LA CABEZA PERDI

No me abandones.

Narra Guido:
NO NO NO, Julieta no se puede ir, no la puedo perder.
(Guido reacciona y corre pelotudo, anda a buscar a tu novia y arregla las cosas) pensaba para mis adentros.
No podía creer en la cagada que me había metido, no era justo que me pase esto. Porque? PORQUE?

-¿Sos enferma Roxana?- le grité, estaba furioso. -¿Te das cuenta del quilombo en el que me acabas de meter?- me acerque a ella y le grité en la cara.

Hizo un paso atrás -Disculpame Guido...- Roxana lloraba desconsoladamente y estaba roja como un tomate.

-Disculpame las pelotas- la interrumpí. -Ahora vas a entender una cosa, yo NO estoy interesado en vos, ya te supere y NO te amo como vos a mi. Así que olvídate de mí por un largo tiempo- dije señalándole el rostro con mi dedo y gritando.

-Pero Guido...- seguía llorando.

-Pero nada, chau- salí de la cocina pegando un portazo y ni siquiera al salir saludé a Maxi, pare el primer taxi que vi y le dije que persiga al taxi en el que Julieta se había subido.

Narra Julieta:
Quería desaparecer de todos lados, no aguantaba lo que mis ojos habían visto.
¿Tanto versito de amor al pedo? ¿Tantos juramentos sin sentido? Porque y para qué? Yo no merezco esto después de todo lo que pase, y sinceramente no pretendo hacerme la víctima... Simplemente no lo merezco porque sufrí mucho y ya NO aguanto más.
Yo lloraba muchísimo y trataba de esconder mis lágrimas para no llamar  la atención del taxista pero fue en vano, no me podía ocultar mucho... estaba devastada.

-Querida escuchame, ¿estás bien?- dijo preocupado el taxista dandonse vuelta de su asiento.

-No señor, sinceramente no...- solloce tratando de secar mis lágrimas.

-Soy todo oídos-

-Mi novio... y otra chica y...- seguí llorando, no podía ni hablar.

-Que raro los novios mandándose cagadas, dale, explícame bien... ¿Que hizo el salamin?- dijo el hombre acomodándose su boina.

-Se besó, se besó con la cocinera de ese lugar... ¿Usted entiende? ¡Me cago prácticamente, señor!- estaba harta de llorar pero no podía parar.

-Ufa- dijo golpeando levemente el volante. -Bueno, yo no sé de qué tipo era su relación pero de pibe pasé por miles de cosas parecidas a esta situación y creeme que todo tiene solución y también se puede superar...
Tendrías que hablar con aquel boludo... Porque por lo que vi salias corriendo de ese bar, trata de calmarte un poco y anda en busca de explicaciones y respuestas... Va a ser más sano que encerrarte y llorar y llorar por ratos largo sin ninguna solución.
Haceme caso, tranquilizate y llamalo al pibe. Espero que te sirva mi ayuda-

-Gracias señor... Me ayudó un poco sus consejos, voy a pensarlo...-

-Denada señorita...-

-Julieta, Julieta me llamo. Y usted?-

-Soy Carlos, tomá- me entrego una tarjeta. -Sea a donde tengas que ir me llamas, estoy a disposición- sonrió amable el señor.

-Bueno, gracias Carlos. Que amable, adios- le pagué y me baje del taxi e ingrese a mi casa.
Al entrar luz estaba con Pato tirados en el sillón viendo una película,mi hermana al verme en ese estado se paró rápidamente y le dijo algo  a Pato en oído, enseguida se acercó a mí y el se quedó sentado.

-Ju, ¿nena qué pasó? ¿Porqué tenes los ojos rojos y... todo el maquillaje corrido?- preocupada me agarró suavemente del brazo me llevo hacia la cocina.
Le conté todo lo sucedido y con cada cara de horror que ponía mientras yo relataba pude ver las ganas de venganza de mi hermana a flor de piel, nos cuidábamos mucho entre las dos.

Cuanto terminé de hablar, soltó todo. -AH NO, YO LO MATO... LO MA-TO- dijo con las manos en forma de puños. -COMO TE PUDO HACER ESO- se corrió el pelo hacia el costado frustrada. -Con mi hermana no se jode la puta madre.

En eso aparece Pato con las manos en el bolsillo, sus mechas rojas a los costados y el pelo atado. -¿Esta todo bien?-

-NO! no lo está- gritó Luz alterada.

Pato abrió los ojos grandes. -
¿Y que paso?-

-Tu querido hermano pasó!-

-¿Que hizo Gastón?-

-¿Gaston? Pato, ¿con quién está de novia Julieta?- pregunto harta y me señaló a mi. Yo no acote nada.

Pato revoleó los ojos. -Uf, ¿que hizo el rubio pelotudo ahora?-

Luz le explicó todo, yo no tenía ganas de hablar.
En eso siento que golpean la puerta, luz se acercó de inmediato a abrirla.

Narra Guido:
Le dije al taxi que frene en la esquina, vi como Julieta bajaba del auto con la cara roja e hinchada y su valija en mano.
Todavía no quería acercarme, pero me quedé unos minutos en el auto pensando que hacer hasta que me decidí. Le pagué al taxista, me baje del auto y camine hasta la puerta de la mansión.
Toque la puerta tres veces y con cara de pocos amigos me atendió la hermana de Ju, Luz.

-¿QUE HACES ACÁ?- preguntó hecha una furia. -¿¡Como te da la cara de venir después de lo que le hiciste a mi hermana!? Mira nene con nosotras no se jode- dijo señalandome con furia, y luego me pego un empujón sacándome de la entrada.

-Yo...-

-¡Yo nada! Andate...-

Luz no pudo seguir hablando porque alguien la agarró de atrás, era Pato.

-Luz cálmate, hay dos personas que tienen cosas que hablar- la interrumpió y me fulminó con la mirada.

Luz nada convencida me abrió paso y se subió al auto de Pato, este arranco fuertemente y se encaminaron al centro.
Entre lentamente a la casa, cerré la puerta y mire para mis costados. Julieta, mi rubia... Estaba sentada en el sillón con sus manos en el rostro y los brazos apoyados en las rodillas. La oía sollozar despacio.
Se me rompió el alma, fui un pelotudo.

-Eu...- me arrodille frente a ella y traté de sacar sus manos de la cara. -Mirame, quiero que hablemos-

-Te escucho- dijo llorosa y moqueando.

-Bueno- me senté a su lado y tomé aire.
-Se que estás con mucho dolor y confusión y te fuiste con bronca de allá pero ahora quiero que me escuches-

-Anda al punto- dijo mirándome a los ojos limpiándoselos dejando rastros de delineador en sus mejillas.

-Roxana hace dos años fue mi  novia, cortamos bien y todo terminó bien como amigos. Al otro año me puse de novio con Michelle una chica de acá, que iba un año antes que yo al colegio. Pero no tuve éxito, tiempo después Matias el mejor amigo de Pato me arrebato a mi chica y ya nada fue igual hasta que apareciste. Y lo de ayer... No se como pasó, Roxana empezó a tirarme una sarta de cosas que yo pensé que ya había olvidado y luego se me abalanzó para besarme. Yo intenté sacarla pero llegaste vos, no hacia mucho que me había besado... Vos llegaste justo y no me diste tiempo a explicar. Por favor, entendeme. No te quiero perder Julieta, no por una boludes así que yo no quería que pasara... Por favor- me mostré suplicante ante ella porqué así me sentía, no quería perderla ahora... Porque ya me había hecho la cabeza siendo parte de mi vida.

-Te entiendo Guido, pero no sé... Me dolió mucho lo que vi...-

-Ju- agarre su rostro. -Mirame a los ojos, NO quiero perderte... por favor, no me abandones-

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Buenaaaas! Cómo va? Espero que bien, otro capítulo fuerte fuerte eh!
Ya mismo empiezo a escribir el otro, las dejo sacar sus propias conclusiones de la historia! No se olviden de votar y comentar que les pareció este capítulo! Un beso y gracias por todo el apoyo
Pd: QUE LEVANTE LA MANO QUIEN FUE A OBRAS ✋
Airbag la rompió otra vez y fui parte de eso, voto por el recital también (? Saludos!