El profesor y yo

Mi nombre es Mara

1 año mas tarde:
Hace apenas seis meses llegamos de Aruba por lo que Ryan debe actualizarse en las cosas de su empresa y yo en las cosas de mi tienda. Nos ha ido muy bien, todo ha sido muy feliz y casi no tenemos discusiones. La única discusión que tuvimos en mucho tiempo fue dos meses después que llegamos. Estaba muy envuelto en trabajo y no nos veiamos entonces fue ahi cuando el decidió buscarse una secretaria para poder pasar mas tiempo conmigo. Después de cuatro meses, hoy decidió tomar a una chica que conoceré luego.

-Y... ¿entonces piensas que ella es la chica correcta?-

-Eso creo April.-

-Pero... ¿quien la escogio?-

-Amber, la escogi yo. Osea,el me la enseño y fui yo quien dije si.-

-¿Y no piensas que puede pasar algo entre ellos?-

-Dejen de hacer tantas preguntas. - me levanto de la cama. -El no lo hará, nosotros estamos bien. Yo confío en el.-

-Esta bien, no te alteres.-

-Debo irme. -

-Bien..- me giro y salgo muy molesta por aquella puerta. Es injusto de su parte hacerme sentir mal de esa manera. Bajo las escaleras de la casa y salgo. Tomo las llaves del auto de mi cartera y me voy directo para la oficina.

Después de unos treinta minutos llego y veo el gigantesco edificio y me detengo frente a él. 

Camino por la recepción y veo como la chica de alli me sonríe. 

-¡Señora Smith! Que bueno verle.-

-Igual a usted.- le sonrío.  -Avisele al Señor Smith que voy subiendo.-

-¡Como usted diga Señora!- me giro y camino hasta el ascensor y undo el botón para ir al último piso.

Cuando las puertas de éste se abren, veo a una chica de cabellos rojizos en el escritorio que ayer estaba vacío. 

-Buenas tardes.- ella se sobresalta en su silla. -Oh, lo siento mucho.-

-No. No se preocupe.- le estiro mi mano.

-Soy la Señora Smith.- ella toma mi mano.

-Le avisaré al Señor que usted está aquí. -

-¡Mi amor!- Ryan sale por la puerta. Se acerca a mi y besa mis labios. -Escucha Mara, nunca debes avisarme cuando mi esposa llegue a verme. Ella siempre es bienvenida.-

-Bien.- responde con su cabeza baja.

-¿Ya se conocieron?-

-Le dije quien era yo pero ella no me dijo su nombre.-

-Oh lo siento, mi nombre es Mara.-

-Bien bueno conocerte Mara.-

-Ven cariño.- paso por delante de Ryan y entro a su oficina.

-Mara, no me pases ni llamadas ni recados ¿está bien? No importa que sea. Voy a estar ocupado con mi esposa.-

-Lo que usted diga Señor Smith.- veo como el cierra la puerta y yo me acerco a ver otros edificios por medio de los cristales de su oficina. Camino a su escritorio y veo una foto de nosotros en éste. 

-No sabia que tenías esa foto aquí. - me siento en su silla.

-Pues ahora lo sabes.- sonríe.  -Venias a decirme algo.- me hace señas para que me levante de la silla pero me quedo sentada.

-No. Venia a hacerte algo pero tus cristales no me lo van a permitir.-

-Eso se resuelve. Dejame sentarme porfavor y luego te sientas en mi falda ¿si?-

-Esta bien.- me levanto y veo como el se sienta por lo que luego yo me siento encima de él.  Abre una de sus organizadas gavetas y con un botón las cortinas comienzan a cerrarse dejando a la vista una sola parte en donde no hay edificios y entra la luz.

-Ya lo resolví y ahora qué.- me levanto y me paro frente a él, quito el lazo que tenía mi vestido y lo saco quedando en ropa interior.

-Esto.- me toma por la cintura y comienza a besar mi abdomen.

-Cada dia que pasa me exitas más. - río y me siento sobre él.  Comienzo a besar sus labios con fuerza. Quito su elegante chaqueta y comienzo a quitar los botones de su camisa. -Te amo.- susurra en mi oído lo que hace que cada parte de mi piel se erice.

El ruido de la puerta abrirse hace que caiga al suelo y tome mi vestido.

-¿¡Que demonios sucede Mara!?-

-Señor, tiene una llamada de otra empresa.- ya me la imagino con su maldota cabeza baja.

-¡No me importa Mara! Te dije que no me pasaras llamadas. Retírate y dile que lo llamo luego.-

-Lo siento Señor.- respira profundo y me mira a los ojos preocupado. 

-¿Estas bien? Cariño.-

-Me duele el trasero.- me toma una mano y me levanta del suelo.

-Nada que yo no pueda arreglar.- se sonríe y me toma nuevamente para sentarme sobre él.

-¿Ella es bruta?-

-Hace bien su trabajo pero aveces es asi.-

-Bruta. - se ríe. 

-Como quieras llamarla. Ahora... ¿podemos seguir en lo que estabamos?-

-No... creo que debo irme tu tienes trabajo demás. - me levanto y tomo mi traje. Camino hasta la puerta y me detengo para colocarmelo.

- No te vayas. - dice Ryan a mi oido mientras me toma por la cintura y me apega a él. 

-Debo irme.-

-Te va a gustar quedarte.- me hala hacia sus sillones y me acuesta en uno. Comienza a besar mi cuello lentamente y me susurra cosas a mi oido.
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Hola mis lectores!!! Ya casi estamos terminando esto- escribo limpiándome los mocos.- 💔😭
Gracias por leer cada capitulo. Este en particular es tan corto porque no es un capitulo, simplemente quise escribirlo. Les amo demasiado
-Con amor, Ama.