El profesor y yo

Capitulo #15: Adiós 2016

30 de diciembre
Once días despues:
Bradley Cooper

Navidad en Nueva York ha sido muy divertida. La he pasado con mis padres y he ayudado con la empresa.

Todos los minutos pensando en Emily.

No he estado con ninguna chica, me lo he propuesto y lo he logrado.

Estamos en el times square a punto de decirle adiós al 2016 y realmente no quiero hacerlo.

No quiero que Emily se vaya con él.

-Mamá.- grito un poco porque el bullicio es grande.

-¿Que?- me ha roto el tímpano. Olvidenlo, ya estoy sordo.

-Voy a un lugar sin bullicio, haré una llamada.- ella asiente con la cabeza y sigue meniandole las caderas a papá.

Ellos han mejorado, creo que tuvieron unas terapia de parejas y ya están juntos otra vez pero no es la primera vez que pasa.

Empujo a la gente y camino hasta una tienda tranquila.

Es como de cristaleria y tiene unos asientos.

Me siento y entro a mis contactos.

Pongo la letra E en el buscador y la primera es Emily.

Undo su contacto y la llamada sale.

Suena, suena y suena y nada. Decido llamar otra vez.

-¿Hola?- la voz de una señora retumba por mis oídos, no es Emi.

-¿Se encuentra Emily?-

-Oh si, Emi. Tienes llamada.- y la llamada se cae dejándome en silencio.

Supongo no quiere saber de mí. Me quedo allí mirando a la nada, viendo como la gente sonríe gratamente ante la idea de que un año se vaya y venga uno nuevo. Quien sabe que cosas va a traer este año.

Voy al mismo contacto y esta vez escribo un mensaje de texto.

"Hola, solo pasaba a desearte un feliz año nuevo... ojalá que sigas siendo parte de mi vida éste 2017. Te extraño demasiado..."

No me siento bien escribiendo más, no se nisiquiera si me va a contestar.

Me levanto de la silla y camino hasta donde mamá que está besándose alocadamente con papá.

Es asqueroso por cierto...

-diez, nueve, ocho, siete, seis..-

Mamá toma mi mano y la agarra fuerte mientras me sonríe.

-Cinco, cuatro, tres, dos, uno... ¡Feliz año nuevo!- todo se vuelve una locura.

Abrazo a mis padres y solo me limito a sonreír.

El teléfono vibra en mi mano y era ella.

Me tapo un oído y me pongo el teléfono en el otro. -¿Hola?-

-Bradley...- suspira. Era su voz.

-Emi. Te extraño. Déjame salir a un lugar con menos ruido. Voy al hotel, te llamo luego.- cuelgo y pongo el telefono dentro de mi abrigo.

-Mamá, papá. Me voy, voy al hotel.-

-Pero hijo, apenas empieza el nuevo año y ya te vas.- Mamá frunce su sonrisa.

-Tengo cosas importantes que hacer. Los quiero, felicidades.-

Ambos me sonríen y camino a paso rapido. Realmente el hotel es demasiado cerca, queda al lado de la tienda de cristales.