi, comprende y le devuelve el abrazo.

-Está bien, Jimin. Ve a casa, si? No quiero que los clientes digan que aquí se vende café aguado por tu culpa.

Dice intentando hacerle reir. Jimin asiente y sonríe levemente.

-Muchas gracias, volveré mañana sin falta.

Sale de la oficina y se quita la chaquetilla del local a prisa, quiere huir de allí. En este momento le da miedo ver a Yoongi.

Ojalá jamás se hubiese enamorado de él. Todo sería mucho más sencillo.

YOONGI: Yoongi mueve la cuchara de su café frenéticamente, tanto que los clientes se han dado cuenta de la taza que esconde tras el mostrador gracias a los golpes que le da con la cuchara.

Observa cada movimiento del lugar con cierto nerviosismo. Jimin salió prácticamente corriendo del baño para esconderse en el despacho del jefe. Está más preocupado que antes, y ya va por la cuarta vez que se replantea si meterse o no. De verdad quiere saber qué es lo que le pasa al menor e intentar ayudarlo, pero le resultaba imposible, y más, cuando ni si quiera sabía si confiar en él, es decir, ¿seguía pillado por Jungkook o no?, porque Yoongi ya no sabe la respuesta con claridad.

Jimin sale de un momento a otro, pero el mayor ni si quiera es capaz de mirarle a la cara para saber cómo está, y mucho menos le da tiempo a hablarle.

Suspira y deja la cuchara quieta, cosa que por lo que ve, destensa a un par de clientes.

Se ve que tendrá que trabajar en solitario, porque Jimin no tenía pinta de que fuera a volver.

JIMIN: Al llegar a su casa, pone el seguro y se encierra en su habitación. Tan solo quiere dejar de existir por un tiempo. Se había mantenido y mostrado fuerte hasta ahora, ante Yoongi, ante Jungkook y ante si mismo. Pero ya no podía fingir más. Estaba destrozado por dentro. No era tan feliz como aparentaba ser y las cosas le importaban más de lo que decía.

Quizás nunca fue una buena idea contarle a Yoongi sus sentimientos. Al fin y al cabo, cuantas probabilidades había de que algo bueno ocurriese?

Apaga el móvil. No quiere recibir nada de nadie en estos momentos. "Sólo quiero estar solo".

Se tumba sobre la cama e intenta dormir.

The Coffee Shop《Yoonmin Lime》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora